Laura Rubio, la novia de Pablo López, una más en la familia durante su actuación en Madrid

Este domingo, la música de cantante, compositor y pianista Pablo López (39 años) iluminaba el Parque Enrique Tierno Galván de Madrid, en su único concierto en la capital española. Una simbólica cita al aire libre que pertenece a su gira 2023, después de su aventura en Latinoamérica, y con la que ahora pretende conquistar los escenarios de la geografía española. Una decena de miles de personas abarrotaban las gradas del auditorio, entre los que se dejaron ver Lola, la madre del cantante que fue recibida con aplausos; su hermano, el también artista Luigi López, acompañado de su novia; así como Laura Rubio, la actual pareja del cantante, muy bien escoltada por su hermano y un grupo de amigos.

Te mostramos el momentazo de Pablo López con su sobrina en su último concierto

familia
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Con los primeros acordes de su nuevo tema El abrazo más grande de todos los tiempos, Pablo López abría el repertorio de una noche emocionante. El público enloquecía cada vez que el de Fuengirola se acercaba a su piano.  En un acústico de grandísima calidad y acompañado de su magnífica banda los fans disfrutaron de varios de sus grandes éxitos como La niña de la linterna o Mama no. Tras un momento de locura absoluta, López paró el concierto para agradecer al público su asistencia. “He venido a hacer música. Soy feliz”, con esto introducía uno de sus últimos éxitos Quasi, que despertó la fuerza de la percusión que vibraba en todo el auditorio.

Un momento emocionante 

Cuando el sol ya caía en el Parque Tierno Galván, el malagueño bromeaba con haberse saltado un tema: “Me he saltado una canción, aunque muchas veces me saltó ella a mí”. Pronto comenzó a sonar El patio, que a petición del propio artista acabó convirtiéndose en un dueto a capella con el público. Las luces apagadas ambientaron a la perfección canciones como Te espero aquí, Mariposas, o Hijos del verbo amar que despertó el ambiente. Con cada nota del piano Pablo se ganaba cada vez más a su público, al que sorprendió cuando comenzó a interpretar un trocito del tema Pedacitos de ti de su gran amigo Antonio Orozco, o cuando se le escapaban algunos acordes de canciones del 'maestro' Alejandro Sanz.

Pablo con su piano
Pablo con su piano

Llegando al cierre del concierto y con un público en pie gritando y bailando, el artista interpretó sus últimas canciones del repertorio: El mundo, El mejor momento y El gato. Pero, ‘el mejor momento de la noche’  llegó cuando Pablo pidió a los alli congregados que encendieran las luces de sus móviles para cantar su tema Lo saben mis zapatos.

El malagueño agradeció todo el cariño recibido y la presencia de los suyos. Y dirigió unas cariñosas palabras a su madre Lola, a su equipo, a su discográfica, a su hermano Luis, a su primo Peter, al que llama "hermano pequeño" y a la hija de éste, Carmen, a la que considera su sobrina; a sus amigos, a sus fans y 'al amor'. La próxima cita del cantante con su público será en Sevilla el 16 de junio en el Icónica Sevilla Fest.