¡Hay ingenio, papá! Inventos que no sabías que son mexicanos

Se sabe que a los mexicanos nos sobra ingenio y aunque a veces salimos con cosas muy curiosas, también creamos cosas muy fregonas. Eso lo demuestran estos inventos mexicanos que seguro no conocías.

Y sí, ya sabemos que González Camarena es el padre de la televisión a color. De hecho, quizás es el único inventor nacional que nos sabemos de memoria. Para que no te quedes atrás, échale ojo a estos otros.

Mira: Los inventos más locos, polémicos e increíbles de la mayor feria de tecnología

Inventos mexicanos que no conocías

La tinta indeleble

En época de elecciones, esta tinta es todo un clásico. Y sí, podríamos pensar que como muchas cosas fue invento de los chinos. Pero no fue así, resulta que fue el mexicano Filiberto Vázquez Dávila quien la creó.

Eso de pintar nuestro pulgar se realiza desde 1994 en México, y desde entonces la práctica se replicó en otros países.

Todo comenzó cuando el Instituto Federal Electoral lanzó un concurso: Vázquez fue el ganador y su fórmula fue patentada por el IFE.

La clave detrás de esto es que al entrar en contacto con la piel, cambia el color de la misma y por eso es que por más que te laves, no se quita.

Píldora anticonceptiva

La píldora anticonceptiva cambió al mundo y pocos saben que es parte de los inventos mexicanos. Esto se debe a que Luis Ernesto Miramontes Cárdenas fue quien sintetizó en un laboratorio de la CDMX la hormona base de la que fue la primera píldora.

Después de un largo trabajo, Luis Ernesto logró obtener la noretisterona, la primera progestina activa vía oral. Este compuesto todavía está presente en la mayoría de los anticonceptivos orales.

Pero eso no es todo, pues en esta experimentación se utilizaron extractos de barbasco, una planta endémica de México.

Pintura antigraffiti

Este es un invento orgullosamente azul y oro, pues es de los intentos que han salido de la UNAM.

Fue creada en el 2001 por los doctores Víctor Manuel Castaño y Rogelio Rodríguez Talavera, y un grupo de investigadores del Departamento de Física Aplicada y Tecnología Avanzada del campus Juriquilla, de Querétaro.

Este producto fue desarrollado como una solución a las pintas recurrentes que se realizan durante las marchas.

Es una pintura única en el mundo que contiene un agente hidrofóbico; o sea, que no puede mezclarse con el agua.

Te recomendamos: No mis cielas, los chapulines no pertenecen al museo de comida repugnante

Plástico de nopal

No hay nada más mexa que el nopal y por eso otro de los inventos mexicanos es un plástico biodegradable que tiene como base este ingrediente.

Detrás de este invento está la investigadora Sandra Pascoe, quien es académica de la Universidad del Valle de Atemajac.

La idea es que muchos de los plásticos de un solo uso que utilizamos actualmente, sean reemplazados con este que tarda aproximadamente un mes en deshacerse.

Nanomedicina catalítica

La medicina tiene un montón de ramas completas, pero la nanomedicina catalítica es muy importante porque ha permitido innovar el tratamiento de cáncer.

Esto se debe a que se trabaja con partículas microscópicas para desarrollar terapias e intervenciones que atacan la estructura celular de tumores cerebrales. Lo más impresionante es que este proceso va sin cirugía ni quimioterapias.

Esta rama fue desarrollada por varios investigadores, entre ellos Tessy María López Goerne.

Piel de nopal

Ya sabemos que parece chiste, pero sí hay un montón de inventos mexicanos inspirados en el nopal. Este es otro de ellos y su objetivo es revolucionar la industria de la moda.

A partir de las fibras y proteínas del nopal se puede crear piel vegana y así crear firmas de moda que trabajen con materiales sostenibles. Esta investigación fue liderada por Adrián López Velarde y Marte Cazares.

En esta entrevista puedes conocer todos los detalles de esta investigación e invento.

Un sostén que detecta el cáncer

Julián Ríos Cantú es el joven detrás de este invento mexicano. Todo comenzó cuando su madre pasó una batalla contra el cáncer de mama.

Fue entonces cuando, con tan solo 16 años, decidió crear algo que hiciera una detección temprana de este tipo de cáncer.

Con el tiempo creó EVA, un sostén con biosensores que detecta un cambio de temperatura en los senos y alerta sobre la posible presencia de cáncer.

Ese fue el primer paso, pues después de años de trabajo se dieron cuenta de que era un producto muy poco accesible.

Es por eso que ahora este joven y su equipo continúan desarrollando una cabina con la misma finalidad. El chiste es que estas cabinas las podamos encontrar en centros comerciales.