Consejos para cuidar una planta kokedama

Texto: Cintia Saporito

Grandes alternativas para embellecer los ambientes, cuidar de una planta kokedama podría aparentar un desafío para el ojo inexperto. ¡Pero no temas sumarla a tu hogar! Aunque luzca delicada es, en realidad, bastante sencilla de mantener. Descubre cómo.

Aunque fácil de mantener, tu kokedama precisará de cuidados. – Foto: Andrés Mora/EyeEM/Getty Images
Aunque fácil de mantener, tu kokedama precisará de cuidados. – Foto: Andrés Mora/EyeEM/Getty Images

1. Comienza con la tierra correcta

Si decidieras fabricarla tú mismo, para lograr mantener viva a esta “bola de musgo”, como indica su nombre en japonés, precisarás comenzar con la combinación de tierra correcta: 7 partes de turba y 3 de tierra para bonsái (akadama), indica la revista Better Homes & Gardens. Puedes conseguirla en la mayoría de los centros de jardinería.

2. Hidrátala en un bote de agua

Como con cualquier planta, proporcionarle el riego adecuado es fundamental. Pero, ¿cómo hacer con una kokedama que no trae un platillo? Una buena estrategia es remojar la bola de musgo en una fuente con agua a temperatura ambiente, por 5 a 10 minutos, especifica el sitio Costa Farms.

3. Apórtale nutrientes

El cuidado de una kokedama te implicará, además, su fertilización. Claro que, la frecuencia con que deberás hacerlo dependerá de cuánto quieras que crezca, agrega el portal. Ya sea que decidas “alimentarla” una vez a la semana, o tan poco como dos veces al año, podrías utilizar un fertilizante soluble en agua, sumándolo a la fuente que uses para regarla.

Pero si, en cambio, prefirieras optar por un fertilizante de liberación prolongada, solo precisarás mezclarlo con la tierra usada para formar la bola de musgo.

4. Permítele obtener la luz adecuada

Al elegir la ubicación de tu kokedama, asegúrate de que podrá recibir allí la cantidad de luz precisa que requiera para crecer saludablemente. Pero, como algunos ejemplares tolerarán mejor la iluminación directa que otros, durante el primer mes presta especial atención a cómo reacciona a la posición que le hayas elegido, sugiere el sitio Petite Planet.

5. Pódala, si fuera necesario

Muchas plantas se benefician al ser podadas. Por lo que, si ves que tu kokedama se ha puesto demasiado grande, no temas en recortar el musgo de la bola, así como las hojas secas, para estimular la aparición de nuevos brotes. Solo asegúrate de leer primero acerca de la especie particular que tú tengas, pues podría favorecerse si lo hicieras en una época particular del año, concluye el portal.

Y tú, ¿cómo mantienes bellas a tus plantas?

@cintiasaporito

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