Emily en París' en cifras: ¿Sabes cuántas prendas, zapatos, bolsos y joyas salen en los nuevos capítulos?
La cuarta temporada de Emliy en París ya está disponible al completo en Netflix. La ficción protagonizada por Lily Collins lleva encadenando éxitos en el gigante de streaming desde su estreno en 2020. No podemos obviar que la serie atrae tanto por la trama como por los coloridos estilismos con los que enamora a sus seguidores y marca tendencia en todo el mundo. ¿Quieres saber cuántas prendas, zapatos, bolsos y joyas salen en los nuevos capítulos? ¡Te contamos todos los detalles!
En esta nueva entrega, Emily abandona su adorado París y se lanza a la aventura por Europa, principalmente se pasea por escenarios tan icónicos como los Alpes franceses o Roma. Algo que no solo se ve reflejado en el desarrollo de la historia con una protagonista en pleno crecimiento y evolución personal, sino también en el impresionante despliegue de vestuario y caracterización de la serie.
Durante los diez episodios que componen la cuarta temporada, los fans de la ficción y los amantes de la moda se van a deleitar viendo ante sus ojos más de 1.000 prendas de vestir, alrededor de 350 bolsos, unas 3.000 piezas de joyas y la friolera de 2.500 zapatos, incluyendo entre ellos cerca de 150 Louboutins y el primer calzado plano que luce Emily en toda la serie.
Cabe destacar que no se trata de prendas y accesorios convencionales, sino que Marylin Fitoussi, diseñadora de vestuario de Emily en París, quien ha coordinado cada modelo con un año de anticipación, se ha decantado en esta ocasión por unos estilismos más vintage, dando prioridad al lujo y a piezas únicas creadas por diseñadores de renombre y también por jóvenes promesas de la moda. Además de los modelazos de Emily, también llaman la atención los looks de Mindy (Ashley Park), entre los que vemos diseños exclusivos de Balmain o Thierry Mugler.
“Soy mi primera y única espectadora, no quiero aburrirme, quiero ver ropa y accesorios que me hagan soñar, que sean inasequibles, inaccesibles. Sí, es cierto que Emily no puede permitirse todas las prendas que se ofrecen en el desfile, por supuesto. No, su apartamento no puede albergar todas las prendas. ¡Y eso es entretenimiento, nena!”, explica Fitoussi.
Emily crece de manera interior y su vestuario intenta reflejar su nueva madurez y la confianza en sí misma. Si bien el romanticismo y el estilo ecléctico característicos de la joven publicista se mantienen, Fitoussi ha logrado plasmar con trajes de tres piezas inspirados en Twiggy, mocasines y motivos florales, la madurez y el 'florecer' de la protagonista.
También podemos apreciar la evolución en el maquillaje y los peinados que luce el personaje interpretado por Lily Collins, mostrándose más natural que nunca con, nada más y menos, que 22 peinados diferentes. No siempre estará perfecta, lo que refleja el viaje emocional que emprende en estos nuevos capítulos en los que comienza a tomar las riendas de su vida.
Audrey Hepburn vuelve a convertirse en musa esta temporada, estando presente específicamente en el look de esquí de Emily, para el que el equipo de vestuario recreó exactamente las gafas de sol Pierre Marly que la famosa actriz utilizó en Charada. "Cuando Lily se las probó, lloramos, gritamos y se nos puso la piel de gallina. Cada temporada rendimos homenaje a Audrey Hepburn, ya forma parte del juego", asegura la estilista.
La protagonista deDesayuno con diamantes no está presente solo en ese detalle, sino que los responsables de vestuario se han inspirado también en algunos de los modelos que la icónica intérprete lucía en la película Vacaciones en Romapara los estilismos de Emily en la ciudad eterna.
Y no son los únicos, en uno de los outfits más llamativos y espectaculares de la temporada, el vestido que la protagonista lleva en el baile de máscaras, también se ha usado como referencia a Audrey Hepburn, icono de la elegancia. Un traje, el favorito de Lily Collins desde que comenzó la serie, que según Harris Reed, su diseñador, tiene dos inspiraciones claras: Amanda Carter Burden, hija de la socialité Babe Paley, en el baile Black And White Ball que orquestó Truman Capote en 1966, y en el vestuario de Cecil Beaton para Hepburn en My Fair Lady de 1964 .