La denigrante pregunta machista de un reportero a Joana Benedek sobre su vida lejos de la TV

Joana Benedek ha estado lejos de la actuación desde hace más de una década. (Foto: Jim Wenger/WireImage).
Joana Benedek ha estado lejos de la actuación desde hace más de una década. (Foto: Jim Wenger/WireImage).

Recientemente varios reporteros dedicados al espectáculo tuvieron la oportunidad de hablar con la actriz Joana Benedek en el aeropuerto de la Ciudad de México, donde causó revuelo pues desde su retiro en 2011 la actriz ha sido hermética con su vida y lo poco se sabe de ella, es a través de sus redes sociales.

Fue una oportunidad única en la que habló sobre el por qué dejó la actuación, la paz espiritual que busca fomentar en sus seguidores y la felicidad de su reciente matrimonio. Y a todo respondió con sencillez y elegancia, incluso cuando uno de esos reporteros le lanzó una pregunta machista sugiriendo que su esposo la mantiene.

En algunos videos de ese improvisado encuentro se ven a los reporteros con sus grabadoras, teléfonos y micrófonos. Uno de ellos le pregunta sobre sus actividades actuales y Joana responde que está dedicada a los negocios con su esposo, Javier Vargas.

"¿Te puso la tarjeta de crédito?", dice otro de los presentes a quien no se le ve la cara sino solo un micrófono del programa Hoy.

Joana tarda un segundo, como sorprendida ante la ignorancia del comentario que nadie se atreve a reprobar. "¿Qué tarjeta?", dice sin dejarse intimidar por la rudeza de su entrevistador. "No, yo digo, ¿a qué te dedicas ahorita?", vuelve a increpar el hombre que intenta nuevamente reducirla a una mujer dependiente de su esposo y su tarjeta de crédito.

Pero la empresaria —tiene su propia marca de suplementos nutricionales— no se dejó provocar y le dio una respuesta mesurada, recordándoles a todos que sus 30 años de carrera la avalan y es una persona activa e independiente. "No, no, no. Yo no pienso así. (...) Afortunadamente, no dependo. Porque en el momento que dependes, la relación como que empieza a desequilibrarse; entonces yo siempre he pensado que para tener una buena persona a tu lado, que comparta principios, valores, es que tú tengas independencia económica. La independencia económica te da la independencia moral", le responde.

Joana y Javier se casaron en noviembre pasado y salvo algunas fotos que ella ha compartido en su cuenta de Instagram, se sabe que tuvieron un noviazgo de aproximadamente un año y ha sido él con quien ha hallado la felicidad.

"Estoy superfeliz en este momento de mi vida, he encontrado una pareja con la que tengo muchas cosas en común, modos de ver la vida, somos signo de aire los dos y eso compartir con alguien que piensa similar a ti sin que tú le impongas, vas de gane", dice sobre su aún reciente enlace matrimonial.

Además, se siente agradecida que con más de dos décadas fuera de cámaras y gracias a algunas retransmisiones en televisión de sus proyectos, sigue cobrando algunas regalías y sigue estando cercana a sus fans. "De alguna forma me han mantenido vigente; las novelas se han repetido no una, sino hasta tres veces, y La hora pico ya somos clientes. Eso ha permitido que nuevas generaciones estén en contacto con uno", dice agradecida.

Una vida llena de espiritualidad

Salvo su cuenta de Instagram, donde ocasionalmente comparte alguna fotografía o video (su canal de YouTube no está actualizado desde hace más de tres años), la actriz de Mujeres engañadas, Amigas y rivales, Destilando amor, ha mantenido una vida hermética.

"Le di prioridad a mi vida personal en los últimos años, es eso. Creo que la gente va transformándose y los objetivos también se transforman según tu manera de abordaje, tu percepción, tu momento en la vida. Me di cuenta que el ser exitosa en un área de mi vida que es la carrera no me daba esa total paz y felicidad", dijo Joana en el improvisado encuentro con los medios.

Ese camino hacia una vida más tranquila lo inició tras su participación en la telenovela Dos hogares de 2011. Un año después viajó a India donde tomó cursos espirituales y estudios en metafísica, budismo zen y el uso de la energía universal, bases para después lograr lo que realmente anhelaba tras varios años, ser gurú. Y basta ver sus redes sociales para descubrir que todo ese aprendizaje espiritual y emocional lo comparte con sus seguidores.

Pero también espera regresar a la pantalla chica, "cuando uno tiene una carrera de tantos años, es mentira decir que no te hace falta", expresó. Por ello no descarta regresar a la actuación con Emilio Larrosa, el productor que se encargó de varios de los proyectos juveniles, de corte cómico y populacheros de Televisa, y con quien mayor tiempo trabajó la rumana. De hecho, él fue el padrino de bodas y quien la condujo al altar en noviembre pasado.

Y cuando lo haga, espera que sea en alguna producción donde los estereotipos, en los que ella cayó como la mujer fatal, sean superados por las oportunidades de inclusión. "Yo estoy apoyando todo lo que es integración: desde la libertad sexual, que eso siempre ha sido un tabú. Apoyo mucho todo lo que es progresisimo, siempre y cuando se rescaten valores".

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