Meg Ryan: el intenso romance con un rockero, los desafíos de la fama y su vuelta triunfal a Hollywood como directora
Meg Ryan se mantuvo casi una década fuera del ojo público, pero lejos de retirarse definitivamente de las cámaras, “la novia de América” prepara su vuelta triunfal con What Happens Later, una comedia romántica en la que no solo actúa, sino también escribe y dirige. Cuando la actriz “desapareció” de las pantallas, las teorías se dispararon: ¿Hollywood le daba la espalda por su edad? ¿Estaba cansada de la actuación? ¿Tenía problemas personales? Lo cierto es que tras el éxito de Tienes un e-mail en 1998, Meg Ryan fue alejándose paulatinamente de los sets para “vivir más” y enfocarse en todas esas experiencias que se estaba perdiendo. Entre estas cosas en las que Ryan quería enfocarse se encontraba la maternidad, ya que la actriz es madre de dos hijos : Jack (fruto de su matrimonio con Dennis Quaid) y Daisy, a quien adoptó en el año 2006.
Las razones de su “respiro de 10 años” en Hollywood
Fue en mayo pasado cuando la actriz, que venía cultivando un bajo perfil, fue vista en Nueva York brindando su apoyo a Michael J. Fox durante una proyección especial del documental Still: A Michael J. Fox Movie en el Alice Tully Hall, del Lincoln Center de Manhattan, y puso de nuevo un pie en el centro de la escena mediática. Para ese momento, ya había adelantado su vuelta a la comedia romántica y a su trabajo como directora. “¡He tenido como un respiro de diez años! Me encantó”, declaró la actriz al promocionar Ithaca y sumó: “No era un plan ni nada por el estilo, pero realmente me descubrí más como artista en estos últimos diez años que cuando era actriz. Todo ese tiempo en que se mantuvo distanciada de su carrera profesional, la artista se enfocó en otras pasiones e invirtió su tiempo en escribir, viajar y, por sobre todo, a disfrutar de su familia.
Entre los pequeños placeres que tanto extrañaba, y que sentía que estaba perdiendo por el torbellino de su fama estaban el poder salir a caminar tranquila, sin tener que ocultarse o disfrazarse, y pasar tiempo con sus hijos. “Llegué a decirle a algunas de las personas que me representaban en ese entonces: ‘Chicos, no me dejen mensajes diciendo que es una emergencia. Una emergencia es si le pasa algo a Jack (su primogénito)’ . Pero no pudimos ponernos de acuerdo”. Hoy Jack, es conocido por su papel en la serie The Boys y comparte su amor por la actuación no solo con su madre sino también con su padre, Dennis Quaid, de quien Ryan se separó en 2000. Precisamente, en ese mismo año Ryan filmó Prueba de vida, el film de Taylor Hackford donde conoció a su futura pareja, Russell Crowe, aunque aquella relación no llegaría lejos.
Cinco años después de la separación de Crowe, y una vez que sanaron las heridas de su conflictivo matrimonio con Quaid, la actriz se reconstruyó y, en 2006, las ganas de volver a ser madre la invadieron. “Ya no me importaba lo que la gente pensaba, podía vivir tranquila, lejos de la prensa”, declaraba por entonces, cuando llegó a su vida Daisy True, una pequeña que adoptó en China. “Estoy completamente convencida de que ella era la hija que tenía que tener, nunca sentí que estaba en una misión de rescate o algo parecido, tan solo quería un bebé, alguien con quien pudiera conectar, y somos tan compatibles. Si bien tuve a Jack y a Daisy de maneras diferentes, no hay diferencias en el amor que siento por ellos”, expresó con elocuencia.
Una historia de amor real como inspiración
El primer flechazo entre Meg Ryan y el músico John Mellencamp ocurrió en 2010, después de que éste se separara de su esposa de dos décadas, Elaine Irwin. Y así fue como la protagonista de Tienes un e-mail y el cantante de “Paper in Fire” vivieron un amor de bajo perfil hasta que en 2014 decidieron tomarse un tiempo. Al parecer, la distancia entre ellos –ella vivía en Nueva York y él en Indiana– fue uno de los motivos que desencadenó la ruptura. En 2017, Meg volvió a darle una oportunidad y ambos llegaron a comprometerse. “¡Comprometidos!”, anunció ella en sus redes sociales, junto con un dibujo de ambos tomados de la mano. Sin embargo, tampoco funcionó y la pareja volvió a separarse en 2019.
Precisamente Ryan escribió su nueva película luego de terminar aquella larga e intermitente relación ¿Eso tuvo algo que ver con la trama de What Happens Later, donde los protagonistas son amantes que se persiguen durante años? No específicamente, dijo. “Pero sí en la idea de que algunas personas dan vueltas y vueltas” y nunca lo resuelven. “Y tal vez no lo necesiten”, remarcó la actriz para The New York Times.
Los desafíos de su nueva película
A sus 61 años, la artista sintió la necesidad de poner en orden el pasado y encontrar consuelo en el presente. “Cuando tenés mi edad y mirás hacia atrás, ves muchas historias que esperaron un final feliz. Pero en esta película hay preguntas totalmente diferentes en juego”, dijo Ryan. Preocupada por los mandatos que cargan las mujeres, ahora, como directora, busca traspasar los límites del “y fueron felices para siempre” (“una idea loca”, según su definición) y se anima a explorar cuestiones como el envejecimiento y el arrepentimiento en las parejas. Esas dos premisas son las que explora su nueva película What Happens Later. En dupla protagónica con David Duchovny, la trama se propone cuestionar algunas convenciones cinematográficas y jugar con una paleta emocional diferente.
“Siento que tuve el viaje, el viaje de Hollywood. Ya fui a la luna. Así que no tengo grandes ambiciones de volver a eso”, confesó Meg en una reciente entrevista con The New York Times. “Me tomó mucho tiempo tener algo que decir. Mi interés en esta película no tiene que ver con la percepción que Hollywood tiene de mí. No me interesa controlar eso . No creo que pueda”, confesó Meg en una reciente entrevista. “En lugar de eso, quería una historia que planteara preguntas vulnerables y heridas: “¿Pienso en aquel viejo amor... qué pasaría si alguna vez lo viera, después de todo este tiempo? ¿Qué nos diríamos el uno al otro?” Y fue así que se animó a enmarcar todas esas cuestiones dentro de una comedia romántica. Ryan se siente confiada: sabe que su nueva película es el proyecto ideal para volver al ruedo.