Explorarán con “rayos cósmicos” el interior de la pirámide de Kukulkán, en Chichén Itzá

Chichén Itzá
Chichén Itzá

No hay duda de que todavía queda mucho que descubrir de nuestros antepasados y la UNAM lo sabe. En conjunto con otras instituciones, explorarán las entrañas de la pirámide de Kukulkán en Chichén Itzá.

La estructura, también conocida como El Castillo, es la estructura prehispánica más famosa de la zona arqueológica. Se construyó en el siglo XII d.C. por mayas itzáes y se conforma por nueve plataformas coronadas por un templo rectangular.

Buscan tomar “radiografía” de la pirámide de Kukulcán

Esta exploración a las entrañas de la famosa pirámide es parte del proyecto internacional NAUM (por sus siglas en inglés de Muografía para usos Arqueológicos No Invasiva).

En él participa el Instituto de Física de la UNAM así como las universidades Estatal de Chicago, Dominican y de Virginia, la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos y el Fermi National Accelerator Laboratory.

El objetivo es comprobar la existencia de alguna cámara oculta en la segunda subestructura de la pirámide.

interior pirámide kukulkán
Buscan comprobar la existencia de una cámara oculta en la segunda subestructura. Imágenes: Edmundo García/UNAM.

Recordemos que la pirámide de Kukulkán es como si fuera una enorme matrioska, pues dentro de ella hay otras dos estructuras que corresponden a distintas fases constructivas.

La primera subestructura se descubrió en los años 30 (en ella se localizaron las cámaras de Chac Mool y del Jaguar) y la segunda, la más antigua, apenas en 2016.

Usarán “rayos cósmicos” para analizar las subestructuras

A través de Gaceta UNAM se explicó que esta investigación usará un detector de rayos cósmicos que llegan a nuestro planeta para obtener una imagen o “radiografía” del interior de la pirámide de Chichén Itzá.

¿Y eso cómo se hace? Será a través de la medición de muones, partículas elementales que llegan por los rayos cósmicos. Con el detector de muones podrán calcular la densidad de la pirámide e ir mapeando las áreas de la estructura hasta encontrar un cambio de densidad. Y es que esos cambios podrían reflejar la presencia de una cámara o de un hueco, por ejemplo.

El detector se construye en chicago y se probará en las instalaciones del Instituto de Física de la UNAM. Posteriormente, se llevará a Chichén Itzá y una vez que comience su labor, la “radiografía” de la pirámide de Kukulcán tardará seis meses en completarse.

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