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CRÍTICAS. Un Shyamalan siniestro, un encuentro de damas legendarias y más estrenos en salas y plataformas

Mientras los seres humanos seguimos lidiando con una ola de frío particularmente intensa en esta parte del mundo, la cartelera de cine tanto presencial como virtual se renueva con propuestas que apuntan a diferentes géneros y públicos. Esto es lo que podrás ver en salas de cine y en opciones caseras de visionado.

KNOCK AT THE CABIN

Director: M. Night Shyamalan

Reparto: Dave Bautista, Jonathan Groff, Ben Aldridge

Género: Terror psicológico / Apocalíptico

Tras una serie de películas que no estuvieron probablemente a la altura de sus mejores esfuerzos (aunque debo confesar que disfruté mucho de “The Visit”, de 2015, y “Split”, de 2016), M. Night Shyamalan nos sorprende con una película que, sin llegar a ser perfecta (¿alguna de las suyas lo ha sido?), resulta plenamente efectiva, está muy bien actuada y filmada y plantea interrogantes dignas de interés.

“Knock at the Cabin”, cuyas funciones en salas de todo el país se inician este jueves, se basa en “The Cabin at the End of the World”, una novela de terror del 2019, marcando con ello la segunda ocasión en la que el director indio-americano toma como referencia abierta una obra literaria ajena para crear un guion propio tras adaptar una novela gráfica francesa para la elaboración de su cinta anterior, “Old” (2021), que estuvo protagonizada por el mexicano Gael García Bernal, que tuvo una recepción bastante tibia por parte de la crítica y que, tal y como sucede ahora, alteraba aspectos clave de la historia original para ofrecer una resolución mucho más comercial y positiva que la que se encontraba en las páginas impresas.

Esto decepcionará sin duda a los devotos de un libro que, sinceramente, no sabíamos hasta ahora que existía; pero si se ignora el detalle, “Knock at the Cabin” es de todos una cinta profundamente siniestra -¡esa banda sonora!- con una lograda predilección por la tensión desmedida que se produce desde la primera escena, cuando los juegos de la niña Wen (Kristen Cui) a la entrada de la cabaña de campo a la que ha llegado en compañía de sus padres Eric y Andrew (Jonathan Groff y Ben Aldridge) se ven súbitamente interrumpidos por la visita de Leonard (Dave Bautista), un desconocido de imponente presencia pero de amables modales.

El pedido de Leonard y de las tres personas que lo acompañan no es fácil de cumplir: según las visiones que cada una de ellas ha tenido, esta familia atípica debe sacrificar voluntariamente a uno de sus integrantes para impedir la llegada del Apocalipsis, a semejanza del sacrificio que se le pide a Abraham en La Biblia.

Esta premisa desata una serie de circunstancias y de discusiones sobre la fe religiosa, la solidaridad humana, la capacidad de perdón y las secuelas de la homofobia que se desarrollan mayormente al interior de la misma cabaña y que, sin estar siempre manejadas por una lógica a prueba de balas ni aprovechar a plenitud la complejidad de su potencial -algo que sucede habitualmente con Shyamalan-, superan con creces lo que se ve habitualmente en el ‘mainstream’ hollywoodense.

Sorprende además la notable actuación de un Bautista que se ha alejado ya de las películas de superhéroes, el hecho de que se haya elegido a actores realmente gays para interpretar a la pareja estelar y, por supuesto, la puesta en escena del director, que filma en 35 mm, usando tomas largas y recurriendo a veces a primerísimos planos para retratar del mejor modo posible las emociones plasmadas por sus intérpretes.

80 FOR BRADY

Director: Kyle Marvin

Reparto: Lily Tomlin, Jane Fonda, Rita Moreno, Sally Field

Género: Comedia / Deportes

Algunas de ellas no se acercan tanto a la década representada en el título de la película. Rita Moreno tiene ya 91; Jane Fonda 85; Lily Tomlin 83 y Sally Field solo 76. Pero la química entre todas estas estrellas vivientes de la actuación funciona de maravilla en el primer encuentro fílmico de sus carreras, más allá de lo que sucede con una película que le debe sus mejores momentos al encanto intrínseco de estas damas -Field es definitivamente la más llamativa-, que resulta mayormente intrascendente y que depende demasiado del conocimiento que se tenga de la NFL (National Football League) como para generar un impacto real fuera de las fronteras estadounidenses.

Eso no quiere decir que “80 for Brady” esté impedida de llegar a una audiencia diversa, porque puede resultar tanto atractiva para la gente de cierta edad que admire la carrera de las veteranas que la protagonizan como para los amantes del deporte nacional por excelencia, un factor que debería verse incrementado por la presencia del ídolo Tom Brady, quien participa no solo como productor, sino también como actor, representándose a sí mismo durante la época del Super Bowl del 2017, considerado por los especialistas como el mejor de todos los tiempos.

Al leer los comentarios hechos por los usuarios de Facebook bajo el tráiler de la cinta, encontramos una gran cantidad de críticas viscerales a la presencia de Fonda en el filme, sustentada en la visita que hizo a los combatientes contrarios a los Estados Unidos duranta la ya lejana Guerra de Vietnam, y que le dio el ingrato apelativo de ‘Hanoi Jane’; habrá que ver cómo afecta esto a la taquilla de “80 for Brady”.

Pero lo cierto es que estamos ante una producción completamente libre de aspectos políticos o sociales en la que se cuenta la historia de cuatro mujeres mayores de Massachusetts que se interesan súbitamente en el futbol americano y que, luego de ganar boletos para la edición descrita del evento, que se llevó a cabo en Houston, se meten en una serie de enredos y aventuras que no dejarán huella alguna en la historia del cine, pero que no dejan de resultar simpáticos, entretenidos y moderadamente emotivos, fuera de las manipulaciones sentimentales, narrativas e históricas de lo que se cuenta en el guion escrito por Emily Halpern y Sarah Haskins (“Booksmart”), que merecía ser mucho mejor.

OCEAN BOY

Director: Tyler Atkins

Reparto: Luke Hemsworth, Rasmus King, Isabel Lucas

Género: Drama

Pese a que Australia es el paraíso del surf y de las playas increíbles, el cine proveniente de dicho país ha sido principalmente reconocido por sus historias relacionadas al desierto y a diversas vertientes del ‘western’; no recordamos haber visto ninguna película de ficción vinculada a este aspecto particularmente placentero del país más grande de Oceanía. Y es por eso que la llegada a nuestras costas de “Ocean Boy” (que se estrena de manera simultánea en salas selectas -incluyendo a la Arena Cinelounge de Hollywood- y Video On Demand) posee desde el inicio un atractivo particular.

El protagonista del relato escrito por Tyler Atkins (también director) y ubicado a fines de los ’80 es Rockit (Rasmus King), un adolescente de 13 años que vive con su padre Bosch (Luke Hemsworth, de “Westworld”) mientras anhela que su madre, ausente desde hace mucho, regrese al hogar. Más allá del nombre que tiene, Rockit no es un jovencito convencional; lleva el pelo largo, prefiere mil veces subirse a una tabla que ir a la escuela y es hijo de un hombre carismático pero irresponsable que se dedica a la cosecha y la venta de marihuana durante una época en la que el producto es completamente ilegal.

Cuando Bosch se mete en problemas con las autoridades, arrastra al muchachito a un viaje sin destino claro que disfraza de vacación extensa y que lleva a los dos a Byron Bay, un llamativo destino turístico donde el primero encuentra un nuevo romance y el segundo traba amistad con una chica que podría convertirse en su primer amor.

Todo lo dicho puede sonar a cliché, y hay definitivamente algo de eso en una película que no profundiza en los interesantes temas que trata y cuya puesta en escena se inclina muchas veces por un innecesario estilo de tinte publicitario; pero eso no le quita interés a los personajes principales -Hemsworth y King están estupendos en sus roles- ni a la impresión general dejada por una cinta que, en medio de sus imperfecciones, ostenta pequeños momentos de magia, divierte con el empleo del dialecto local por parte de sus protagonistas y, por supuesto, ofrece cautivadoras imágenes realizadas sobre la cresta de las mejores olas del planeta.

Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.