El célebre ilusionista estadounidense David Copperfield fue acusado por más de 16 mujeres de abusos, conducta sexual y comportamiento inapropiado, según reveló una investigación del periódico The Guardian publicada este miércoles; hoy salieron a la luz las denuncias de otras cinco exconcursantes y se difundieron los videos del concurso de modelos de 1991 en donde se lo ve junto al expresidente de Estados Unidos Donald Trump interactuando con las jóvenes.

Este jueves, más de tres décadas después, trascendió que estas cinco mujeres, que en aquel momento eran menores de edad, denunciaron a Copperfield por haberlas sometido a un comportamiento que ahora consideran abuso. Las víctimas conocieron al iluisionista en el concurso de Nueva York en 1991 o tres años antes en Japón, cuando él también era juez.

Las acusaciones incluyen abuso sexual físico y acoso sexual. En uno de los testimonios, una exconcursante alega que Copperfield la drogó y agredió sexualmente en los meses posteriores a la competencia. Ella tenía 17 años en ese momento.

En la investigación publicada por el medio británico que cuenta con el resto de las 16 denuncias destacaron también que más de la mitad de las acusaciones fueron realizadas por mujeres que en el momento de recibir los supuestos abusos eran menores de edad. Otras presuntas víctimas acusaron a Copperfield también de haberlas drogado, por lo que no “pudieron prestar su consentimiento” al momento de tener relaciones sexuales.

En 1991, el magnate inmobiliario y expresidente de los EE.UU. presentó el Look del Año en el Hotel Plaza ubicado en Nueva York, del cual era propietario. En ese momento, Trump y Copperfied oficiaron de jurados junto a otros ocho jueces, entre los que había un exganador de Look del año, un ejecutivo de una agencia de publicidad, el exfotógrafo de moda Patrick Demarchelier, y Gérald Marie, director de la oficina parisina de Elite Model Management, la agencia que organizó el concurso.

El evento atrajo a aspirantes a modelos de todo el mundo, de entre 14 y 21 años. Sin embargo, según indicó un documental de Fox que se realizó un año después, la edad promedio de las concursantes era de tan sólo 15 años. Según trascendió, algunas de las jóvenes viajaron solas y estuvieron fuera de casa por primera vez, por lo que fue mucha la presión que sufrieron para impresionar a los jueces, indicó el medio británico.

En aquel momento, Elite era la agencia de modelos líder en el mundo. Durante la semana en la que se desarrolló el concurso, los jueces y las concursantes se alojaron en distintas habitaciones del lujoso hotel con vista al Central Park.

Las imágenes y las fotografías detrás de escena del evento muestran a Copperfield , cuyo nombre real es David Seth Kotkin, relacionarse con las chicas que participaron del certamen.

En uno de los clips que difundió el diario se lo ve al fundador y propietario de Elite, John Casablancas, presentando a ilusionista como “el mago maestro ganador del premio Emmy: mi amigo, David Copperfield”.

En las imágenes se puede ver que Copperfied y Trump estaban sentados en la primera fila. El expresidente estaba con su hija Ivanka, que entonces tenía nueve años, quien luego trabajaría para Elite como modelo, sentada sobre sus rodillas. Naomi Campbell, entonces supermodelo de Elite, fue coanfitriona de la gala junto con Casablancas.

La investigación

The Guardian realizó una exhaustiva investigación que se basó en más de 100 entrevistas, y registros judiciales y policiales. Las presuntas víctimas declararon que conocieron a Copperfield por ser una personalidad exitosa del mundo del espectáculo.

Muchas de las participantes indicaron que se animaron a hablar sobre sus supuestas experiencias luego del movimiento #MeToo, debido a que se sintieron protegidas y apoyadas, aunque varias de ellas prefirieron hacer las denuncias de forma anónima. Los hechos relatados en la investigación habrían sido cometidos entre finales de los años 80 hasta 2014.

Cabe destacar que en enero pasado, el nombre del ilusionista estuvo en el ojo de la tormenta al aparecer como una de las personas de alto perfil nombradas en documentos judiciales relacionados con el difunto magnate Jeffrey Epstein, uno de explotadores sexuales de menores más conocidos.

Si bien su mención no significa que haya cometido un delito, en el expediente consta una conversación que Copperfield mantuvo con una mujer que luego se supo que era una de las víctimas de Epstein. Durante la charla, el artista le preguntaba si era “consciente de que a las niñas se les pagaba por encontrar a otras niñas”.

Sus abogados aseguraron al mismo medio británico que Copperfield solo había escuchado un “rumor” sobre el proceder de Epstein, pero que “no tenía conocimiento de que estuviera sucediendo algo inapropiado”. “Nuestro cliente no sabía acerca de los horribles crímenes de Epstein. Como el resto del mundo, se enteró por la prensa”, afirmaron los defensores.

Tras el escándalo de las denuncias, el ilusionista de 67 años negó todas las acusaciones en su contra a través de sus letrados, quienes alegaron que su defendido es un acérrimo defensor del movimiento #MeToo y que siempre alentó a las mujeres a contar sus historias de presuntos abusos.

“Nunca ha actuado de manera inapropiada con nadie, y mucho menos con ningún menor de edad”, señalaron, además de describirlo como “una persona amable, tímida y respetuosa tanto con hombres como mujeres”. Respecto de las acusaciones sobre el uso de drogas sobre las presuntas víctimas, respondieron que simplemente “no son parte de su mundo”.

En este sentido reconocieron que en el pasado Copperfield ya había recibido “numerosas acusaciones falsas” en su contra, pero que todas habían sido “desestimadas”.