Harvey Weinstein contrató un ejército de espías para protegerse de sus acusadoras

Harvey Weinstein
Harvey Weinstein

El caso del depredador Harvey Weinstein ha probado tener más giros que cualquiera de sus más exitosas películas. Y, como en toda buena trama, se continúan revelando sórdidos detalles de su patrón de abuso sexual que se extendió por más de tres décadas en Hollywood.

La publicación The New Yorker reveló que el productor invirtió cientos de miles de dólares contratando ex agentes de agencias de inteligencia para investigar a sus víctimas y hasta los periodistas que investigaban el caso. La revista señaló que una ex espía israelita se acercó y grabó en secreto conversaciones con Rose McGowan haciéndose pasar como una activista en pro de los derechos femeninos.

La informante parte de la empresa Black Cube se hizo pasar como aliada de McGowan, una de las más fervientes acusadoras de Weinstein, porque el productor estaba preocupado por la autobiografía que ella estaba por publicar. La misma agente estuvo en contacto con Ben Wallace, de New York Magazine, quien estaba escribiendo sobre Weinstein. La meta era obtener información personal para intimidarlos o sobornarlos. New York Magazine decidió engavetar la historia en enero 2017, Wallace alega que nadie quiso hablar en récord.

Rose McGowan junto a Harvey Weinstein.
Rose McGowan junto a Harvey Weinstein.

El artículo escrito por Ronan Farrow – hijo de Mia Farrow y Woody Allen – alega que un “ejército de espías” – fue desplegado a finales de 2016 para obtener conocimiento de las acusadoras y aquellos que las estaban investigando. Black Cube recibió al menos $200 mil por sus servicios, pero no fue la única compañía utilizada por Weinstein. El hombre también tenía en su nómina a Kroll, empresa con un trasfondo militar, que se encargó de obtener 11 fotografías de Weinstein y McGowan tras la agresión sexual que ella alega sufrió con el propósito de desacreditarla.

The New Yorker
The New Yorker

Las nuevas revelaciones aseguran que Weinstein personalmente le daba seguimiento a las investigaciones y que ordenaba a súbditos a realizar llamadas y averiguar nombres. Sus abogados también estaban a cargo de estas búsquedas de hechos incriminatorios David Boies, uno de sus representantes, firmó el contrato con Black Cube que pedía detener la publicación de la historia de The New York Times, la que al final salió a la luz a inicios de octubre.

Entre otros problemas de Weinstein está el haber sido expulsado “de por vida” de la Academia de la Televisión de los Estados Unidos, siguiendo la acción de la Academia del Cine y el Sindicato de Productores.

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