Yahoo Estilo El conflicto de Natalie Portman con una escena íntima despertó su poder en Hollywood
La actriz no estaba cómoda con el guion y se negó a rodar la secuencia de sexo cuando tenía 16 años
Ganar relevancia en Hollywood e imponer tus decisiones a los grandes estudios no es algo al alcance de todas las estrellas de la industria, y mucho menos de una en ciernes. Sin embargo, Natalie Portman, en el inicio estelar de su trayectoria en los '90 donde ya en sus primeros pasos nos deleitó con cintas como Fuego contra fuego de Michael Mann, Todos dicen que te amo de Woody Allen, ¡Marcianos al ataque! de Tim Burton o Beautiful Girls de Ted Demme, fue una clara excepción.
La actriz, que por aquel entonces todavía era una adolescente menor de edad, no estaba dispuesta a asumir cualquier decisión artística que pudiera poner en peligro su integridad, y aunque su poder frente a Hollywood todavía era limitado, una película y una escena de sexo que se negaba a rodar la hicieron plantarse ante la todopoderosa meca del cine para que entendieran su visión. No fue una tarea fácil pero, gracias a la ayuda de otra actriz, pudo cumplir su objetivo y ver erigir su poder como estrella.
Ocurrió durante la producción de Cambio de vida, el drama que coprotagonizó junto a Susan Sarandon en 1999. Se trataba de la adaptación de una aclamada novela escrita por Mona Simpson en 1986, una historia sobre una madre que abandona a su segundo marido y se traslada con su hija adolescente a Beverly Hills, donde tratará de convertirla en una estrella de cine mientras ella sueña con marcharse a estudiar a la costa este.
Fue un proyecto algo convulso que estuvo bastantes años en desarrollo. Ya desde la publicación de la novela, Disney trató de adaptarla con Meryl Streep como protagonista, pero quedó en el limbo después de que la actriz priorizara Recuerdos de Hollywood a comienzos de los '90. Años más tarde, 20th Century Fox recuperó la idea, pero cuando en 1998 comenzaron la preproducción y ficharon a Sarandon y Portman los contratiempos volvieron a hacer acto de presencia.
Portman, que en aquel momento solo tenía 16 años, no estaba cómoda con el guion. Básicamente porque la obligaba a rodar una escena de sexo con el actor Corbin Allred, una trama nada extraña en una historia sobre una chica adolescente, pero, siendo aún menor de edad y estando en una etapa inicial de su carrera, no quería lanzarse a grabar una toma de estas características y exponerse al mundo entero. Por ello, pidió a los responsables del título que eliminaran la secuencia. Pero hicieron oídos sordos.
Fue entonces cuando Portman amenazó con abandonar Cambio de vida, pero, en lugar de preocuparse por la pérdida de la actriz, desde el estudio optaron por empezar a buscar nuevos rostros para encarar al personaje. Por suerte, Susan Sarandon salió en defensa de su compañera de reparto. "Natalie fue elegida por su inteligencia y fuerza", dijo Sarandon en una entrevista con EW en 1999. “Necesitaba a alguien a quien pudiera usar con toda mi fuerza y que pudiera defenderse. Cuando Natalie se peleó, hablaron de otras personas, pero yo les dije que no lo haría sin ella”.
Con Sarandon también dispuesta a marcharse, parecía que Cambio de vida acabaría otra vez guardada en un cajón, pero finalmente se impuso la cordura. Para evitar que la película se fuera a pique, se decidió escuchar a Portman y hacer caso de todas sus peticiones, lo que incluyó reescribir la escena de sexo para evitar detalles explícitos y conseguir un ambiente de rodaje íntimo y seguro. “Me encantó el papel”, dijo Portman, “pero simplemente no estaba preparada para eso. No soy una de esas personas que harían cualquier cosa por su arte. Nunca quiero cambiar la visión de un escritor, pero cuando lo hicieron por mí, fue una sensación muy agradable".
En concreto, la escena se limitó a mostrar a los personajes en ropa interior e insinuar su pasión con un simple abrazo. Además, como bien señaló el director de la película, Wayne Wang, en la mencionada entrevista con EW, hubo muchas discusiones sobre cómo abordar los planos en ropa interior para evitar que ni Portman ni nadie se sintiera incómodo o sobrexpuesto. "Yo pienso que es mejor. La integridad de Natalie en realidad obligó al escritor a ser un poco más inventivo”, matizaba Sarandon sobre los cambios.
De esta forma, Natalie Portman adquirió el poder suficiente para cambiar el rumbo de un proyecto y poder defender sus necesidades artísticas, todo un logro en una industria tan imponente como Hollywood y más en una época como el final de los '90. Y es que la actriz, aun siendo una joven recién iniciada, ya apuntaba maneras para erigirse como una de las grandes estrellas de nuestros tiempos, y solo hay que ver que el mismo año en el que Cambio de vida llegó a los cines, en 1999, se consolidó como un icono admirado por todos gracias a Star Wars, saga a la que no tardarían en sumarse proyectos de primer nivel con los tocó el techo de la meca del cine.
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