Parecer una persona muy feliz tendría desventajas

Texto: Maribel Barros

Un nuevo estudio sugiere que las personas que parecen muy felices serían percibidas como ingenuas e inocentes, lo cual podría resultar en una gran desventaja a nivel personal y laboral.

Los investigadores Alexandra Brasch, Emma E. Elvine y Maurice E. Schweitzer realizaron una serie de 6 experimentos con el propósito de encontrar la relación entre la magnitud de las emociones positivas de una persona, y cómo estas son percibidas por los demás.

El primer estudio que realizaron consistió en pedirle a un grupo de estudiantes universitarios que evaluaran unas encuestas en las que otras personas habían calificado su nivel de felicidad general y qué tan felices se sentían con la vida en una escala del 1 al 11. Sin embargo, estas encuestas eran “falsas”, es decir que los mismos investigadores las habían llenado, para así poder controlar mejor la reacción de los participantes ante diferentes niveles de felicidad: mucha, moderada, o neutral.

Lo que encontraron fue que las personas consideradas muy felices, fueron juzgadas como más ingenuas que las personas de felicidad moderada, quienes a su vez fueron considerados menos ingenuos que los neutrales.

De acuerdo con los investigadores, y gracias a otras pruebas que realizaron, esto podría deberse a que también se cree que las personas muy felices se protegen de las emociones negativas, procesándoles de forma superficial y evitando la información desagradable.

Si bien esta investigación no se enfocó en ver si estas percepciones eran reales o no, los responsables sí realizaron otros estudios para ver cómo estas se traducen en la vida real, y los resultados no son nada alentadores.

Por ejemplo, descubrieron que cuando se trata de elegir a una pareja para una negociación, la mayoría de los estudiantes se decantó por personas muy felices (aquellos que aparecían sonriendo o con caras simpáticas en una fotografía) que los moderados. ¿Por qué? Pues porque los primeros fueron percibidos como más ingenuos y fáciles de engañar.

Antes estos resultados, los investigadores sugieren que algunas personas deberían preocuparse por cómo son percibidas, ya que esto podría afectar su desempeño laboral. Un ejemplo que compartieron fue el de los vendedores, cuyos clientes podrían percibirlos como que no saben lo suficiente o no tienen lo que hace falta para lidiar con las quejas si se muestran extremadamente felices.

Además, agregan que estos resultados cuestionan las suposiciones existentes en comportamiento organizacional y psicología, al identificar una marcada desventaja de expresar felicidad, y piden que se realicen más estudios para explorar cómo una misma emoción, expresada a diferentes niveles, influye en los juicios y el comportamiento.

¿Cómo sueles tratar a las personas que percibes como muy felices?

@travesabarros

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