Yahoo Estilo Jessica Segura y el papel que le quitaron de niña en 'Carrusel' por el simple color de sus ojos
Jessica Segura vive uno de sus mejores momentos profesionales tras varios años de picar piedra. Junto a Daniela Luján y Mariana Botas conforman el popular trío Envinadas que en poco tiempo se ha convertido en un referente en la creación de contenidos. Participa en el programa de comedia Bola de locos y en pocos días volverá a reintegrarse a la nueva temporada de Me caigo de risa, además de que está a punto de estrenarse como standupera.
Segura, la famosa 'Tecla' de Una familia de diez, no podría estar más contenta con su agenda laboral a tope, como si esto fuera una especie de retribución tras el desafortunado inicio que tuvo de niña cuando a pesar de todas las pruebas superadas, casi siempre al final le decían "no esta vez".
Jessica Segura fue esa niña que siempre quiso actuar y desde pequeña se los hizo notar a sus padres que poco a poco fueron aceptando la idea, asegura la actriz en un reciente episodio del pódcast Bien viajadas. Cada vez que veía un casting publicado, arrastraba a sus padres para que la llevaran a probarse ante las cámaras, incluso, soñaba con ser "descubierta" por algún mánager que la lanzara al estrellato.
Pero su primera gran oportunidad la consiguió cuando el productor Valentín Pimstein anunció que haría una continuación de su exitosa Carrusel con Gaby Rivero en el mismo papel de la entrañable 'maestra Jimena', pero con nuevo talento infantil.
El proyecto ahora bautizado como Carrusel de las Américas buscaba educar a su pequeña audiencia infantil en historia y geografía pues el tema principal de las "clases" estaban enfocadas en medio siglo de historia compartida entre España y América. Pero la trama también mantenía los personajes de la primera versión mexicana.
Uno de esos papeles, el de "una niña pobre", fue... por unos segundos, para Segura, y se lo negaron por su físico.
"Hago mi casting, me quedo, pero te estoy hablando (...) que los castings eran períodos de tres meses hasta que ya finalmente te quedabas, entonces me quedo en Carrusel... y mi llamado así para las cortinillas de la entrada de la telenovela producida por el señor Valentín Pimstein y no sé qué, yo inventadísima me sentía, ¡güey!", recordó la actriz.
El productor, por lo que contó Jessica, quizá no estuvo en el proceso de selección porque cuando se presentó al llamado para grabar la entrada, no podía creer que ella estuviera ahí. "Me había quedado como la pobre de Carrusel y (por mis) ojos verdes me retachan. Exactamente Valentín Pimstein cuando ya estamos grabando la entrada de la novela dice '¡no manchen!, ¿cómo la pobre va a tener los ojos de la rica?'. Literal, yo estaba trepada en el carrusel, me baja y me sacan", contó.
Pimstein, conocido porque en sus historias podía pasar cualquier cosa por más inverosímil que pareciera, estaba encasillado en los estereotipos que retrataba en sus telenovelas.
"Me acuerdo que mi mamá llega de pronto y me dice 'ven' y yo 'mamá, estoy trabajando', y mi mamá 'ven', entonces me lleva al cámper y me dice 'te tienes que cambiar, ya nos vamos' y yo '¡¿cómo?!, imagínense, yo era una niña, no tenía idea qué onda".
La que parecía su primera gran oportunidad no ocurrió, la sumió en una depresión y sus padres pidieron ayuda profesional para evitar, lo que ellos creían, terminaría en una tragedia.
Después llegaría Valentina, la primera producción de telenovela de Alberto Castro que protagonizó su hermana Verónica Castro y Juan Ferrara. Y aunque esta vez su personaje sí fue confirmado, vivió muy poco.
"Mi personaje era el de Verónica Castro de niña, estaba en el 90% de la telenovela, estaba increíble. Me voy a Cancún (donde se grabó) pero a la gente no le gustó el papel de rica de Verónica, lo matan y lo convierten en una hermana gemela pobre escondida, y mi personaje se va a la m%$*", recordó la actriz.
Pero llegaron otras oportunidades, como ser conductora en Disney Channel, y poco a poco se fue ganando espacios en la televisión en otras telenovelas como Vivo por Elena, Soñadoras, Teresa, y hasta cine con El tigre de Santa Julia, Quemas las naves.
Y tres décadas después, Jessica Segura se ha convertido en una de las estrellas más solicitadas.
