Daniel “La Tota” Santillán: escándalos mediáticos, denuncias por violencia de género, depresión y una muerte que dejó su marca
Este domingo, se conoció la noticia de la muerte de Daniel “La Tota” Santillán. El reconocido conductor y productor de la movida tropical tenía 57 años y fue hallado muerto en su domicilio de Castelar. Si bien aún s e desconocen las causas de su muerte, el parte policial dice que el artista estaba tirado en el piso con quemaduras provocadas por un posible foco ígneo; cerca de su cuerpo, había una botella de líquido inflamable y fósforos . En las próximas horas, se practicará una autopsia para revelar si se trató de un accidente o un suicidio.
En el último tiempo, el animador que también incursionó en el canto y en la actuación estaba atravesando un difícil momento personal y profesional. Desde hace años, Santillán padecía bipolaridad y depresión debido a sus problemas de adicción, los conflictos legales con sus ex y la poca relación que mantenía con sus hijas menores, Camila y Mía .
Escándalos mediáticos y denuncias
Ricardo Daniel Carías (así era su verdadero nombre) nació el 1 de agosto de 1967, en la localidad de San Martín, en la provincia de Mendoza. Apodado “La Tota”, Santillán, cobró popularidad en el mundo de la televisión y la música, convirtiéndose en un referente dentro de la movida tropical. Conductor de programas como Pasión tropical y Pasión de sábado, el artista también desarrolló una fuerte faceta como productor musical, grabó varios discos de cumbia y participó de numerosas obras de teatro tanto en la cartelera porteña como haciendo temporada en Mar del Plata y Carlos Paz. Su amistad con ídolos como Rodrigo Bueno y Walter Olmos, lo llevaron a convertirse en su presentador oficial en cada show de los cuarteteros.
Mientras que en su carrera siempre fue muy querido por el público y los músicos, en su vida personal “La Tota” atravesó distintos problemas que lo llevaron a estar en el foco mediático. El primer escándalo público (que incluyó acusaciones cruzadas por infidelidad y violencia de género) fue tras finalizar su relación amorosa con Fernanda Vives en 2008. “ Viví cosas terribles, pero mucho no quiero contar porque tengo una hija de 11 años (…). Cuando yo hablé ya los hechos estaban prescriptos, porque hice la denuncia en el 2019 de hechos que habían ocurrido en el 2005 ″, contó la exvedette hace un tiempo en LAM. E inmediatamente, relató uno de los tantos episodios de violencia vividos a su lado: “Él tenía una adicción con el juego, pero nunca lo vi drogarse. Cada vez que me cagaba a piñas no estaba borracho ni drogado, estaba absolutamente consciente. Me pegaba de todas las maneras (…). A mí una vez me arrastró cien metros en bolas desde el baño cuando me estaba bañando y me dejó tirada en la puerta de mi casa”, reveló.
Por su parte, el acusado desmintió todo en diálogo con El Espectador, el ciclo de CNN Radio. “Mirá, cuando vos te peleás con tu mujer no decís ‘qué lindas flores’ o ‘qué linda rosa’. Discutís, te peleás, pero nunca le levanté la mano. Fernanda Vives habló cantidad de boludeces. No hay que mentir. No era una relación hermosa. Todos sabían todos los novios que había tenido mientras estaba conmigo. Olvidate, tenía un montón de novios, cantidades. Pero no me importa, la perdono. Y si cambió y ahora formó una familia me parece espectacular. Todos saben lo que hice por ella, lo que hice por su mamá”, se defendió acusando a la actual mujer de Sebastián Cobelli de haberle sido infiel.
Algo similar ocurrió años después con Sol Fiasche, la madre de sus dos hijas menores. Con ella empezó a salir en la época de máxima explosión de Rodrigo; sin embargo, en 2013 la pareja se separó. ¿El motivo? Nuevamente violencia de género. Su ex recurrió a la justicia y no sólo lo acusó de golpearla y amenazarla, sino que le inició un reclamo por alimentos. En su extensa declaración, Fiasche contó todos los episodios que vivió al lado del artista. Desde una fuerte pelea en su casa de Belgrano, donde la habría empujado sobre la cama y la amenazó con sacarle un ojo con una tijera hasta una discusión en Mar del Plata, donde aceleró el auto a toda velocidad y le dijo: “Te voy a matar en el acantilado y nadie te va a encontrar”, son parte de la causa que lo condenó una década después .
Fue recién en 2023 que Santillán fue condenado a cinco años y medio de prisión por estas denuncias. Pese a ser hallado culpable de los delitos de “ amenazas agravadas por el uso de armas, lesiones leves agravadas por haberse cometido en el marco de la pareja y por mediar violencia de género ”, el animador no fue preso porque la sentencia no estaba firme.
“Estoy con lo que decida la Justicia, y sobre todas las cosas con Dios. Hoy me acompañaron mis hijos más grandes y el doctor Merlo [su abogado] y yo acepto lo que ha dicho la Justicia”, dijo el acusado en A la Tarde. Tras reconocer que tenía discusiones con la mamá de sus hijas, “La Tota” negó haberle levantado la mano. “Me arrepiento de todo, si su papá nunca quiso que esta relación existiera, nunca quiso que fuera la pareja de Sol. La conocí en la época de Rodrigo y me enteré que era el papá de Sol un año después de salir con ella”, confesó sobre su exsuegro, un importante hombre de la política.
Por último, Santillán aseguró que lo que más lo mortificaba era no poder ver a sus hijas. “Hoy lloraba muchísimo, estaba con mis hijos (Daniela y Leandro) y no podía creer este calvario que estoy viviendo hace tiempo. No veo a las nenas desde el año 2019, y no veo a las nenas más que por videollamadas de cinco segundos ”, contó muy angustiado.
En la misma causa, fue condenado por amenazas contra su exsuegro, por el hurto del teléfono celular de quien entonces era su contador y por “amenazas coactivas agravadas por compeler a una persona a hacer abandono de su residencia habitual o de trabajo” en perjuicio de su niñera. Esta mujer, quien trabajó durante años cuidando a sus hijas, reveló que también sufrió amenazas por parte del mediático. “Son muchas las emociones. Les quiero describir el tormento que viví, me amenazó de muerte física y verbalmente en varias ocasiones, fue al domicilio donde trabajaba, en donde residía con Soledad Fiasche, golpeando puertas y ventanas, gritando e insultándome, exigiéndome que le abra la puerta para matarme, me dijo ‘marimacho, pobretona, lesbiana, muerta de hambre’ , me discriminó, me humilló, me trató como una basura”, comentó Yanina Soraire en el ciclo Argenzuela.
La mujer reveló que el productor la obligaba a darle información sobre su expareja “porque pensaba que ella tenía otra”. “Me llamaba constantemente a la madrugada para que le de información, quería que entre a la habitación y le saque fotos a Sol para ver si estaba sola o no”, describió quien se negó a sus pedidos. “A partir de ahí, él empezó a amenazarme a hacer campañas en redes, a decir que yo le usaba la ropa y las carteras a Sol, que me hacía pasar por la madre de la nenas. Yo jamás le falte el respeto a nadie y él me destruyó la vida, me obligo a irme del trabajo. Me humilló, me maltrató, y me inventó una causa penal diciendo que yo le pegaba a sus hijas y abusaba de ellas. Yo quería ser policía y me destruyó el futuro ”, sostuvo respecto a la falsa denuncia que Santillán le hizo en su contra.
Depresión, bipolaridad e internaciones
En medio de estos conflictos judiciales, Daniel Santillán sufrió varios problemas de salud mental que lo llevaron a internarse una y otra vez. La primera de ellas ocurrió en 2017, cuando la Justicia ordenó internarlo en un neuropsiquiátrico luego de ser detenido tras mantener una violenta discusión con efectivos policiales. Al parecer, el productor había intentado llevarse mercadería sin pagar de un bazar del partido bonaerense de Vicente López.
Cuando los efectivos intentaron registrarlo, Santillán se resistió, comenzó a forcejear y rompió uno de los espejos del patrullero y un handy a una mujer policía. Ante esta situación, los policías lo esposaron y lo llevaron detenido hasta la seccional primera de Vicente López. Horas después, el fiscal ordenó su liberación con la condición de que sea llevado a un centro de salud psiquiátrico para su recuperación.
Desde entonces, sus entradas y salidas de rehabilitación se volvieron moneda corriente. En 2021, un nuevo episodio (en donde se habló de “intento de suicidio”) lo llevó a internarse nuevamente. “Yo quiero vivir, lo que me pasó fue una crisis y un pico de nervios por un tema familiar. Es que no me dejan ver a mis hijas. Esto es una cuestión política. Todos saben quien es mi suegro, y todas las cosas que me pasaron a mí desde que me peleé con la madre de mis hijos. Ahora por suerte está un poco mejor la cosa, les pude regalar un par de vestidos y les pago la obra social, que es bastante cara, pero no pude pasarles alimentos todavía porque recién ahora estoy empezando a tener trabajo ”, explicó por ese entonces en diálogo con El Espectador, el ciclo de CNN Radio.
Sin embargo, las cosas no mejoraron. En septiembre de 2022, el conductor habló públicamente de sus adicciones; algo que a lo largo de toda su carrera se esforzó por ocultar. “ Tuve una pelea difícil con las adicciones, con la gordura. Todos hemos tenido problemas pero hace tiempo que lo vengo padeciendo. En vez de construir, uno destruye ”, confesó el animador en un evento público. “En el camino de la noche hay mucha gente que te ofrece cosas, pero uno tiene que saberse manejar. Queda en vos decir ‘sí’ o decir ‘no’”, aseguró.
Meses después, el no poder ver a sus hijas y la muerte de su hermano volvió a empeorar su cuadro y debió ser nuevamente internado . Esta vez, el lugar elegido fue la clínica de salud mental San Juan de Dios en la localidad de Luján, a la que ingresó por decisión de sus hijos mayores y de su primera mujer, Mónica Falero. “Yo estuve el miércoles con él, con mi hija, llamé a la prepaga, al psiquiatra y nos asesoramos en todo momento. Lo encontré muy triste, muy depresivo ”, contó su ex en diálogo con A la Tarde. “Daniel decía que tomaba la medicación, pero mi hija me dijo que dudaba de ello. Hasta hace poco lo hacía, yo doy fe, pero lo del hermano detonó todo y puede ser que haya suspendido él mismo el tratamiento”, reveló Falero, quien a pesar de haberse separado del conductor hace años, siempre mantuvo una buena comunicación por los chicos. “Siempre fue un buen papá, al pie del cañón. Nos llevamos muy bien porque los dos venimos de abajo”, agregó.
En junio de 2023, el productor musical sufrió una nueva descompensación tras enterarse de la condena judicial por la causa de su ex, Sol Fiasche. “Por ahí tiene un brote que no lo hace consciente sino por la enfermedad que él tuvo. El tema de querer lastimarse a sí mismo o el tema de las adicciones también. El lo descubrió recién ahora pero esta enfermedad la debe tener desde los 14 o 15 años ”, explicó su abogado en el vespertino conducido por Karina Mazzocco.
¿Cómo fueron sus últimos días?
En los últimos meses, Santillán se mantuvo lejos de los escándalos y los medios. Según su entorno, el presentador se encontraba mucho mejor de salud, siguiendo su tratamiento y con trabajo. “Estaba muy bien, estaba mejor que nunca (…). Estaba medicado porque le habían declarado que tenía bipolaridad. Estaba con su asistente terapéutico, estaba tratando con su psicóloga, que de hecho es mi psicóloga y recién acabo de cortar con ella. Me dijo que es imposible que estemos hablando de un suicidio”, contó Karen Salas, íntima amiga del productor esta mañana en Socios del espectáculo.
“Yo hablé con él el sábado pasado porque lo cubrí en un show que me pidió. Estaba con trabajo, realmente estaba con trabajo y eso lo tenía muy contento”, reconoció la mujer. Respecto a cómo estaba con sus problemas legales, Salas contó: “El estaba tranquilo porque siempre supo que todos lo que dijo la madre de las hijas fue una mentira. Y sus amigos también lo sabíamos”, comentó quien aseguró que lo que más lamenta es que su amigo y confidente se haya ido de este mundo sin poder ver a sus hijas menores. ” Escucharlo llorar, sufrir por no ver a sus dos hijas, porque la madre no se las dejó ver. Y lo que más lamento es que se haya ido sin poder verlas ”, remató angustiada.