¿Dónde has visto antes a Paul Rudd?

Es el nuevo superhéroe de moda. Responde al nombre de Scott Lang sin máscara y Ant-Man, con ella. Pero, ¿quién es realmente? ¿Quién es ese actor tan mono –que dirá más de una madre al verle– que tanto te suena y que ahora eres incapaz de ubicar? Ant-Man es Paul Rudd, actor de comedias para ellos y ellas que, tras más de dos décadas dedicado a esto de la actuación y a sus 46 años parece haber encontrado al fin ese papel que le hará conocido a escala mundial. Ya nadie se preguntará de qué le suena la cara de Paul Rudd tras el estreno.

Lo suyo, está claro, ha sido casi siempre la comedia. Algo de lo que hace gala en Ant-Man, donde el personaje requiere de cierto grado de comicidad y de saber reírse de uno mismo y del caos que es su vida. Los seguidores de la longeva Parks and Recreation, serie en la que interpretaba a Bobby Newport, le tendrán fichado. En el cine ha participado en decenas de títulos, de ahí que te suene. Ha sido el chico de comedias románticas como This Is 40, Admission, Wanderlust y, por mencionar solo algunas, How Do You Know?

En realidad ha hecho muchas más películas de las que en principio le pueden venir a uno a la cabeza. Por eso es fácil que a la mayoría le suene su cara y, puede, que hasta su nombre. Quizá el problema sea que la mayoría no han tenido una trascendencia monumental o que sus parejas de baile en la pantalla le han eclipsado con su arrolladora fama. Rudd ha compartido planos y algo más en sus trabajos con actrices como Jennifer Anniston, Reese Whiterspoon, Tina Fey, Eva Longoria… Y la lista sigue y sigue. Era el chico mono y de buen corazón del que se enamoraba la protagonista.

Eso en el capítulo del cine más ‘para ellas’, porque Rudd también tiene un lado gamberro que conocerán bien los asiduos al género de comedias más o menos salvajes destinadas a un público más masculino. En su currículum figuran títulos como I Love You, Man, junto a Jason Segel, Role Models, Anchorman 2: The Legend Continues, Dinner for Schmucks… Un sinfín de películas, hasta 94 títulos en su ficha de IMDB entre cine y televisión.

Al final, y hasta que se ha metido en el traje de Ant-Man, la carrera de Paul Rudd puede resumirse en dos papeles: el de chico mono para ellas y el de compañero de juergas para ellos. Eso sí, con salvedades como el profesor que todos querríamos tener en la maravillosa The Perks of Being a Wallflower. Es decir, que aunque lo de sacar al respetable una sonrisa o carcajada sea su fuerte, en realidad también tiene aptitudes para el drama. Quizá la fama que le proporcionará Ant-Man le abra más puertas de protagonistas en el cine.

(Foto: Disney / Marvel)