Brie Larson se emocionó hasta las lágrimas al conocer en persona a Jennifer Lopez, que quedó sorprendida por su reacción

Jennifer Lopez y Brie Larson, emocionadas en la alfombra roja
Jennifer Lopez y Brie Larson, emocionadas en la alfombra roja

El ritual de la alfombra roja durante la temporada de premios tiene como objetivo promocionar a los nominados de cara a los galardones por venir, entusiasmar al público con las películas y ciclos televisivos en competencia y de paso reiterar el costado más glamoroso de Hollywood que se despliega en este tipo de eventos. Lo que el desfile de estrellas no suele ser es un lugar para la espontaneidad y la emoción genuina . Y sin embargo, anoche en los Globo de Oro uno de los momentos más emotivos del festejo ocurrió antes de que comenzara la ceremonia, sobre la alfombra roja y por fuera de cualquier tipo de libreto.

Las protagonistas de la historia fueron Brie Larson y Jennifer Lopez y todo comenzó cuando la primera, nominada como protagonista y productora por la miniserie Lecciones en química, disponible en Apple TV+, era entrevistada por un comentarista del programa Entertainment Tonight. La charla con Larson estaba apenas comenzando cuando la actriz vio que otra estrella se aproximaba para subir a la plataforma, en dónde se llevaban a cabo los reportajes. Fue en ese instante que, mientras que Lopez se alistaba para aparecer en cámara, Larson se dio cuenta de a quien tenía a su espalda. Y a su alcance. Ahí comenzó la divertida y caótica escena. Conmovida hasta las lágrimas ante la presencia de JLo, la ganadora del Oscar por su papel en la película La habitación, se transformó en la fanática número uno de su colega . Nerviosa y descolocada por el cruce con su ídola, Larson intentaba escapar de la plataforma mientras el notero trataba de calmarla sin éxito. Con lágrimas corriendo por su cara y poniendo en riesgo el meticuloso trabajo de su equipo de maquilladores, la protagonista de Capitana Marvel, logró sobreponerse lo suficiente para saludar a Lopez que no entendía del todo lo que estaba ocurriendo. Por suerte, Larson se lo explicó rápido y las cámaras estuvieron ahí para captar todo lo que sucedió a continuación.

“Sos tan importante para mí. Vi Selena y me hizo querer ser actriz”, le decía Larson a Lopez mirándola a los ojos y sosteniendo sus manos con delicadeza. “Me vas a hacer llorar”, contestaba la actriz y cantante que había llegado a los premios Globo de Oro para acompañar a su marido, Ben Affleck, nominado por su trabajo en la película Air (disponible en Amazon Prime) y para promocionar la salida de su próximo trabajo, un disco y film que documenta los últimos veinte años de su vida y carrera. “Tu ética de trabajo es tan admirable. Soñé con conocerte por mucho tiempo. Gracias, gracias”, cerraba la intérprete de The Marvels al tiempo que aseguraba que después del encuentro necesitaba “un shot de tequila” para calmarse. Pero antes de eso, como si fuera alguna de las mujeres mirando la alfombra roja desde su casa, se dio vuelta para gritarle a su acompañante en la ceremonia: “¡Mamá, es Jlo!”, una exclamación tan jubilosa que provocó carcajadas en su ídola. Al final de la velada aunque no ganó ninguna estatuilla, seguramente Larson debe haberse sentido la gran triunfadora de la noche en la que por fin su sueño se hizo realidad.

Amigos son los amigos

Otro de los momentos de la noche que divirtió y enterneció a los espectadores de la 81° edición de los Globo de Oro también tuvo algo que ver con la señora Lopez. Es que aunque JLo no estuvo acompañada por su marido Ben Affleck en la alfombra roja, el actor y realizador sí asistió a la ceremonia en la que Air, el film que dirigió y protagonizó competía en dos categorías: mejor comedia y mejor actor de comedia para su socio y mejor amigo Matt Damon. Y de hecho, mientras su esposa tenía su momento de conexión con Larson afuera, intramuros, Affleck reconfirmó el lazo que lo une desde la infancia con Damon al sorprenderlo en la mesa, en donde antes del comienzo de la transmisión el actor nominado conversaba con su esposa Luciana Barroso, abrigada con el saco del traje de su marido mientras el salón del hotel Beverly Hilton comenzaba a llenarse. La sinceridad de la sonrisa de ambos cuando se dieron cuenta de la presencia de Affleck y el abrazo que siguió fueron tomados por las cámaras de la cadena CBS, uno de los pocos aciertos de la transmisión de los Globo de Oro que, lamentablemente, no tuvo muchos otros.