Britney Spears asegura que su madre es la auténtica villana de su historia

Ahora que parecía que el drama vital de la cantante Britney Spears había terminado, resulta que una nueva antagonista aparece en escena y pasa al primer plano y no es otra que su madre, Lynne.

La Corte de Los Ángeles dictó sentencia a finales de septiembre sobre el tema de la tutela legal de la artista que llevaba 13 años a cargo de su padre, Jamie Spears. Desde el preciso momento en que la jueza sentenció, se dictó una vista para el 12 de noviembre en la que también se pondrá punto y final al tema de la custodia de Brit.

El movimiento #FreeBritney siempre tuvo dos claros enemigos, por un lado el padre de ella, al que siempre han acusado de gastarse su dinero y de oprimirla sin dejarla tomar ningún tipo de decisión final y, por otro lado, a su madre que le habría dado la idea del tema de requerir su tutela legal en 2008.

Esto nunca se había confirmado hasta ahora que la propia Spears ha colgado un post en redes sociales que ha borrado minutos después. El post de Britney reza: “Ahora sonrío y me he dado cuenta de que hace mucho que no lo hacía. En ese momento mi madre se preocupa diciendo 'estás actuando rara, ¿qué te pasa?’”. ‘Mi nombre es Britney Spears, ¡encantada!,’” ironiza la cantante que parece haberse reencontrado a sí misma ante el asombro de su progenitora.

La artista, prosigue diciendo que: "Mi padre puede haber comenzado la tutela hace 13 años, pero lo que la gente no sabe es que mi madre es la que le dio la idea. Nunca recuperaré esos años, ella arruinó mi vida en secreto y sí, la señalaré a ella y a Lou Taylor por ello”, sentencia.

La diva del pop asegura que aunque su madre y la portavoz de la familia hagan ver que no tienen ninguna relación con su tutela sí la tienen y las invita a irse a paseo por hacer ver que no.

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Aunque los fans de Britney denunciaron esto hace años, al inicio de su caso a nivel mediático, lo cierto es que Lynne y ella siempre han permanecido unidas, al menos, de cara al aparador. Tanto es así que Lynne y Britney han escrito dos libros juntas, uno llamado “Heart to Heart” y el otro fue “Brave New Girl”, además Lynne escribió un libro “A través de la tormenta” que hablaba de cómo la fama había afectado a su familia.

A nivel mediático y judicial Lynne siempre ha ayudado a su hija y, de hecho, ha jugado un papel relevante para que le retirasen la tutela a su exmarido. Este verano comunicó ante el tribunal que su hija ya tenía total capacidad para cuidar de sí misma.

En 2019 Lynne solicitó a la jueza participar en el proceso legal y es que, aunque en 2008 sintió que su hija “tenía la necesidad de que la rescataran”, en la actualidad ya no lo ve de ese modo. Los abogados de la madre de Brit aseguraron que es “una madre muy preocupada que quiere echar el freno al control y las restricciones diarias que sufre Britney” bajo dicha tutela legal.

Asimismo le comunicó a la autoridad pertinente que “las capacidades de mi hija son muy distintas a las que tenía en 2008” y es que en aquel momento, en pleno ‘breakdown’ mental, Brit quizá no podía decidir por sí misma pero ahora, ya recuperada, tiene todo el derecho a decidir si se casa o no, a organizar su agenda, a tener más hijos y a un sinfín de cosas que la tutela le impedía sin el beneplácito de su padre.

Y, al año siguiente, en 2020, aseguró de nuevo ante la sala judicial que “se me rompe el corazón al ver hasta qué punto ha llegado todo, es hora de que Britney empiece de nuevo” y afirmó que su exmarido veía a su hija como un caballo de carreras.

Todos estos gestos en favor de la ansiada libertad de Spears no han sido suficientes para que su hija le agradezca y es que debe ser mucho el dolor acumulado durante más de una década. Lo sospechoso del asunto es que este post que Brit ha publicado y borrado enseguida llega un día después de que Lynne solicitara que el patrimonio de su hija pague los honorarios de sus abogados.

Su equipo legal ha estado batallando en favor de la estrella del pop y se han gastado 660.000 dólares que ahora espera que su hija pueda pagar, quizá a raíz de esta petición Britney ha estallado y ha hecho público todo el asunto contra su madre.

Una cosa es cierta y, siendo justos con Lynne, es natural que una madre preocupada al ver a su hija perdiendo la cabeza en 2008 tuviese la idea de una tutela legal para protegerla a ella de sí misma.

Años después, cuando Brit ya está de nuevo equilibrada y lista para ser libre, Lynne la ha estado apoyando con sus testimonios ante la justicia y luchando contra su exmarido así que reprocharle esto ahora parece algo egoísta por parte de Spears aunque, por otra parte, es difícil meterse en la piel de alguien que ha vivido encarcelado bajo esa tutela 13 años de su vida.