Yahoo Estilo Elenco de Breaking Bad se reúne en la huelga de actores: "Están deshumanizando a la fuerza laboral"
La huelga de actores se mantiene y a lo largo de las semanas hemos observado a grandes estrellas uniéndose a las filas de piquetes. Ahora es turno de todo el elenco de Breaking Bad (100%), quienes se reúnen y ya forman parte de las protestas en Los Angeles. Liderados por Bryan Cranston, el actor de 67 años habla sobre el apoyo hacia el sindicato y sobre la importancia de darle valor al trabajo humano por encima de las herramientas de inteligencia artificial tan diseminadas en tiempos recientes.
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Creada por Vince Gilligan , Breaking Bad (100%) narra la transformación de Walter White, un profesor de química de secundaria, en un fabricante y distribuidor de metanfetaminas después de ser diagnosticado con cáncer terminal. Con la intención de asegurar el futuro financiero de su familia, Walter se sumerge en el mundo del crimen junto a su antiguo estudiante, Jesse Pinkman. La serie explora las complejidades morales y psicológicas de esta evolución, así como las consecuencias devastadoras de sus decisiones tanto en su propia vida como en la de aquellos que lo rodean.
Una serie espectacular para un público global
Breaking Bad dejó una marca profunda en la cultura popular debido a su trama intensamente elaborada, personajes multidimensionales y exploración profunda de temas como la moralidad, la ambición y los males de nuestras elecciones. A lo largo de su transmisión, la serie ganó numerosos premios y reconocimientos por su guion ingenioso y actuaciones destacadas, especialmente la de Bryan Cranston en el papel principal. La serie estableció un estándar elevado para la televisión contemporánea en términos de narrativa compleja y cinematografía impresionante, influyendo en la forma en que las audiencias y los creadores de contenido se acercan a las historias televisivas. Su impacto cultural se ha mantenido, convirtiéndola en un referente constante en discusiones sobre el medio televisivo y la narrativa serializada.
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Junto a Jesse Plemons, Aaron Paul y Betsy Brandt, Cranston habla sobre sus intenciones de permanecer en la fila de piquetes, argumentando que los estudios de Hollywood no son enemigos, pero que son necesarios la empatía y el diálogo para llegar a un acuerdo:
Estamos aquí en solidaridad con todos nosotros, con todos nuestros hermanos y hermanas afectados por esto, y con la WGA y la SAG. Todos somos la columna vertebral de nuestro negocio. No los convertiremos [a los estudios y los streamers] en enemigos, no son villanos. Estas son personas con las que todos volveremos a trabajar en algún momento. Sólo queremos que vean la realidad y la justicia y vuelvan a la mesa y hablen con nosotros.
Cranston también habla sobre el contrato al que aspira llegar el sindicato de actores, señalando el valor de la fuerza humana y su necesaria permanencia en la industria:
Este contrato tendrá una frase que dice: ‘Los actores deben ser seres humanos’. Esto es alucinante, pero eso es lo que dirá, y lo mismo con el contrato del Writers Guild: "Debe ser escrito por un ser humano". '. Nunca habíamos tenido que imaginar eso antes, pero está aquí ahora mismo. Es posible que suceda ahora mismo y tenemos que intervenir y decir: 'Están deshumanizando a la fuerza laboral y esto no puede continuar'.
El uso de inteligencia artificial en Hollywood ha generado preocupaciones significativas entre actores y guionistas debido a su potencial impacto en la industria del entretenimiento. La IA tiene la capacidad de generar contenido de manera rápida y eficiente, lo que podría amenazar los trabajos tradicionales en la creación de guiones y narrativas. Los guionistas temen que las máquinas puedan producir diálogos y tramas de manera automatizada, reduciendo la demanda de sus servicios y disminuyendo la originalidad y calidad artística que aportan al proceso creativo.
Por otro lado, la IA podría alterar la dinámica de actuación en Hollywood. La posibilidad de crear personajes y actuaciones digitales con apariencia y comportamiento humanos podría afectar las oportunidades de trabajo para actores reales, reduciendo la demanda de interpretaciones tradicionales. La ética en torno al uso de imágenes generadas por IA de actores fallecidos también es un tema delicado, ya que plantea preguntas sobre el consentimiento y la propiedad de la imagen.
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