Marta González reveló las secuelas que le dejó el accidente que sufrió en un supermercado: “Tengo grandes dolores”
Marta González es una reconocida actriz argentina, con una gran trayectoria en teatro y series de producción nacional. Pero hace una semana su nombre fue noticia no precisamente por su talento, sino por una imagen suya que se viralizó en las redes sociales y encendió las alarmas de aquellos que la siguen y la quieren. Es que la intérprete compartió un posteo en forma de denuncia pública por su caída en un supermercado de la ciudad de Buenos Aires. Tras ello, contó en vivo su terrible experiencia.
“Sí, esta soy caída en el supermercado y el señor nos salvó de algo mucho más grave porque, después de la caída de Bety arriba, mío se deslizaba más el carrito y podría caer sobre nosotras dos. Una vergüenza el ascensor no anda y los carritos no se traban”, redactó la actriz junto a la fotografía en la que se la puede ver en el suelo.
Este jueves Gonzalez visitó Desayuno Americano (América) y conversó con Pamela David y el resto del panel acerca de su pasado artístico y su presente laboral y personal. Lo cierto es que antes del típico juego de las tazas en el que la conductora le propuso a la actriz hablar sobre ciertas cuestiones íntimas, detalló cómo fue el episodio en el que se cayó luego de hacer las compras.
“Ahora de pronto tengo grandes dolores de cabeza, decí que me salvó mucho el calmante sin químicos que me recomendó el médico”, comenzó Marta y continuó: “íbamos a hacer las compras al supermercado y la señora que trabaja en mi casa llevaba el carrito, yo iba atrás (en la cinta mecánica que se observa en la imagen). El carrito no tenía la traba y por el peso, ella se viene para atrás y yo estaba detrás de ella”, comentó.
Y agregó: “Entonces me caí… el cag*** que me pegué, porque yo estoy operada de un ACV. Yo le pedí a mi hija que saque la foto, porque eso iba a servir. Estuve 40 minutos esperando que alguien del supermercado viniera. Yo llamé a mi hija que vive a cuatro cuadras. Ellos llamaron a la asistencia, que nunca venía”. Antes de concluir con su relato, aseguró que se encuentra estable, pero que no pudo continuar por un corto lapso con su obra teatral: “Bendito sea Dios, de todas maneras tuve que suspender una función”.
Marta González fingió un desmayo para obtener un reembolso
Luego de la anécdota en la que la intérprete contó cómo fue su accidente en el supermercado, accedió al juego de las tazas. Según las reglas, la conductora tiene que realizar una pregunta y la participante debe arrojar una pelota de ping-pong hacia un conjunto de tazas. Si logra embocar en alguna de las mismas, no deberá responder. “¿Alguna vez fingiste un desmayo para que te devuelvan una compra?”, consultó Pamela. En ese instante, González tiró la pelotita, pero esta siguió de largo. Por ende, se vio obligada a contar el hecho.
“Es verdadero. Fue en Estados Unidos porque no me querían devolver un dinero”, se sinceró González. “Había comprado… Mirá cuántos años hace, un GPS. Uno especial que me había pedido mi hija. Lo quise devolver porque, ponele, me había salido 250 dólares y cuando voy con mi hermana, me doy cuenta de que salía menos”, agregó la actriz con un rostro apenado.
Marta González recordó a su hijo y a su hermano y habló del intento de suicidio
“Lo cierto es que salía 150 dólares. Yo fui al día siguiente porque viste que en Estados Unidos…”, esbozó González y completó Pamela: “Se supone que te devuelven todo lo que no querés”. “Bueno, pero no quiso. Yo le dije perdoname, me trajeron uno de Europa y él (el vendedor), que era un argentino, me dijo que no. Entonces respondí: ‘Ay, no, no. Me voy a desmayar’”, contó la actriz y remarcó: “Y mi hermana que estaba ahí conmigo me decía: ‘¿En serio?’… Si vos decís que te vas a desmayar, es que no te vas a desmayar”.
De esta manera, Marta González detalló la situación hilarante que vivió en el exterior a causa de la negativa del local a darle un reembolso. Entre risas, afirmó que el desmayo existió y esto le sirvió para llamar la atención y concretar su intención de obtener el dinero. Muy lejos de su caída real en el supermercado de Buenos Aires, allí estuvo todo preparado.