La centella asiática, planta que ayuda a la cicatrización de heridas

CIUDAD DE MÉXICO, abril 12 (EL UNIVERSAL).- Los alimentos y las plantas que nuestra madre naturaleza ofrece y pone a disposición de la humanidad son importantes fuentes de nutrientes, minerales y demás componentes que son positivos para el cuidado de la salud.

Esto no es nuevo, desde tiempos ancestrales la medicina tradicional ha tenido en la naturaleza su principal aliado para enfrentar dolencias, afecciones y prevenir distintas enfermedades.

En este marco, en la cultura india es la medicina ayurvédica la que se ha erguido como la medicina que busca curar a través de cambios en los hábitos de vida y con la utilización de elementos de la naturaleza para realizar preparados a los que atribuyen propiedades sanadoras. En esta oportunidad, tomaremos una de las plantas insignia de esta tradición para remarcar cómo ayuda a la cicatrización de heridas.

La planta de la que te hablaremos es la centella asiática, una especie originaria India, Japón, China y el sudeste asiático, aunque con marcada presencia también en otros rincones del mundo con climas tropicales y subtropicales. Según la Biblioteca Nacional de Medicina e Información Biotecnológica (BIH), es considerada como una de las más veneradas en las medicinas tradicional china y ayurvédica por los grandes aportes que hace a la salud.

Entre los beneficios de la centella asiática en el cuidado de la salud se destacan sus propiedades antioxidantes que colaboran en el cuidado de las células ante los radicales libres y en la prevención de enfermedades del corazón. Además, este alimento mejora la circulación de la sangre por lo que, por lo general, se lo recomienda para tratar las várices.

La centella asiática también es indicada como un apoyo para las funciones cognitivas y por sus propiedades antiinflamatorias por lo que la dermatitis y la artritis están bajo su órbita. Sin embargo, uno de los beneficios más importantes que se destacan de esta planta es que ayuda a la cicatrización de heridas.

Fue en 1852 cuando el doctor Boileau notificó por primera vez el uso de esteroides aislados de la centella asiática para este fin. Al respecto, existe evidencia científica sobre su utilización para el tratamiento de la lepra ya que estimula la producción de colágeno e incrementa la vascularización en la zona de la herida, por lo que colabora acelerando la curación de estas.

La centella asiática puede encontrarse en presentaciones como cápsulas, líquidos o extractos, por lo que su utilización dependerá siempre de la información suministrada por los fabricantes y la correspondiente consulta con el médico.