Las cinco actividades en casa para relajarse en la pandemia
Relajarse en medio de una situación inusual como la pandemia parece una tarea compleja para muchas personas, sin embargo se puede lograr con disposición e incluso disciplina, ya que, sobre todo en estos tiempos, es necesario bajar la tensión y el estrés.
Aunque en muchos lugares del mundo las normas de las cuarentenas se han flexibilizado, millones de personas prefieren cumplir con el confinamiento y limitar sus salidas.
Estas cinco actividades las puedes hacer en casa para bajar un poco el tedio y la tensión por el encierro. A propósito de celebrar el Día Mundial de la Relajación, que no debe quedarse solo en el 15 de agosto, sino que puede marcarse como la fecha de inicio para cuidar de tu bienestar.
Meditar
Tomar al menos cinco o diez minutos al día para concentrarse en la respiración y calmar los pensamientos puede ayudar a disminuir la tensión y el estrés.
Algo tan simple como sentarse con la espalda erguida, cerrar los ojos y observar las inhalaciones y exhalaciones ayuda a recuperar la tranquilidad mental.
Para algunas personas puede ser intimidante porque tienen la idea de que es poner la mente en blanco, pero esto no es el fin (al menos en estos estados tan iniciales), sino observar los pensamientos y dejarlos pasar.
Algunos de los beneficios es que puede reducir la presión arterial y podría ayudar a bajar los niveles de ansiedad y fortalecer el sistema inmune.
Hacer garabatos o “doodling”
A simple vista parecen garabatos, porque qué ciencia tiene tomar un papel y trazar líneas sin una forma definida.
Los dibujos de garabatos (como es su traducción) se han puesto de moda y para algunas personas los ayuda a distraerse al punto que toda su concentración se focaliza en esas líneas.
Los dibujos se pueden hacer tanto a colores como en blanco y negro, incluso se pueden comprar plantillas, libros o revistas que ya traen los diseños para que los hagas o completes.
El dibujo espontáneo podría ayudar a liberar el estrés y facilitar la atención y la concentración, escribió el doctor Srini Pillay en un artículo del Harvard Health Publishing.
Yoga
La práctica del yoga junto con los ejercicios de respiración (pranayama) ayudan a mantener un cuerpo saludable, fuerte y flexible, al mismo tiempo esta conexión física con la mente, permite estar más consciente de las emociones y sentimientos que se experimentan.
Con la práctica del yoga se puede lograr estar más pendiente de los pensamientos. Si estos son pesimistas, trágicos o tienden a crear angustia, con el yoga se puede desarrollar la capacidad de observarlos y detenerlos antes de que se hagan más grandes y creen más tensión mental.
Es recomendable una práctica de por lo menos diez o quince minutos diarios. Se pueden hacer secuencias simples como los Saludos al Sol y algunas posturas de estiramiento que ayuden a relajar los músculos y también la mente de las preocupaciones.
Entre algunos de los beneficios de la práctica del yoga ayuda a bajar la presión alta, ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, podría ayudar a conciliar mejor el sueño y reducir los niveles de ansiedad.
Cuidar de las plantas
Aunque la imagen que se viene a la cabeza es de una abuela regando las plantas, la tendencia en social media contradice esta idea. Cada vez más personas jóvenes y millennials se enamoran de cultivar, sembrar y consentir a sus plantas como si se tratara de una mascota.
Por ejemplo en Instagram la etiqueta #plants tiene 34.5 millones de publicaciones en donde se pueden conseguir no solo fotos inspiradoras de cómo decorar y ambientar un hogar con ellas, sino también de consejos de cómo mantenerlas, tips ideales para aquellos que tienen tan poca suerte con la supervivencia de estos seres.
Dedicar atención a las plantas también ayuda a concentrar la mente en el confinamiento en algo más que el coronavirus.
La ambientalista y psicóloga del diseño, Sally Augustin dijo al Chicago Tribune que “tener plantas en la casa puede reducir el nivel de estrés y ayudar a refrescar la mente cuado te sientes exhausto”.
Escribir
No tiene que ser un libro, un poema, una tesis, pero el simple hecho de escribir lo que sientes o tus preocupaciones ayuda a manejar y superar la angustia de este momento tan particular en la historia.
Deja que las palabras fluyan y sea un ejercicio catártico, que no necesariamente tienes que compartir con alguien más, solo si es algo voluntario.
“Escribir ayuda a las personas a organizar sus pensamientos y dar significado a una experiencia traumática”, según un estudio publicado en el Harvard Health Publishing.
Noticias relacionadas