Raquel Bollo, tras la subida a planta de la hija de Anabel: 'Espero que todo quede en un mal sueño'
Raquel Bollo está volcándose con Anabel Pantoja desde que la pequeña Alma tuviera que ser ingresada en la Unidad de Medicina Intensiva (UMI) del Hospital Universitario Materno Infantil de Gran Canaria el pasado 9 de enero. De hecho, ella fue una de las primeras en aterrizar en la isla cuando tuvo conocimiento de la difícil situación. Ahora que la bebé acaba de salir de la UMI–subió planta el jueves 23, mismo día en el que cumplía dos meses de vida–, Raquel se muestra optimista ante ¡HOLA! “Cualquier pasito son noticias buenas y dan esperanza”, nos confiesa la colaboradora de televisión y diseñadora de moda flamenca.
-Has estado apoyando a Anabel y muy pendiente sobre la evolución la pequeña Alma. Celebrarás que la bebé haya sido subida a planta
No me corresponde hablarlo a mí, pero, lógicamente, es una buena noticia
-Durante once días, Anabel estuvo sin salir del hospital para estar junto a su hija. ¿Cómo la encuentras ahora a ella?
Prefiero no comentar nada, pero, ¿cómo puede estar una madre en esta situación? Le ha tocado vivir una situación en la que ninguna madre nos quisiéramos ver. Cualquier pasito que se vaya dando son noticias buenas y dan esperanza. Esperemos que todo se quede en un susto
-Seguirás pendiente de la evolución de la niña, aunque ya no estés en Canarias
Anabel ha tenido todo el cariño de toda su gente, de todos sus amigos, de toda su familia. Lo único que nos toca es eso, apoyar no solo a ella, sino también a su pareja, a su madre y a los padres de David
-¿Has hablado con Anabel en las últimas horas?
De verdad, no quiero hablar más nada. Yo no tengo que decir nada...
-Al menos, preguntarte cómo lo has vivido tú. Entiendo que estas últimas novedades dan esperanzas de que todo pueda acabar bien, que esto es lo fundamental
Exactamente. Al final, la que importa es Alma. Lo demás está de más
-Se ha dicho que su evolución ha sido como una especie de milagro. Ahora esperarás que todo siga así y la recuperación sea total
Por supuesto. Quiero que acabe bien no, sino maravillosamente. Espero que todo quede en un mal sueño
-Además, fuiste de las primeras en viajar a Canarias cuando sucedió todo
También estuvieron otros amigos de ella. Había mucha gente allí. Realmente la importancia dela noticia la tiene la situación de una bebé y lo que le suceda a ella. Ha sido un mal trago para su familia, pero, principalmente, para su madre y su padre. Lo demás está de más. ¿Quién va y quién no va? Pues va quien tiene que ir, quien tiene que estar, quien quiere Anabel y quien sabe que le tiene cariño. La gente qué sabe...
-Con lo se ha hablado de Isabel Pantoja, que si había visto a sus hijos o no...
Es que no es momento. Todo el mundo se tiene que olvidar si va Isabel, Kiko o quien sea. La importancia la tiene, primero que nada, la bebé; y, después, sus padres, que son los que más están sufriendo. Punto pelota. ¿Que han estado? Por supuesto, ¿Que han apoyado? Por supuesto. Es lo que tienen que hacer. Las rencillas de cada uno son de cada uno. Las personas civilizadas pueden estar en un hospital, aunque algunas no hablen con alguien. Tú estás allí por la situación, por la bebé y por sus padres
-Lo importante es que las últimas noticias sobre la hija de Anabel son buenas. Esperemos que la evolución siga así, y que, como dices, todo quede en un mal sueño
Exactamente. Eso sí, por mucho que tú lo sufras o digas “Dios mío, ¿por qué?”, el dolor o el sufrimiento que han vivido esa madre y ese padre no lo podemos imaginar. Ellos son los que realmente lo han sufrido. Y seguirán, dentro de lo positiva de la situación, porque, hasta que no esté en casa la bebé...
-No sé si tienes previsto regresar a Canarias en los próximos días
Ahora mismo no, porque estoy en plena preparación de la nueva colección mía de flamenca, que el desfile será el 31 de enero. Por eso, no me he podido quedar allí. Además, sin saber ni imaginar lo que iba a pasar, llame a la colección “Mi vida”
-Con más motivo, será una buena ocasión para celebrar la vida
Exactamente. Siempre había que celebrarla. Siempre. Los malos momentos vienen sin pensarlo, sin esperarlo y cuando menos te lo esperas