La boda temática de María Juncadella y Mariana de Bergia inspirada en los 70 y con la actuación de Azúcar Moreno
Este fin de semana ha sido inolvidable para María Juncadella Hohenlohe y Mariana de Bergia, quienes han comenzado un nuevo capítulo en su discreta relación ya como matrimonio. Para su gran día eligieron El Molino del Duque, una impresionante finca ubicada en la localidad malagueña de Manilva donde organizaron un divertido enlace lleno de sorpresas, diversión y con su propia temática: ¡extravadanza! Las contrayentes quisieron dar su original sello a esta celebración ambientada en los años 70 en la que estuvieron acompañadas de familiares y amigos, un grupo en el que había numerosos rostros conocidos.
Para Marco Juncadella se trataba de una cita muy importante ya que se casaba su hermana María. El empresario y jinete acudió con su esposa, Lucía Bárcena, con la que está a punto de celebrar su tercer aniversario de boda y junto a la que tiene dos niñas, Filipa (2) y Leonora (1). La influencer apostó por un vestido largo tipo túnica con estampado geométrico, escote de pico y manga murciélago con puño ajustado y abotonado. Se trata del modelo Nora de la colección de invitada de Cherubina. Lo combinó con maxicollar turquesa de la misma firma, complementos en plata y turbante morado hecho a medida.
Entre los asistentes, todos con originales looks setenteros, se encontraba también Inés Domecq, unida a María por lazos familiares ya que el marido de la diseñadora, el marqués de Almenara, Javier Martínez de Irujo (uno de los nueve nietos de la recordada duquesa de Alba), es su primo hermano. Tampoco quisieron perderse el evento la DJ Inés Bilbao (hija de la periodista Teresa de la Cierva y el financiero Mikel Bilbao, que prepara también su enlace), la pintora Bárbara Pan de Soraluce, la artista Belén Ordovás Lladó, el interiorista Tristán Domecq y el estilista Marc Forné, entre un largo etcétera.
La hija del empresario y antiguo piloto de automovilismo José María Juncadella y de la princesa Cristina de Hohenlohe-Langenburg dio el "sí, quiero" a la arquitecta Mariana de Bergia en una ceremonia civil en la que compartieron protagonismo con su mascota. Y es que Paquito, su perro, estuvo presente y se unió a ellas en sus primeras imágenes como matrimonio. Además, el animal llevaba un lazo de rayas rojas y blancas, los dos colores que marcaron toda la celebración: desde las mesas a los adornos e incluso los trajes de los camareros. También de esas tonalidades eran los fuegos artificiales y los claveles que los invitados lanzaron al cielo.
Una vez finalizada la ceremonia dio comienzo el cóctel, amenizado con la música en directo del Club del río, banda madrileña creada hace diez años, cuando sus componentes eran compañeros de universidad. Después llegó la cena, en mesas en forma de U con un menú que constaba de: roast beef con parmentier de patatas y cebollitas confitadas, tarta árabe y torrija de brioche con helado de vainilla y salsa de caramelo. El catering Terralda, referentes en la Costa del Sol, fue el encargado de la comida, que se sirvió al aire libre en los jardines tropicales, de tres hectáreas. La finca que fue testigo de la celebración data de comienzos del siglo VIII, cuando fue construida como un antiguo molino de harina. Años después fue reconstruido como casa familiar y actualmente acoge bodas y rodajes.
La sobrina nieta de Alfonso de Hohenlohe (fundador de Marbella) y su ya esposa se encargaron de organizar cada detalle para tener su enlace soñado pero también para que los asistentes recordaran para siempre ese día. Una de las grandes sorpresas que tenían preparadas se desveló en la fiesta, cuando se subieron al escenario las Azúcar Moreno. Las hermanas Toñi y Encarna Salazar pusieron a bailar a todos con su repertorio, lleno de tema pegadixos. Para esta parte de la velada, María y Mariana cambiaron sus looks nupciales por estilismos con brillos.
Así es el matrimonio
María es una de las creadoras de PR Meison, estudio creativo de PR & Eventos "con un enfoque elegante pero rebelde". Activa filántropa, estudió fotografía en la Miami AD School tras su paso por el colegio Mater Salvatoris de Madrid y participar en el Baile de Debutantes de París. Por parte de madre es sobrina segunda de Anna Gamazo y por vía paterna es nieta de Mercedes Salisachs, ganadora del premio Planeta en 1975, y de José María Juncadella, poderosos magnate de la industria. Mariana estudió en la Universidad Europea un doble grado en Arquitectura y Bellas Artes y actualmente trabaja como freelance.