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¡Ciao, Monica Vitti!: el último adiós a la más humana de las actrices italianas

Existen momentos que hacen historia en el cine, que parecen sacados a su vez de una película; escenas de la vida real que se convierten en leyenda. Tal es el caso del estreno en Cannes de 'L'Avventura' de Michelangelo Antonioni el 15 de mayo de 1960, la noche en que la debutante Monica Vitti se convertiría en una radiante y auténtica estrella.

Michelangelo Antonioni et la vedette italienne Monica Vitti devant l'affiche du film 'L'Avventura' présenté en avant-première mondiale au Studio Publicis à Paris, France le 14 septembre 1960.  (Photo by Keystone-France\Gamma-Rapho via Getty Images)
Michelangelo Antonioni y Monica Vitti en el estreno de 'L'Avventura' en 1960. (Photo by Keystone-France\Gamma-Rapho via Getty Images)

El público quedó estupefacto ante las largas secuencias en las que Monica Vitti deambula por su vida y trata de encontrarle algún sentido después de la desaparición de su amiga (Lea Massari) al principio de la película, un acontecimiento que nunca se explica ni se resuelve. La respuesta fue tan mala, abucheos y gritos, que Antonioni y Vitti huyeron del teatro, y la Vitti rompió en llanto.

Sin embargo, esa misma noche Roberto Rossellini, Federico Fellini, Jean Renoir y muchos otros cineastas firmaron una declaración elogiando la película, que fue aclamada por la crítica y obtuvo el premio del jurado ese año, convirtiendo a la Vitti, entonces de 28 años, en una estrella de cine internacional.

Nacida María Luisa Ceciarelli en Roma el 3 de noviembre de 1931, la Vitti quiso ser actriz desde muy niña, pero sus padres no estaban de acuerdo; la postguerra italiana no daba a los católicos mucha esperanza y mucho menos cuando se alcanzan los 1.70 de estatura a los 14 años. Sin embargo, se impuso a sus padres y c​​omenzó a actuar en producciones de aficionados como una forma de sentirse cómoda en su piel, ya que al crecer no se consideraba bonita y los muchachos de su barrio le hacían burla por alta y de largos brazos y piernas.

A portrait of Italian actress Monica Vitti. 1968 (Photo by Mondadori via Getty Images)
Monica Vitti en 1968 (Photo by Mondadori via Getty Images)

Una cosa llevó a la otra y la Vitti apareció pronto en teleteatros en la televisión italiana y en tapas de revistas como modelo, aunque nunca se lo creyó del todo: decía que no tenía una nariz como la de Sofia Loren para ser "bonita", aunque tampoco cedió nunca a la tentación de hacerse un "trabajito". Conoció a Antonioni cuando ella dobló la voz de una actriz para su película “Il Grido” (1957); ella se incorporó a la compañía de teatro de Antonioni y entre ambos se dio un entendimiento; él dejó de vivir con su esposa, Letizia Balboni y se instaló con Vitti, que era 14 años más joven que él, en un apartamento en la vía Margutta, donde él escribió el guion de 'L'Avventura' para ella.

La relación duró entre 1958 y 1972 y aún después de separase, siguieron colaborando y manteniendo una relación amistosa, fuerte, llena de confianza. Fue Antonioni quien logró persuadirla de que era hermosa, y quien la convenció de llevar el cabello rubio, cosa que hizo toda su vida.

Considerada la más "humana" de las actrices italianas de su generación — era creíble como una mujer real a diferencia de estrellas despampanantes como Claudia Cardinale, Sofia Loren, Gina Lollobrigida o Virna Lisi, que eran símbolos sexuales de la época—, la Vitti lo mismo destacó en las obras de arte de Antonioni como 'La Notte' (en la que fue soporte para Marcello Mastroianni y la formidable Jeannne Moreau) o 'L'Eclisse' en la que tenía una química espectacular con Alain Delon.

Monica Vitti en una escena de 'Modesty Blaise', 1966. (Photo by 20th Century-Fox/Getty Images)
Monica Vitti en una escena de 'Modesty Blaise', 1966. (Photo by 20th Century-Fox/Getty Images)

También trabajó con directores como Joseph Losey en su adaptación 'pop art' del famoso cómic 'Modesty Blaise' (una especie de James Bond con minifaldas psicodélicas), Ettore Scola, Mario Monicelli (en sus famosas comedias sexuales de los 70) y con Luis Buñuel en 'El fantasma de la libertad' en 1974 — la penúltima película del realizador español. En 1980 hizo su última película con Antonioni, 'El misterio de Oberwald', una adaptación de una obra de Jean Cocteau que le sirvió como otra oportunidad para que Antonioni la dirigiera y encontrasen ese lenguaje secreto que habían manejado tan bien 20 años atrás.

Monica Vitti en Venecia en 1980. (Photo by Archivio Cameraphoto Epoche/Getty Images)
Monica Vitti en Venecia en 1980. (Photo by Archivio Cameraphoto Epoche/Getty Images)

En 1989, Vitti se puso detrás de las cámaras por única vez y dirigió y protagonizó una película junto a Elliott Gould llamada 'Secret Scandal', pero comenzó a sufrir de la enfermedad de Alzheimer y su esposo, Roberto Russo, la cuidó durante los últimos 20 años de su vida.

Ella tenía familia en México, ya que uno de sus hermanos se había establecido en la capital mexicana y en los años 80 y 90 fue visitante frecuente de sus sobrinos, hasta que el avance de la enfermedad en la década del 2000 le impidió dejar Roma, y también participar en las exequias de su amante y mentor, cuando este falleció en 2007.

(GERMANY OUT) Vitti, Monica *28.11.1931- (Eigentlich Maria Luisa Ceciarelli)  Schauspielerin, Italien  - Portrait, traegt eine Brille und laechelt  - undatiert (um 1995)  (Photo by Rainer Adolph/ullstein bild via Getty Images)
Monica Vitti en 1995 en Cannes. (Photo by Rainer Adolph/ullstein bild via Getty Images)

La idea de que alguien tan sensacional y vivaz como Monica Vitti pasara tanto tiempo sin memoria ni identidad es algo que ni siquiera el profundo pesimismo de Antonioni podría haber anticipado. Al igual que Antonioni, sin embargo, su rostro inolvidable siempre permanece para vernos desde la pantalla, para que podamos para siempre perdernos en esa mirada inolvidable.