La dieta 'dirty Keto' que está haciendo sonar todas las alarmas

Si estás interesado, aunque sea mínimamente, por la alimentación y la nutrición, seguro que habrás oído hablar de la famosa ‘dieta Keto’. Lo que promulga es una alimentación en la que se suprime el mayor número de hidratos de carbono posible, considerados el mal por sus defensores, mientras que se glorifican las grasas en su papel de combustible del que nuestro cuerpo tira para los aportes de energía diarios que necesita. Son muchas de las personas que aseguran que esta dieta, orientada a las grasas y las proteínas, les funciona y eso la ha hecho muy popular. También hay quien la considera poco equilibrada.

Una hamburguesa sin pan y con queso, el sueño de la dieta ‘dirty Keto’.
Una hamburguesa sin pan y con queso, el sueño de la dieta ‘dirty Keto’.

Sin embargo, a la dieta Keto le ha salido ahora un hermano maligno en forma de la dieta ‘dirty Keto’ (Keto sucia). Lo que propone esta variación es, ya que la dieta keto se basa en una ecuación en la que el total de los nutrientes se completan a través de un 75% de grasas, un 15% de proteínas y un 10% de hidratos de carbono, ¿por qué no tirar de la comida rápida para completar el esquema? En realidad, podría llegar a tener su lógica -una lógica perversa, eso sí- ya que la ‘fast food’ es básicamente comida muy rica en grasa. Se trataría de suprimir los hidratos de carbono en todas las recetas. Así, la hamburguesa se pide sin el pan, aunque sí con el extra de queso y otras salsas; las enchiladas, con carne y queso, pero sin los nachos… Es decir, se sigue de forma fehaciente la receta Keto, pero sin leer la letra pequeña. Y aquí viene el error.

Lo que ocurre es que este tipo de alimentación promulga que se coma grasa, sí, pero saludable. Es decir, estamos hablando del aguacate, los frutos secos o el salmón. Ninguno de estos suele estar presente en las recetas de comida rápida -exceptuando, claro está, el guacamole-. Las grasas de estas recetas tienen más que ver con la mantequilla, el queso o las que tiene la propia carne, que suele estar procesada. Para más inri, son saturadas y aquí es donde nos encontramos con el verdadero problema de la ‘dirty Keto’: obviar que las grasas han de ser de calidad y pensar que con quitarse de encima los hidratos de carbono todo el monte es orégano.

El aguacate y el huevo, pilares de la dieta keto.
El aguacate y el huevo, pilares de la dieta keto.

Los defensores de la ‘dirty Keto’ defienden que, con tal de que no haya hidratos de por medio, se puede tomar comida basura incluso tres veces al día. Los expertos en nutrición ponen el sentido común y explican que esta variante puede conducir a sufrir diabetes o enfermedades del corazón por el abuso de grasas saturadas. Es lo que tienen las interpretaciones libres de las dietas, que pueden acabar volviéndose en nuestra contra…