El padre de Meghan Markle pide ahora reunirse con el rey Carlos de Inglaterra

A estas alturas, al padre de Meghan Markle no le queda ninguna esperanza de ser recibido algún día en los círculos de la familia real británica porque su propia hija se ha convertido en persona non grata dentro de palacio. Aun así, el director de iluminación retirado insiste en que le "encantaría" hablar con el rey Carlos, ya que imagina que el monarca también se pregunta por qué tiene tan poco contacto con los duques de Sussex, que se mudaron en California después de renunciar a sus deberes reales hace cuatro años.

Hace unas semanas se rumoreó que Carlos estaba profundamente decepcionado por mantener una relación tan poco cercana con sus nietos, el príncipe Archie, de cinco años, y la princesa Lilibet, de dos años, y el otro abuelo de los pequeños considera que su situación es comparable porque ninguno de los dos "merece" ser tratado "tan mal" por la pareja.

Thomas -que no ha tenido contacto con Meghan desde antes de que se casara con el príncipe Harry en 2018- ha vuelto a la carga concediendo una nueva entrevista al MailOnline, a pesar de que su hija le suplicó que dejara de conceder exclusivas en una carta que le envió antes de su enlace, y que él entregó a la prensa.

"Me encantaría hablar con él porque estoy seguro de que tiene tantas preguntas sin respuesta como yo. Ninguno de los dos merece el trato que hemos recibido", afirma. "Él está en tratamiento contra el cáncer y yo no estoy en mi mejor momento. No tengo miedo a morir. Es lo que hay. Tengo tantas preguntas que me gustaría hacer a Meghan y Harry. La principal, por qué me han tratado tan mal no solo a mí, sino a la familia real y al rey".

Thomas se entristeció especialmente cuando vio las fotos de las celebraciones de Trooping The Colour del pasado fin de semana porque a Archie y Lilibet "se les está negando" la oportunidad de conocer a sus primos Jorge, Carlota y Luis, los hijos del hermano de Harry, el príncipe Guillermo.

"Me entristece que Lilibet y Archie no tengan la oportunidad de conocer a sus primos y participar en cosas como Trooping The Colour, que es su derecho de nacimiento. Están llegando a una edad en la que empiezan a hacer preguntas, como todos los niños. En algún momento es inevitable que pregunten a sus padres por qué los han aislado de ambos lados de la familia", añade. "Tienen dos abuelos que quieren verlos, uno de los cuales es el rey de Inglaterra. Nunca en mis 80 años pensé que estaría en el mismo barco que el rey".

El padre de Meghan se pregunta cómo se sentirán Archie y Lilibet dentro de unos años, cuando se den cuenta de todo lo que han perdido por las decisiones de sus padres. Thomas, por su parte, cumplirá 80 años el mes que viene y, aunque pasará el día con su hijo Thomas Jr. y hablará por teléfono con su hija mayor Samantha, no espera tener noticias de su distanciada hija ni de su familia.

"No espero tener noticias de Meghan y Harry. Ojalá hubiéramos podido resolver esta situación. Siempre estuve listo y dispuesto a hacerlo".