Primeras veces

Todas las mujeres recordamos el primer beso. No sólo con quién fue sino cómo estuvo, dónde se produjo. Y ni que hablar del primer encuentro sexual. ¡Recuerdo hasta cómo fue la ropa interior que estrené! Pero supongamos que a éstas experiencias no las hemos olvidado porque somos unas románticas incorregibles, ¿qué hay entonces de esas otras primeras veces inolvidables? Aquellas vacaciones en las que debutamos yendo con amigas; ese par de zapatos que compramos con el primer sueldo; el vinilo con el que estrenamos equipo de audio...

Nunca es tarde para atreverse - Thinkstockphotos
Nunca es tarde para atreverse - Thinkstockphotos

Hoy, con esta lista en la mano, es posible que sientas que son todas parte del pasado. Y que te cueste recordar que otras cosas has hecho por primera vez ayer, hace un mes, el último verano. ¿Por qué se reduce la lista? ¿No será que estamos tomando menos riesgos?

Algo de eso hay. A medida que crecemos nos exponemos menos. El miedo al fracaso o al ridículo nos vuelve más conservadores y nos dejamos ganar por la rutina con tal de no arriesgar. Puede ser que así seamos felices pero si sientes la falta de vértigo en tu vida, es hora de que veas cómo salirte de ese círculo vicioso. Aquí van algunas ideas para que lo logres:

- Definir las metas: No tiene mucho sentido asumir un riesgo para alcanzar algo que no deseas. Conviene entonces ser muy específico en la definición del objetivo. Después conviene que evalúes los resultados posibles, tanto los buenos como los malos, y que veas qué debes hacer para que eso pase o, por el contrario, para que no suceda.

- Reunir información: Este paso es importantísimo porque solo sabiendo de qué se trata realmente lo que quieres hacer, podrás prepararte. Sea esto una carrera universitaria, un viaje o un deporte de alto riesgo.

- Registrar los imponderables: No creas que por haber "hecho los deberes" lo controlas todo. Por suerte existen los imprevistos. Y no los vivas como un obstáculo sino como un gran desafío a sortear.

- Imagina tu vida si lo logras: Visualízate triunfador tras haber alcanzado el objetivo y haber tenido otra "primera vez" para no olvidar. No pierdas de vista que cuando las personas se centran en por qué quieren conseguir algo, tienen más probabilidades de conseguirlo que cuando se centran exclusivamente en cómo conseguirlo.

- Arranca: Basta de dar vueltas y empieza a actuar. Este es el momento en el que la adrenalina convertirá todo lo que suceda en único e irrepetible. Digno de ser contado…

¿Cuándo fue la última vez que hiciste algo por primera vez? ¿Cuál es tu próximo desafío?

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