De qué murió Claudio Rissi

La noticia de la muerte de Claudio Rissi conmocionó a muchos fanáticos del cine nacional, que se preguntan de qué murió a los 67 años el conocido actor y director argentino.

Aunque tomó por sorpresa a buena parte de la sociedad, Rissi se encontraba internado en la clínica Los Arcos, del barrio porteño de Palermo, donde era tratado por un cáncer al cual se atribuye su deceso. De todas formas, todavía no hubo un comunicado oficial que confirme la causa de la muerte de quien interpretó al mafioso Marito Borges en El Marginal, así como a decenas de papeles en ficciones como Los Simuladores, Okupas, el Puntero y muchas otras.

Rissi también tuvo importantes participaciones en el teatro, donde hizo gran cantidad de obras, entre las que se cuentan Erdosain, Sobremonte y Los perros, así como roles de puesta en escena y dirección general en las obras Un laburo de negros y Variaciones. Su interpretación de Tatita en Terrenal (Pequeño misterio ácrata), la pieza de Mauricio Kartún en torno del mito de Caín y Abel fue uno de sus roles más recordados, que le valieron el reconocimiento de la crítica especializada y el público general.

Nacido el 22 de mayo de 1956 en el barrio de Boedo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, descubrió su vocación a los 10 años, donde sus primeros papeles fueron en actos escolares. Hijo de madre costurera y un padre que se la rebuscaba con distintos oficios, recibió el apoyo de la primera y de su hermana mayor para continuar con su vocación, pero se encontró con la resistencia de su progenitor, que se opuso incluso a ver por televisión el debut de su hijo en el popular programa Los hermanos Torterolo, emitido entre 1980 y 1981.

Comenzó sus estudios de teatro vocacional a los 18 años en el Club River Plate, pero dio el salto al pasar a la Escuela Nacional de Arte Dramático, donde se formó con maestros como David di Nápoli y Lorenzo Quinteros. El paso por esta importante institución estatal cambió para siempre su estilo y lo acercó a los personajes más duros que atravesaron su carrera: “Yo arranqué en la Escuela Nacional de Arte Dramático haciendo humor. Después, por determinadas razones que son cuestión de terapia, me quedó este rostro adusto. Siempre jodo con esto de que cuando los productores necesitan un personaje que sea un criminal, dicen: ‘Llámenlo a Rissi que ya el muerto se lo trae de la casa’. Sé hacer muchos de esos, y además me divierte”, contó a LA NACION en una entrevista realizada en febrero de 2022.

En aquella ocasión, también contó quiénes fueron algunas de sus inspiraciones en la actuación, y el goce que todavía le producía el oficio por el cual quedará para siempre en las pantallas y la memoria de millones de argentinos: “Cuando aún no trabajaba en televisión me iba a ver grabaciones, a ver cómo grababan estos grandes actores, como Miguel Angel Solá o Gerardo Romano. Esos tipos me incentivaban el deseo de hacer este laburo. Me gusta mucho actuar, me gusta mucho el escenario. Actuar para mí es sanador, muy vivificante. Y hasta hoy disfruto mucho del trabajo de mis compañeros”.