Paris Hilton alza la voz para hablar con franqueza

Paris Hilton en el desfile de modas de Versace en West Hollywood, California, el 9 de marzo de 2023. (Elizabeth Weinberg/The New York Times)
Paris Hilton en el desfile de modas de Versace en West Hollywood, California, el 9 de marzo de 2023. (Elizabeth Weinberg/The New York Times)

Paris Hilton era un elemento habitual de los tabloides y la televisión a principios de la década de los 2000, cuando era conocida tanto por su vida nocturna hiperactiva como por sus cinco temporadas en el exitoso programa de telerrealidad “The Simple Life”. Desde entonces, Hilton, de 42 años, ha aprovechado su fama en una carrera multifacética que ha incluido trabajar como modelo, músico, DJ, actriz, empresaria y una proveedora inusualmente entusiasta de tókenes no fungibles. Y en enero, dio la bienvenida a un bebé llamado Phoenix, a quien está criando con su esposo, el capitalista de riesgo Carter Reum.

El martes, como parte de un evento de The New York Times en Twitter, hablamos con la fiestera convertida en magnate sobre su nuevo libro, “Paris: The Memoir”, que se sumerge en el glamur de su personalidad pública, así como en el abuso que experimentó en varias instalaciones para “adolescentes con problemas” durante casi dos años.

Esta entrevista se editó y resumió.

P: ¿Cómo te preparaste para una gira de medios en la que te preguntarán acerca de cosas traumáticas?

R: La mayor parte de mi carrera estuve interpretando a un personaje, y la gente no tenía idea de lo que realmente había pasado. Y ahora que escribí este libro, la gente se está dando cuenta de que he vivido algunas experiencias muy traumáticas, y fue muy difícil escribir acerca de ellas. Pero también para mí ha sido un momento increíble que me permitió descubrirme a mí misma de varias maneras que ni siquiera sabía.

P: Te has convertido en una gran defensora de la investigación y regulación de la industria de los “adolescentes con problemas”.

R: He estado yendo a Washington D. C. para reunirme con senadores y legisladores, y explicarles lo que sucede a puerta cerrada. Estoy orgullosa de usar mi voz y mi plataforma para destacar un tema tan importante. Sé que estoy muy orgullosa de la mujer en la que me he convertido. Y solo sé que la niña que hay en mí estaría muy orgullosa de lo que soy hoy.

P: Hablando de eso, has sido muy franca respecto a cómo despliegas tu voz literal — como, hablas con voz de bebé cuando quieres cosas.

R: Realmente veo el personaje que inventé como una respuesta traumática a lo que viví, en la que solo quería inventar este tipo de personaje de muñeca Barbie de vida perfecta para no tener que pensar en el trauma que experimenté. Y luego, cuando conseguí la oportunidad de hacer “The Simple Life”, tuve que seguir interpretando a ese personaje temporada tras temporada. Y luego ir a las entrevistas y hacerlo. Y siento que era casi, o es y era, una máscara con la que sentía que podía ser otra persona. Y, sabes, siento que mucha gente no me ha comprendido durante mucho tiempo y me ha subestimado. Y ahora estoy orgullosa de mostrar quién soy realmente.

P: En tu libro, hablas de pretender ser tu propio asistente haciendo una voz ronca y áspera. ¿Hay alguna manera de que podamos escuchar cómo suena eso?

R: Sí. [en lo que podría describirse como un acento de Nueva York] Hablaría de esta manera, y “Soy de Brooklyn” y “Paris va a estar disponible. Solo tengo que revisar su horario”. Funcionó.

P: Dices en tu libro que tienes cinco teléfonos. Uno es para llamadas de broma. ¿Puedes decirme por qué necesitas un teléfono solo para llamadas de broma?

R: Porque es algo que nos encanta hacer. Mi madre, mi hermana y yo hemos estado haciendo bromas telefónicas a la gente durante tantos años. Cuando las personas presionan asterisco 67 y es un número bloqueado, muchas personas no quieren responder. Así que es mejor tener otro teléfono para eso. Mi mamá, ella es la que es realmente buena en eso. Ella es la verdadera bromista.

P: Una cita de tu libro que realmente me llamó la atención: “Me costaba entender mi sexualidad; no hay manera de que pudiera habérselo explicado a nadie más. No tenía lenguaje para ello. Nunca había escuchado la palabra asexual”. ¿Por qué incluíste ese pasaje?

R: Creo que solo porque había pasado por experiencias tan traumáticas me asustó la idea de relacionarme con alguien estando así. Y sí, creo que justo por lo que viví, me resultó muy difícil sentirme cómoda con eso. Entonces yo solo… yo solo… no sé, solo pensaba en mí de esa manera porque no era algo que disfrutara.

P: ¿Sientes que esa identidad aún se aplica a ti?

R: Durante tanto tiempo tuve paredes muy grandes alrededor de mi corazón. Y no fue hasta que conocí a Carter que esos muros se derrumbaron. Siento que tal vez Dios me hizo pasar por esto para que algún día pudiera usarlo y ayudar a otros. Y lo estoy haciendo ahora, y siento que ahora tengo una verdadera misión en la vida, convertir mi dolor en un propósito.

c.2023 The New York Times Company