La vida de Cristina Saralegui 14 años después de su retiro de la TV: ni es adicta ni está en la quiebra

Durante la década de los 90’s se ganó el calificativo de ‘la reina de los talk shows’. Fue precursora de este tipo de contenidos para la comunidad latina con El show de Cristina y extendió el éxito hasta 2010, año en que el programa llegó a su fin. Desde entonces, Cristina Saralegui se ha mantenido alejada de las pantallas.

Su ausencia derivó en un sinfín de leyendas urbanas alrededor de su persona que ella misma se encarga de desmentir ahora que ha reaparecido.

Con motivo de su cumpleaños 76, la famosa periodista y presentadora acudió a Univisión para ser festejada en el programa Despierta América. Pulcra en su vestimenta, con buen semblante y sonriente, su imagen contrastó con la figura creada por mitos y falsedades sobre ella en los últimos años.

A lo largo de estos 14 años que estuvo distanciada de la televisión, Saralegui ha sido protagonista de fake news con versiones que fueron desde historias realmente preocupantes hasta tramas risibles. La versión más grave fue cuando se dijo que había sufrido una fuerte adicción y recaída en las drogas.

Se añadieron otras ocurrencias más en el mismo tono. Por ejemplo, el alcoholismo. Se llegó a contar que debido a sus problemas familiares se había refugiado en el consumo de bebidas alcohólicas y hasta se afirmó que había ingresado en un centro de rehabilitación.

Asimismo, se rumoró que había despilfarrado todo su dinero, que estaba en la bancarrota y nadie quería darle trabajo.

Pero es la propia Cristina Saralegui quien ahora desmiente todos esos chismes: "Les voy a decir la verdad. Ni soy alcohólica, ni soy drogadicta, ni estoy quebrada. ¿En qué cabeza cabe, con todo lo que he trabajado en mi vida, que nosotros que éramos dueños de tres estudios de televisión, vamos a estar quebrados?".

La conductora también fue víctima de montajes que la mostraban en un deteriorado estado de salud, y esa situación le desagrada por las repercusiones que tiene con familiares y amigos que se preocupan luego de caer en la trampa de esas informaciones, sobre todo en aquellos que radican lejos. Alterar a otras personas es algo que causa molestia porque considera que eso es jugar con los sentimientos ajenos.

"A mí me han matado cuatro veces. Se ponen a decir cosas muy feas, cosas muy fuertes que no son verdad. (...) Me molesta mucho que hieran a la gente. Una familiar mía tuvo que escribirme para preguntar si yo estoy bien. La gente que nos quiere están preocupados", comentó en Despierta América.

Desde su retiro de la televisión, la periodista ha priorizado su hogar. Se define a sí misma como una mujer que disfruta la calma de su casa y la armonía de convivir con su esposo, hijos y nietos. Respeta mucho esa privacidad porque a los miembros de su núcleo familiar no les gusta estar en la mira de los reflectores y ella está de acuerdo en eso.

Su atención principal la ha centrado en su hijo Jon Marco, un hombre con trastorno bipolar. Fue cuando él cumplió 19 años cuando ella notó que algo no andaba bien. En un principio creyó que era depresión, sin embargo, cuando el chico intentó quitarse la vida, la periodista cayó en cuenta de que se trataba de un asunto más delicado. Fue el propio Jan Marco el encargado de atenderse.

"Se montó en su carro, manejó hasta el hospital que está en la esquina de mi casa, fue al piso psiquiátrico y él solo se firmó y se quedó ahí", narró Cristina.

Luego de internarse, Jan Marco recibió el apoyo y acompañamiento de su madre, que comenzó a acudir con él en las terapias con la psiquiatra para entender el trastorno bipolar, cómo ayudarlo en familia y cómo trabajar de forma conjunta para una buena calidad de vida en lo colectivo y en lo individual para él.

Ahora vive con ella en su casa y la conductora está agradecida de que haya podido superar los peores momentos. "Está tan bien mi hijo, gracias a Dios".

"Hace mucho no me ven en televisión. No soy una persona de postear en las redes, no salgo mucho. (...) Quiero decirle a la gente que estoy bien, que no se preocupen por mí", precisa al público para que dejen de creer en la serie de rumores que se cuentan y han contado acerca de su presente.

Como si jamás se hubiera alejado de la televisión, Cristina Saralegui apareció en Despierta América para desenvolverse con soltura como la comunicadora que es. Continúa con el lenguaje fresco, directo y ameno que entretuvo a las generaciones que crecieron sabiendo que el concepto de talk show no se entiende sin su nombre.

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