Libertad Palomo y el "monstruo" que debió enfrentar para descubrir quién era

Libertad Palomo/Captura de video de YouTube.
Libertad Palomo/Captura de video de YouTube.

Por muchos años Jacqueline Arizmendi fue la figura pública a la que nos acostumbramos después de que ella decidiera que Armando Palomo, la identidad con la que creció y trabajó hasta inicios del 2000, era una etapa que debía quedar atrás para encontrar su verdadero yo.

Hoy, Jacqueline también se hace a un lado y prefiere presentarse como muchos otros la conocen, Libertad Palomo, la actriz transexual que después de dos décadas nos confiesa quién es realmente:

Soy una mujer transexual porque descubrí que lo era, pero no soy homosexual.

Para Armando, Jacqueline, Libertad, poder asumirse como transexual y como mujer ha sido un camino que le ha tomado toda la vida. A sus 60 años, la actriz se muestra más serena cuando habla sobre cómo ha sido su transición.

"Trataba de decirle (a Dios) 'dame una respuesta, explícame qué me está pasando, quiero estar cerca de ti'. Dentro de mi vida viví también una gran confusión, yo me percibo como una chica, pero no me gustan los hombres. Dicen que lo que tú niegas, te persigue, como yo siempre lo negué, como nunca lo quise aceptar, me perseguía, me perseguía, fue tan fuerte para mí, que (decía) 'no puedo lastimar a mi pareja', que cuando lo hablé con mi psiquiatra, mi terapeuta, me decían '¿por qué en lugar de tenerle miedo al monstruo, no te haces amigo del monstruo?', tuve que vivirlo".

Cuando aún era Armando, estuvo casado con Margarita Isabel, "una señora guapa, muy sensual, muy bonita en su forma de arreglarse", por más de una década. Con ella, vivió el primer momento de enfrentar al monstruo cuando ella la descubrió vistiendo su ropa y con su maquillaje. "Estoy a todo dar en la sala cuando veo que se abre la puerta y era Margarita, salgo corriendo y me meto al baño, entonces ahí viene una tragedia porque creía que yo estaba con otra chava, 'ábreme la puerta y saca a la vieja gorda esa que tienes adentro'".

El entonces actor decidió mentirle a Margarita y decirle que le preparaba una fiesta sorpresa temática isabelina. Años después, cansado de la angustia de la deshonestidad hacia su pareja y por hallarse le confesó la verdad. El impacto de la noticia solo le hizo sugerirle que sus dudas sobre ser mujer solo podían resolverse con "fuerza de voluntad". Terminaron separándose.

Fue el comienzo de una travesía: su papel de "Bugambilia" en Aventurera le ayudó a asumir su nueva identidad, pero cometió un delito por falsificación porque presentó una identificación apócrifa cuando aún no cumplía con el trámite oficial de cambio de nombre y pasó unos días en la cárcel.

El traspiés no perjudicó su carrera actoral pues obtuvo algunos papeles en Televisa con su nueva identidad, pero en TV Azteca, donde protagonizó la serie Los Sánchez al lado de Luis Felipe Tovar, logró una mayor exposición. Esa fue la última vez que apareció en televisión, y también desapareció de otros escenarios.

En el último año, dos veces ha sido la noticia: la primera, durante el funeral de Carmen Salinas en 2021; y en agosto pasado cuando indirectamente fue testigo de un misterioso caso de presunto intento de secuestro de una joven que le pidió ayuda.

A unos meses de ese caso, Libertad Palomo protagonizó una nueva entrevista en El minuto que cambió mi destino, en la que habló también sobre la cirugía neovulvavaginoplastia en su transición, concluyendo así los rumores sobre su físico. "Se hace una recolocación de los órganos, finalmente durante las primeras seis semanas de vida de todos los seres humanos todos fuimos mujeres, pero llega un momento en el que los cromosomas hacen ese cambio, no sé si ahora se sepa qué es claramente lo que sucede o qué es lo que detona eso y eso es lo que hace la diferencia", explicó.

Pero detrás de la seguridad que proyecta, Libertad también es consciente del odio que personas como ella, en la búsqueda y aceptación de su identidad de género, deben enfrentar en una sociedad ignorante enmascarada como conservadora.

"Es muy cruel lastimar a las personas por desconocimiento, porque por eso matamos, 'por mis miedos voy y matar a una mujer, voy a matar a un transexual porque me da miedo, estoy viendo algo que no me gusta', entonces indaga dentro de ti y resuelve tus propios miedos, porque el miedo es ignorancia, antes de ir y lastimar a otros", se sinceró.

Pero también hay amor en su vida. Desde hace 15 años mantiene una relación con una persona que, según sus palabras, es la mejor que está en este momento. "No dejo de reconocer el gran amor para muchas de las personas que me fueron acompañando en la vida. Siento que soy una persona muy afortunada".

Y se nota. Libertad es una mujer liberada.

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