Martín Fierro 2024: ¿cómo le fue en el rating a la ceremonia?
Históricamente, la ceremonia de los Martín Fierro era una de las noches más esperadas por el público. Ver a todas las estrellas de la televisión juntas en una misma pantalla siempre fue uno de los grandes atractivos de la fiesta. Una vez más, Telefe puso toda la carne al asador en una transmisión larguísima, que en materia de rating dejó gusto a poco.
El canal puso toda su programación al servicio del premio. Por la mañana, desde los ciclos A la Barbarossa y Ariel en su salsa, y desde los noticieros adelantaron detalles de lo que ocurriría en la ceremonia (Telefe Noticias terminaría llevándose el Oro). Y a partir de las 17, comenzó una gran cobertura de la previa con Pía Shaw y Noe Antonelli, con los preparativos de la gran fiesta de la televisión, que obtuvo un promedio de rating de 7,5 puntos.
A las 19, Iván de Pineda y la China Ansa –otra ganadora de la ceremonia, quien se llevó el premio revelación–, junto con Robertito Funes Ugarte, Sol Pérez y Priscila Crivo, ubicados en tres posiciones clave del hotel Hilton, fueron los encargados de descubrir cada uno de los looks y entrevistar a los invitados que desfilaron por una alfombra azul.
No es novedad que la pantalla chica está perdiendo encendido mes a mes y los números de agosto legitiman el cuadro de situación. Si se analiza el encendido de agosto (la suma de los ratings promedio de las emisoras en el mes), fue el más bajo del año: apenas 17,2 puntos. Bajó siete décimas con respecto de julio y 2,2 puntos si se lo compara con agosto de 2023.
Transmisión dividida
Los números de rating de la ceremonia del Martín Fierro estuvieron en consonancia. La celebración anual que habitualmente descollaba por sus altos índices de audiencia, esta vez estuvo mucho más acorde a la televisión de un dígito. Para mejorar su promedio, Telefe decidió dividir la larga transmisión en partes y así fue que los números de Kantar Ibope Media se tabularon en las planillas como Alfombra Azul, con 9,9 puntos; una primera parte de la ceremonia (desde las 21.08 hasta las 0.28), con un promedio de 17,8 puntos; la trasnoche (desde las 0.29 hasta la 1.04 del martes) con 11,2 puntos y el momento del Martín Fierro de Oro, con 8,3 puntos. Si se promedian estos cuatro “bloques” creados, el promedio general es de 11,8 puntos.
Si bien estos resultados son buenos dentro de una televisión en la que la mayoría de los programas marcan un dígito, si se los compara con los promedios de 2023, la baja es significativa : en la entrega de premios anterior, que también emitió Telefe, promedió 23,6 puntos y el pico más alto de la noche fue de 27,2 puntos. Este año, el pico de la transmisión fue considerablemente inferior: 20,2 puntos.
Varios pueden ser los motivos de la fuerte baja que tuvo el evento: una transmisión eterna de casi cuatro horas y media es imposible de seguir, minuto a minuto, para el común de la gente. La alfombra azul careció de atractivo visual, algo extraño en Telefe que sabe desarrollar como pocos este tipo de emisiones. El exceso de PNT y “chivos” la hicieron tediosa y repetitiva.
Los puntos más altos de la noche fueron los homenajes a Adrián Suar por los 30 años de su productora Polka y a Cris Morena, responsable de tantos éxitos de Telefe. Alrededor de las 22.30 se dio uno de los cuartos de mayor rating de la noche con 19,4 puntos, cuando la creadora de Margarita hizo un emotivo discurso en el que repasó toda su carrera y no faltó el recuerdo de su hija Romina Yan. Por otro lado, estos reconocimientos, sumados al de Nuevediario, reflejaron una televisión que no existe más.
Otro de los momentos clave de la noche ocurrió cuando Susana Giménez recibió un llamado en vivo y contó a los presentes las novedades de su clásico ciclo, que comienza el domingo a las 22. Ese cuarto fue el más alto de la transmisión con 19,6 puntos.
Un capítulo aparte fueron las redes sociales y en especial X, en donde varios nombres propios fueron Trending Topic y varias polémicas se reflejaron en el ex Twitter. Los televidentes se pronunciaron a favor y en contra de los ganadores, como suele suceder en el folclore de los Martín Fierro.
El rating de la ceremonia de anoche no hizo más que reflejar la foto en la que se encuentra hoy la pantalla chica . Una industria en crisis, que no escapa a la realidad del país, que busca la manera de detener la merma de público. En 2024, la mayoría de los ciclos de la TV abierta están midiendo por debajo de los 5 puntos y apenas Gran Hermano logró un promedio general de dos dígitos, números que advierten el desinterés de la gente por la repetición de temas y personajes, en una industria que supo en su momento parar el país con el final una ficción o un programa en vivo. En la creatividad y astucia de varios de los ganadores de anoche está la clave para revivir una pantalla que hoy está en terapia intensiva.