Comida salada generaría más hambre
Texto: Lizbeth López
Aunque mucha gente puede sentir una sed imperiosa después de comer alimentos con altos niveles de sal, un reciente estudio desmiente que, en estos casos, el cuerpo necesite agua y revela que, en realidad, siente más hambre.
La investigación, publicada en la revista The Journal of Clinical Investigation, señala que, contrario a la creencia, la ingesta alta de sal podría hacer que las personas consuman menos agua, pues este ingrediente generaría retención de líquidos en el cuerpo.
Dieta bajo control
Investigadores del Centro de Medicina Molecular Max Delbrück, el Centro Aeroespacial Alemán, y la Universidad de Vanderbit, aprovecharon una simulada misión en Marte para averiguar qué sucedía en el cuerpo con esta dieta. De acuerdo con el sitio especializado Science Daily, se aprovechó esta misión falsa por las condiciones en las que se requiere de todo el ahorro posible del líquido vital y se controla cada gramo de consumo.
Las pruebas
Los científicos sometieron a dos grupos de 10 voluntarios a una dieta idéntica, probando diferentes niveles de sal en sus alimentos por algunas semanas. Como ya se sabía, durante los periodos con consumo alto, las personas orinaron más, pero se comprobó que no es porque hubiesen bebido más agua.
De hecho, los integrantes del estudio bebieron menos, pues la sal activó en los riñones un mecanismo para conservar líquidos, desechando el sodio por medio de la orina.
¿Y el hambre?
Pero, ¿por qué se sintieron más hambrientos? Los investigadores explican esta reacción debido a que la síntesis de la urea, la sustancia que permite la retención de los líquidos en el cuerpo y por otro lado elimina el sodio en la orina, es un proceso que consume mucha energía corporal y entonces el cuerpo requiere más alimento.
Este estudio mostró que la función de la urea en el organismo es más importante de lo que se creía. “Resulta que es un osmolito muy importante, un compuesto que se adhiere al agua y le ayuda a transportarse. Mantiene el agua en nuestros cuerpos y elimina la sal. La naturaleza encontró una forma de conservar el agua, que, de otra manera, se iría en la orina”, según cita Science Daily.
Así que ya lo sabes, tus consumos de sal podrían hacerte creer que en el corto plazo beberás más agua, pero en realidad solo generarías que tu cuerpo se sintiera con más hambre, lo que puede orillarte a ingerir más comida.
¿Has experimentado este fenómeno en tu cuerpo? Déjanos saber en los comentarios.
@LizbethComunica
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