Gran Hermano: tras el rechazo de Coty Romero, Furia tuvo un particuar acercamiento
El martes por la noche, el juego en la casa de Gran Hermano (Telefe) cambió por completo tras el ingreso de Constaza Romero para sumarte como una participante más que buscará llegar a la final de reality. La revancha para la joven correntina llegó a través del Golden Ticket, que le otorgó un acceso directo, que llenó de sorpresas a sus nuevos compañeros. Pero puntualmente, a Juliana “Furia” Scaglione quien en principio se mostró distante hasta que tuvo un particular acercamiento.
En la emisión pasada, Coty Romero quedó eliminada del juego después de 71 días y quedó trunco su sueño de ser la ganadora del reality más famoso. No obstante, este 2024 tiene su revancha y fue la seleccionada por la producción para volver al juego como reemplazante de Agostina Spinelli. Su llegada a la casa generó un revuelo entre los jugadores, y desde el minuto cero marcó una cortante distancia con Furia al no saludarla. Presuntamente, sería parte de su estrategia de juego.
Esta actitud generó una gran molesta en la líder innata de la casa, quien en una charla íntima con Emmanuel Vich demostró su enojo. “Entra, no me mira y no me saluda. Ni me mira a los ojos. Saludó a todos y no me saludó”, dijo sobre Coty. Y agregó indignada: “¿Por qué traen a estos ex Gran Hermano? ¿Para qué traen a esta chica que no entiende nada?”.
Sin embargo, Furia habría tomado una iniciativa, quizás para apaciguar los ánimos o para demostrar su impronta dentro del juego. Cualquiera sea su motivo, decidió acercarse hacia su nueva compañera mientras había una charla grupal en el living. Sin dudarlo, la preparadora física se acercó a la joven y le dio un beso a la boca. Sin dar explicaciones, retomó su lugar en el sillón y el resto de los participantes testigos del momento lanzaron risas.
Fue Bautista Mascia quien se apresuró a lanzar un comentario, poniendo en duda la actitud de Furia. “Es el beso de la muerte”, bromeó para indicar que se trataba de una marca que haría la jugadora para indicar la intención de la eliminación del juego de su compañera nueva.