Claves para saber si eres una madre autoritaria
Por: Silvia Renata Figiacone
En el camino de crecer para ser buen padre, debemos todos reflexionar acerca de lo que se llama pautas parentales de crianza. A pesar de que para cada uno de nuestros hijos somos únicos, investigaciones llevadas a cabo desde hace cincuenta años revelan que no somos tan originales. Existen, de acuerdo a la ciencia del desarrollo, cuatro tipos de pauta parental bajo las que todos nosotros podemos ser clasificados: la pauta autoritaria, permisiva, indiferente y democrática.
Según Benson & Haith, la pauta parental consiste en una serie de elementos que se combinan para crear el clima emocional en el que los padres comunican sus actitudes y prácticas en relación a la crianza.
La pauta parental traduce directamente lo que los padres consideran responsabilidad de los chicos y las creencias que tienen acerca de sus hijos, su comportamiento y su crecimiento.
El estilo de crianza se expresa a través del lenguaje corporal, el tono de voz, la manera de expresar afecto y el modo en el que se presta atención a las necesidades y comportamientos de los chicos. Son pautas consistentes que se sostienen a lo largo del desarrollo y marcan el sello de cada mamá o papá.
Los autores sostienen (Benson & Haith) que la cultura es asimismo informante de cómo ser padre. Cada pareja de padres está signada por los valores, creencias y modos de proceder de la cultura a la que pertenecen y es la cultura una de las variables que modela directamente cómo cada uno de nosotros ejerce la paternidad.
El seminal trabajo de Baumrind de la década del sesenta definió la pauta parental a través de dimensiones:
- Nivel de control
- Claridad en la comunicación
- Demanda madurativa
- “Nutrición” (no referida a la alimentación sino a lo que se provee socioemocionalmente)
Cada estilo de crianza tiene una serie de características que lo identifican y un impacto determinado sobre el desarrollo de los chicos.
En esta entrada, repasaremos las características del padre autoritario, considerando que es una de las pautas de crianza que puede tener efectos negativos a largo plazo y facilitar el tránsito por la infancia de manera menos feliz que otras pautas.
¿Cómo es un padre autoritario?
- Insiste acerca de la importancia de la obediencia, el control parental, el orden, el respeto a la autoridad y la conformidad para con lo que se exige
- Otorga altos niveles de exigencia con poca claridad en la comunicación y menor tendencia a nutrir afectivamente
- Espera obediencia completa. Pone cota a cualquier actividad que considera desafío a las normas ofrecidas
- Otorga poco valor a la libertad individual de los chicos
- Tiende a usar castigos más severos que otros estilos y penaliza cada acción que se desvía de lo que espera
- Tiende a minimizar los deseos de los chicos y a pretender que el hijo quiera o se comporte de la manera que el padre quiere o desea
- Desprecia o desvaloriza la tendencia a la autonomía de sus hijos
- Obstaculiza la posibilidad de que los chicos tomen decisiones o tengan experiencias con algún grado de libertad
- Anulan la posibilidad de diálogo recíproco y no aceptan ningún tipo de negociación
- Responden menos cariñosamente al llanto o la expresión de angustia de los chicos
- Explican poco o nada las razones detrás de las reglas, las reglas deben ser cumplidas porque son reglas y sin discusión
Consecuencias del estilo autoritario
Ser un padre autoritario puede tener influencia directa en el desarrollo y bienestar de los chicos. Algunas de las consecuencias de sostener este tipo de pauta pueden observarse a lo largo de toda la vida de los hijos y constituirse como pilares de algunos de sus rasgos de personalidad.
El impacto de la pauta autoritaria de crianza puede referirse de la siguiente manera:
- Daño a la autoestima o tendencia a obstaculizar el desarrollo de autoestima positiva
- Disminución de los niveles de motivación por presencia de pautas coercitivas y por la tendencia a minimizar los intereses propios de los chicos
- Impacto sobre el desarrollo de la competencia social en tanto se gesta un clima en el que las necesidades de los chicos son frecuentemente ignoradas así como sus creencias y opiniones con el impacto significativo que ello implica sobre la posibilidad de que los pequeños sean asertivos
- Menor capacidad para tomar la iniciativa y mayor tendencia al aislamiento
- Reducida tendencia a la espontaneidad, menor capacidad de ser creativos y menos inclinación a comportarse de modo espontáneo
- Menor desarrollo de la curiosidad intelectual
- Disminuido desarrollo de la conciencia moral, mayor tendencia a apoyarse en reglas que se dan que a internalizar y generalizar normas morales
Estas y otras dificultades pueden resultar de una pauta parental que tiende al autoritarismo. Más allá de ello, si nos ponemos en los zapatos de un niño que crece en un entorno de esas características, lo más probable es que una de sus experiencias nucleares sea sentirse abandonado o poco querido, que sienta que nunca es suficiente para conformar o alegrar a los padres y que nada de lo que haga será realmente lo que sus padres esperan. Vivir así es, posiblemente, una manera dolorosa de atravesar una etapa que se supone, está entre las más felices.
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