Muerte de raperos en 2024 ¿Es la música una profesión peligrosa para los artistas de Hip Hop?

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La comunidad del hip-hop ha sufrido pérdidas importantes en 2024, con la muerte de algunos de sus artistas más grandes. No todo fueron malas noticias, el mundo de la música urbana en inglés también alcanzó hitos y logros, pero las tragedias fueron importantes.

Entre sus víctimas se encuentra Enchanting, una estrella en ascenso de Texas, quien falleció el 11 de junio a los 26 años por una sobredosis accidental de drogas. Fue exmiembro del sello 1017 de Gucci Mane, y su muerte dejó devastados a fanáticos y artistas de todo el mundo.

Después de su fallecimiento, las redes sociales se inundaron de homenajes a su legado dentro del mundo del hip-hop.

Mientras tanto, desde la muerte del innovador de De La Soul, Trugoy the Dove, a los 53 años en febrero de 2023, hasta Gangsta Boo, quien murió por una sobredosis a los 43, las recientes muertes de artistas destacados resaltan una tendencia preocupante en el género que ha sido evidente a lo largo de los años.

El rapero —que fue parte del trío de Atlanta Migos— fue asesinado a tiros el pasado noviembre a los 28 años.

Este diciembre, el rapero OG Maco murió días después de un intento de suicidio. Saafir, una de las voces más reconocidas entre el movimiento urbano de la West Coast falleció a los 54 años en noviembre, después de años luchando con graves problemas de salud.

El rap, una profesión peligrosa

Jim Jones, uno de los artistas más reconocidos en el hip-hop, calificó al rap como "la profesión más peligrosa".

Por su parte, el artista latino, Fat Joe afirmó que los raperos son una "especie en peligro de extinción," mientras que Lupe Fiasco resumió la situación en su canción de 2022 "On Faux Nem," al decir: "Los raperos mueren demasiado."

Los artistas de hip-hop tienden a morir por una variedad de causas impactantes: violencia con armas, problemas de salud, sobredosis y daño autoinfligido.

Esta tendencia, según A.D. Carson, Profesor Asociado de Hip-Hop en la Universidad de Virginia, plantea interrogantes sobre los desafíos sistémicos que afectan la salud y el bienestar general de los artistas del género.

Varios artistas como Nipsey Hussle y The Notorious B.I.G. han sido sinónimos de violencia en el hip-hop.

No es ninguna sorpresa que la industria, así como la música, sufran injustamente debido a la imagen que los medios proyectan sobre las muertes violentas de las estrellas.

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Problemas de artistas urbanos

Ser rapero no es fácil, y el mixtape "V: ILLICIT" de A.D. Carson aborda muchas de las cosas feas que están ocurriendo, contextualizando las verdades incómodas bajo un velo de moralidad que fácilmente podemos confundir con humanidad.

Además de la violencia, los problemas de salud tienen un impacto relativamente mayor en muchos artistas. Entre las principales causas de muerte de los raperos se encuentran las enfermedades cardíacas, la diabetes y las condiciones relacionadas con las drogas.

Todos conocen los casos de Big Pun y J-Dilla, quienes murieron jóvenes debido a problemas cardíacos, y podríamos seguir con Eazy-E, quien murió de SIDA.

Las estadísticas son alarmantes. Las enfermedades cardíacas y la diabetes son problemas de salud bien conocidos y recurrentes entre los hombres negros e hispanos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, dos demografías que conforman una buena parte de los artistas de hip-hop.

Con el hip-hop reflexionando sobre sus raíces y celebrando sus aniversarios, ha llegado el momento de incluir la equidad como parte del panorama para garantizar la salud de los artistas que crean esta música.

Ahora más que nunca, las letras de la canción "Be Healthy" del dúo de hip-hop Dead Prez cobran un nuevo significado: "Tenemos que empezar a cuidarnos mejor."

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