Kourtney Kardashian celebra la 'baby shower' de su cuarto hijo a una distancia prudencial de su marido, contagiado de Covid

Travis Barker y Kourtney Kardashian en la 'baby shower' de este domingo credit:Bang Showbiz
Travis Barker y Kourtney Kardashian en la 'baby shower' de este domingo credit:Bang Showbiz

Kourtney Kardashian reunió este fin de semana a un sinfín de amigos y familiares en su casa de Los Ángeles para celebrar la inminente llegada de su cuarto retoño, fruto de su matrimonio con el músico Travis Barker. La estrella televisiva, madre ya de tres hijos con su ex Scott Disick, no reparó en gastos para deleitar a sus invitados con una jornada de domingo inolvidable, ya que ella misma organizó una 'baby shower' inspirada en los personajes y películas de la factoría Disney.

En su cuenta de Instagram, la celebridad aparece enfundada en un ajustado vestido con estampado de serpiente y un complemento indispensable para la ocasión: una diadema con las orejas del famoso ratón Mickey. Pero la decoración no se limitó a esos clichés. De hecho, los asistentes al evento -entre los que se encontraban Kris Jenner, madre de la socialité, y sus hermanas Kim y Khloé- fueron recibidos por un coro de cantantes enfundados en coloridos trajes de barbero, al más puro estilo de 'Mary Poppins', y disfrutaron de aperitivos y bebidas claramente inspirados en el mundo de fantasía creado por la multinacional.

En una mesa se concentraban varias botellas de cristal llenas de zumo verde, con una nota que decía 'Bébeme', en referencia a 'Alicia en el país de las maravillas'. La tarta que presidió el festejo incluía una figura de Mickey navegando en un barco muy especial, uno con forma de biberón, mientras que las copas de champán se sirvieron en bandejas que recordaban a la atracción 'It's a Small World' de los parques temáticos de la compañía. Nada se dejó al azar en un día que, sí o sí, tenía que ser perfecto. El propio Travis no quiso perderse la celebración a pesar de haber contraído el Covid, lo que le llevó a cubrir su rostro con dos mascarillas y mantenerse a una distancia prudencial de la gente.

Y es que la recta final del embarazo de Kourtney no ha estado precisamente exenta de dificultades. Hace unas semanas, la celebridad tuvo que ser ingresada de urgencia en el hospital para someterse a una delicada operación con la que salvar la vida del feto. El padre de la criatura tuvo que cancelar repentinamente su gira de conciertos y volar a Los Ángeles para acompañar a su esposa en un momento tan complicado y preocupante. "Siempre estaré eternamente agradecida a los médicos que salvaron la vida de mi bebé. Y también a mi marido, que vino a mi lado a toda prisa para cuidarme. Es mi roca", revelaba Kourtney en Instagram.