Los 10 “no” más importantes cuando decides pintar tu hogar
Aunque las ideas están a la orden del día y las ganas de pintar nuestra casa también, hay que interiorizarse antes de encarar el proyecto para cometer los mínimos errores posibles.
Por eso, en esta nota te contamos los 10 pecados capitales (estos son 10) en los que jamás debes incurrir si quieres tener un buen inicio en este nuevo rol de pintor de brocha gorda.
1. No estar desinformado: hay varios detalles que debes aprender al comenzar. Uno de ellos es que existen 2 variedades principales de pinturas. Al aceite (o esmaltes, que son las más indicadas para maderas) y al agua (o látex). También hay distintos tipos de acabados, entre los que se encuentran el satinado (con algo de brillo), el brillante (que refleja mucho la luz como si la superficie estuviera mojada) y el mate (que no tiene brillo).
2. No empezar sin tomar medidas básicas: es importante quitar los muebles que puedan moverse y tapar los fijos con sábanas viejas. Asimismo, no debemos dejar el piso y los interruptores al descubierto. En las ferreterías se consigue un plástico de pintor para cubrir el suelo, o se puede colocar una manta que sea algo impermeable. Los interruptores se pueden proteger con cinta de pintor o simplemente retirar, hasta que se seque la zona para que queden más prolijos.
3. No olvidarse de preparar las paredes: tampoco debemos aplicar la pintura cuando la superficie es muy porosa. Lo ideal es colocar previamente un fijador para que luego esta se adhiera. Cuando hay manchas de grasa o de otro tipo, hay que lavarlas con un detergente suave y enjuagarlas. Una vez que el muro se encuentra bien seco recién se puede comenzar con el color. Si existen capas de pintura anterior descascarada, primero hay que quitarlas con una espátula y luego lijarlas para que queden parejas. Recién después se pincela.
4. Nunca pintar las paredes húmedas o con grietas: en el caso de que exista humedad, primero es imprescindible arreglar el problema para luego aplicar el enduído, esperar que se seque, lijar y recién después pintar. Si no, de nada servirá nuestro trabajo.
5. No comenzar por los muros: lo primero que debemos empezar a pintar es el cielorraso, porque puede salpicar algunas zonas que se encuentran debajo. Luego se continúa por las paredes, las ventanas, las puertas y, por último, el zócalo.
6. Prohibido elegir colores oscuros en: ambientes pequeños o techos bajos, debido a que dan sensación de reducirlos y, como si fuera poco, pierden luminosidad.
7. No, a los tonos claros y luminosos cuando: queremos disimular un acabado que no nos agrada demasiado.
8. No dejar las aberturas cerradas mientras pintamos: este es un "no" muy importante. El olor de la pintura a veces puede resultar tóxico. Además, cuando el ambiente está aireado las paredes se secan más rápido.
9. No utilizar los elementos incorrectos para cada función: los pinceles deben ser de buena calidad. El rodillo es mejor para el techo y la brocha, para las uniones o ángulos de las paredes.
10. No apurar el tiempo de secado entre mano y mano: además de saber que hay que pasar más de una mano de pintura, es fundamental que esta se seque correctamente. De lo contrario podría arruinar el acabado.
Quizás te interese:
Cómo decorar espacios pequeños
Significado del desorden
Los colores pueden afectar el desarrollo de tu bebé