Esta cantante se someterá a una operación para reconstruir su nariz con un trozo de costilla
La estrella de Atomic Kitten pasó una buena parte de la etapa de mayor éxito en su carrera luchando contra las adicciones mientras se automedicaba para lidiar con la presión de la fama y con su trastorno bipolar. A sus 43 años puede decir con orgullo que está completamente sobria, pero todavía sigue arrastrando una serie de problemas de salud que no desaparecerán por sí solos.
Uno de los más molestos es consecuencia del consumo de cocaína, que le destrozó por completo las fosas nasas. A día de hoy viven con los síntomas de un resfriado permanente, que le provocan congestión y una sensación de moqueo constante.
"Mis hijos dicen que me oyen en una tienda antes de verme", ha bromeado acerca de su costumbre inconsciente de sorber con fuerza a través de la nariz.
Ahora Kerry está esperando que le den una fecha para someterse a una cirugía que reconstruirá los pasajes nasales utilizando tejidos de otras partes de su cuerpo, en concreto un trozo de hueso que extraerán de sus costillas. "Con suerte, será cualquier día de estos", ha desvelado.
La cantante no se arrepiente de su pasado, porque reconoce que vivió momentos muy divertidos y todas esas experiencias la han llevado hasta el momento en que se encuentra en la actualidad, pero le preocupa lo que puedan pensar sus hijos en un futuro cuando lean los escándalos que protagonizó en sus momentos más bajos.
"Mi pasado siempre saldrá a relucir, pero no lo cambiaría, ya que dio forma a la persona que soy hora. No se trata de cuántas veces te caes, sino de cuántas veces te levantas... No me avergüenzo de mi pasado, pero lamento la vergüenza que ha supuesto para mis hijos".