Ricky Martin a 25 años de la explosión de la música latina: "Todo valió la pena"

En exclusiva, Ricky Martin recuerda la época de "La copa de la vida" y "Livin' la vida loca", y habla de su vida hoy y cómo ha evolucionado en un cuarto de siglo.

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

Ricky Martin aún se emociona al recordar la noche del 24 de febrero de 1999 cuando cantó "La copa de la vida" en el escenario de los premios GRAMMY, transmitidos desde el Auditorio Shrine de Los Ángeles. El mundo tampoco ha olvidado esa vibrante presentación, aunque ya hayan pasado 25 años.

"Sabía que era una oportunidad única", dice en exclusiva a People Español el astro puertorriqueño de 52 años de ese gran momento en su carrera. "Por un lado me sentí nervioso; no lo voy a negar. Pero al mismo tiempo sabía que había llegado el momento que ya existía en mi mente desde que era muy joven. Además de eso, sentí una gran responsabilidad de representar a nuestra cultura en un escenario tan importante como ese, y para eso estaba listo".

En esa presentación de poco más de 4 minutos, un Ricky de entonces 27 años hizo suyo el escenario —uno donde esa noche cantarían otras luminarias como Madonna, Celine Dion, y Luciano Pavarotti— y empezó su actuación en inglés. "The Cup of Life, this is the one / Now is the time, don't ever stop", cantó ataviado con pantalones negros de cuero y un collar de cuentas bajo su ajustado suéter gris. Segundos después, fluidamente, cambió al español: "Como Cain y Abel/ Es un partido cruel / Tienes que pelear por una estrella".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

Por los próximos tres minutos, Ricky peleó por la suya intercalando su lengua materna con el inglés y francés, dándole rienda suelta a sus caderas al compás de los ritmos de samba, salsa y mambo de la pegajosa canción, y haciendo espacio en el escenario para los músicos que descendieron de los pasillos del auditorio —muy al estilo carnaval— tocando instrumentos de percusión. Cuando Ricky ascendió unas escaleras metálicas en medio del escenario y bailó su último paso y cantó su última nota, el teatro irrumpió en una ovación televisada por casi medio minuto.

"Recuerdo tener muchos sentimientos antes y después de la presentación", dice sobre ese espectáculo, que fue seguido por una visita de Madonna para felicitarlo mientras él hablaba con la prensa tras bambalinas. "Lo que me tomó por sorpresa fue la reacción tan maravillosa de los que estaban allí. Ver a artistas como Sting o Madonna, a quienes admiro tanto, levantarse de sus sillas", dice. "¡Dios mío! Primero estaba en shock y luego vino el alivio, porque supe que todo el esfuerzo que hicimos valió la pena".

<p>Frank Micelotta/ImageDirect</p>

Frank Micelotta/ImageDirect

<p>Kevin Mazur Archive/WireImage</p>

Kevin Mazur Archive/WireImage

¿Presintió que esa noche cambiaría su vida? "Honestamente solo estaba pensando en darlo todo en ese escenario. Lo que vino después, aunque siempre lo soñé y trabajé para lograrlo, superó mis expectativas y se dio inmediatamente después", cuenta el también actor. "No solo se abrieron muchas puertas, también recibí mi primer GRAMMY. Definitivamente fue una de las noches más mágicas e inolvidables que he tenido en mi vida porque todo cambió de la noche a la mañana".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

¡Y no solo para él! Si bien ese momento fue un parteaguas en una exitosa carrera que comenzó a los 12 años tras unirse a la sensación mundial Menudo en 1984, Ricky se convirtió en la imagen emblemática de la llamada explosión de la música latina de los años 2000 —y ayudó a abrir las puertas del crossover a colegas como Shakira, Marc Anthony, Enrique Iglesias y Jennifer López.

"En ese momento yo no sabía que estaba haciendo lo que describes; yo estaba trabajando como un loco para asegurarme que esa puerta no se volviera a cerrar", dice el intérprete de "La mordidita" y "Vente pa' ca". "El mundo tenía que conocer la riqueza de nuestra música y estoy tan feliz de que pude ser parte de ese movimiento".

Tras ser ovacionado por la crema y la nata de la música, su mensaje se escuchó a todo volumen. Para esa fecha, la Academia Latina de Artes y Ciencias de la Grabación y los anunciantes de la premiación de los GRAMMY televisados habían entendido la importancia de celebrar la música latina, y un año después se llevaría a cabo la primera edición del Latin GRAMMY. "No se siente que hayan pasado 25 años. Te lo cuento como si esto hubiese pasado ayer. Me siento igual que hace 25 años, con los mismos nervios cuando me subo a un escenario, con las mismas ganas de dar siempre lo mejor, con la misma energía que comparto con el público que ha estado conmigo por estos cuarenta años de carrera y esto apenas comienza", admite. "Me siento orgulloso de que todo lo que tengo en esta vida, me lo he trabajado todos los días".

Los siguientes meses fueron fructíferos para el cantante. Ahí está su entrada por la puerta grande en programas como Saturday Night Live y The Tonight Show with Jay Leno cuando su próximo hit, "Livin' la vida loca", puso a bailar al mundo ese verano. "Fue maravilloso, una vez más, porque sabía que ese momento era más grande que yo. No era solo yo. Era toda una cultura que venía conmigo, tal como lo hicieron Gloria Estefan, Julio Iglesias, Celia Cruz, Carlos Santana y José Feliciano", reconoce sobre leyendas latinas que le abrieron las puertas a él, tal y como él y sus contemporáneos lo han hecho para Bad Bunny, Karol G y Maluma, entre otros. "El propósito era llevar nuestra música a todos los rincones del mundo".

<p>Unknown/NBCU Photo Bank/NBCUniversal via Getty Images via Getty Images</p>

Unknown/NBCU Photo Bank/NBCUniversal via Getty Images via Getty Images

Algo que Gloria Estefan sabe por experiencia propia. "La reacción que tuvo [la presentación de] Ricky ayudó mucho a que el mundo anglo viera el poder de nuestra música y del incomparable Ricky Martin", apunta la cantante cubana. "Emilio y yo siempre hemos creído en lo que la música latina puede lograr, y hemos trabajado toda la vida para ayudar y promover otros artistas latinos”.

Agrega su esposo, el productor y músico Emilio Estefan, quien luchó por más de una década para que se crearon los GRAMMY Latinos y para que Ricky estuviera en ese escenario en febrero de 1999: “Yo estaba diciéndole a todo el mundo, ‘Va a salir un muchacho que es increíble’. Vaya, yo estaba promoviendo a Ricky como si fuera hijo mío. [Les decía,] ‘Por favor, fíjense lo bueno que es’. Cuando vi que, vaya, todo el mundo se paró, a mí me emocionó tanto. Dije, '¿Sabes qué? En la vida uno tiene que hacer a veces cosas que tu corazón [te dicta]'".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

El segundo álbum de Ricky en inglés, Sound Loaded, publicado a finales del 2000, lo colmó de más aplausos y éxitos en la radio. "Honestamente no tenía tiempo para pensar o sentir. Solo pensaba: '¡Vamos, vamos que hay un público que tengo que entretener'! Trabajaba sin parar porque sabía que esas oportunidades no se daban tan fácil, mucho menos en esos años", reconoce el astro boricua. "Recuerdo que viajaba a diario porque quise ir a todos los lugares donde querían conocer mi música. Hacía hasta 40 entrevistas al día con países de todo el mundo, hablando inglés y español entre entrevistas y me cambiaba de ropa en segundos para que cada territorio tuviese un look diferente. Después salía a cantar ante miles de personas. Mi equipo y yo nos dedicamos a este reto hermoso casi 20 horas diarias por los próximos años".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

El cantante no se arrepiente de los sacrificios en su camino a la cima. "Fue una montaña rusa donde viví tantas cosas increíbles que creo que aún no termino de asimilarlo", admite. "Después de todo eso, paré y aprendí que podía seguir trabajando, pero no de la misma manera. Tenía que encontrar un balance, como todo en la vida, porque no hay un ser humano que pueda aguantar ese ritmo de vida".

A lo largo de los años, Ricky ha sabido también adaptarse a nuevos sonidos y nuevas maneras de expresar su arte. "A nivel artístico siento que desde pequeño he podido incursionar en diferentes áreas del entretenimiento y lo sigo haciendo hasta el día de hoy", afirma. "Soy muy inquieto y siempre estoy en búsqueda de proyectos que representen un reto para mí, tanto en la música como en la actuación. No tengo miedo a hacer cosas por primera vez, pero sí le tengo un gran respeto —y por eso me preparo muy bien para cada proyecto".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

Su poderoso hechizo va más allá de la música. El intérprete de "Vuelve", "María", "She Bangs", "La bomba" y "She's All I Ever Had" también ha conquistado la pantalla chica. En 1986 debutó como actor en la serie Por siempre amigos, grabada en Argentina, junto a compañeros de Menudo como Robbie Draco Rosa. "Ahí fue donde en realidad sentí el poder de la actuación y cómo me ayudaba a conectarme con mis emociones. En ese momento dije que mi vida se iba enfocar en la actuación, pero la música se encargó de seducirme de una manera muy poderosa y por supuesto la historia habla de la importancia que tenía el que yo siguiera en la música", reflexiona Martin. "Pero lo que está pa' ti nadie te lo quita".

Años después, tras ser aceptado en la prestigiosa Escuela de Artes Tisch de la Universidad de Nueva York para estudiar actuación, viajó a México a ver la obra teatral de un amigo, que le ofreció un rol en la puesta en escena. Ese viaje cambió su destino. Nunca regresó a la Gran Manzana, quedándose en la capital mexicana actuando junto a Angélica Vale en Mamá ama el rock. Su brillo en las tablas lo llevó a debutar en 1992 en su primera telenovela, Alcanzar una estrella II, de Televisa, junto a Sasha Sokol, Angélica Rivera, Erik Rubín, Biby Gaytán y Pedro Fernández. Dos años después vendría su crossover a la actuación en inglés en la telenovela estadounidense General Hospital (ABC), donde interpretó al seductor Miguel Morez.

<p>Andrew H. Walker/WireImage for Tony Awards Productions</p>

Andrew H. Walker/WireImage for Tony Awards Productions

Su resumé de actor aumentaría con su participación estelar en la obra Evita de Broadway en el 2012, y en el 2018 con el laureado rol de Antonio D'Amico en la serie The Assassination of Gianni Versace: American Crime Story (FX), donde interpretó a la pareja del desaparecido diseñador italiano. Este año estrenó en Apple TV+ la serie Palm Royale, donde interpreta a Robert Díaz, un bartender en un lujoso country club de Palm Beach, FL lleno de secretos e intrigas.

"Ahora estamos en un momento interesantísimo donde regreso a la actuación y afortunadamente he sido reconocido, no solamente por mis compañeros de trabajo, pero también por la industria, recibiendo una nominación al Emmy por el trabajo que hice en la serie de Gianni Versace y ahora como parte de la producción de Palm Royale, donde estoy rodeado de personas que han sido reconocidas con el Oscar como Laura Dern y Allison Janney", dice este. "El compartir escenas con Kristin Wiig y la legendaria Carol Burnett me hace sentir que de una manera u otra la vida me está diciendo, 'Este camino te hace bien', y tengo que seguirlo".

<p>Apple TV+</p>

Apple TV+

Seguir su corazón y su intuición lo ha llevado lejos. "Cuando veo atrás siento mucho orgullo y satisfacción. He superado y aprendido de los momentos difíciles, he disfrutado de los buenos y hoy en día me siento sumamente pleno, porque estoy en paz, viviendo mi vida tal y como yo quiero vivirla, siendo yo mismo. Me tomó tiempo llegar aquí, pero lo hice", reflexiona el artista, quien grabará la segunda temporada de Palm Royale en septiembre y tiene conciertos hasta diciembre. "Luego me tomaré un descanso corto junto a mis hijos, [para] disfrutar de la Navidad y celebrar el cumpleaños de Lucía y el mío", dice sobre su hija, quien nació, al igual que él, un 24 de diciembre. "Todo muy tranquilo, pero juntos", añade sobre el festejo de otra vuelta al sol.

Sus más preciados premios, queda más que claro, no están en una vitrina. El padre de los mellizos Valentino y Matteo, de 16 años; Lucía, de 5; y Renn, de 4; sabe muy bien lo que más atesora: "Mis hijos, mi prioridad y mi mayor felicidad".

<p>Instagram/Ricky Martin</p>

Instagram/Ricky Martin

El trotamundos y codiciado papá soltero —quien en el 2023 anunció su divorcio del escultor Jwan Josef— ama "tenerlos conmigo de arriba a abajo", dice sobre sus retoños, sus mejores compañeros de viaje. "La cosa es que ahora los gemelos tienen 16 y los bebés ya tienen 4 y 5 años, las prioridades de cada uno es completamente diferente. Pero igual cualquier cosa que hacemos, sea viajar, ir al parque, o estar en casa viendo películas, la pasamos muy bien. No puedo vivir sin mis hijos", confiesa. "De hecho cuando trabajo, que es la gran mayoría del año, ellos vienen conmigo. No puedo estar separado de ellos por mucho tiempo, esa es la regla número uno desde que nacieron".

¿Cómo logra ese mágico balance? "Para mí es fundamental tener mucha disciplina para poder cumplir con todo, estar mentalmente preparado y cuidarme mucho porque antes de cualquier cosa tengo que estar bien yo", afirma. "A veces me hago un viaje corto yo solo para volver a mi centro. También trabajo con un equipo que sabe perfectamente cuales son mis necesidades y puede programar mi agenda de trabajo y que no afecte en nada mi vida personal".

Una crisis de salud el año pasado también lo ayudó a poner todo en perspectiva. "En el mes de diciembre pasé un susto bastante significativo a nivel salud, donde contraje el COVID y me fue muy mal. Sentía que me iba a morir", revela. "Ese momento fue catalítico, donde una vez más, me aferro a mi espiritualidad y vuelvo a vivir el día a día rodeado de mi familia y de mis amigos y abierto a nuevas experiencias sin miedo. Estamos aquí hoy, no sabemos mañana", reflexiona el artista, que aprecia más que nunca la vida. "Estoy ahora viviendo con mucha intensidad el amor, la paternidad, lo profesional, lo artístico, enfocándome más en mis necesidades y no en la de los demás", afirma. "No es ser egoísta, es simplemente que estoy fortaleciendo mi autoestima".

<p>Fernando Sippel @fernandosippel</p>

Fernando Sippel @fernandosippel

Si no te quieres perder nada, suscríbete gratis aquí al boletín de People en Español para estar al día sobre todo lo que hacen tus celebridades favoritas, las noticias más impactantes y lo último en moda+belleza.

Hoy ve los frutos de tanto esfuerzo cada vez que pisa un escenario en estadios llenos y agradece el amor de sus fanáticos. ¿Cómo ha podido mantenerse vigente a lo largo de cuatro décadas? "Además de la gran pasión que siento por lo que hago y las ganas de devolver todo lo que el público me ha regalado, le doy crédito a la ética profesional que me inculcaron desde los 12 años. Sin eso, creo que nada de lo que he vivido hubiese pasado".

El futuro luce brillante, tanto en lo personal como en lo profesional. "Me quedan muchas cosas por cumplir, entre ellas, hacer cine", asegura. "Siempre me ha apasionado no tan solo actuar, también producir. Me encantaría ser parte de algo que tenga un impacto social o hacer un papel que me permita explorar otras áreas de la creatividad. Estoy en eso".

CRÉDITOS DE FOTOS

Foto por Fernando Sippel @fernandosippel; Productora: Patricia Rivadeneira @DuckBoxProductions; Productora en el set: Annee Elliot @annee_elliot; Asistente de producción: Max Castro/All In Productions; Maquillista: Hanic Arias @HanicBeauty; Peinado: Shaul Arbiv @shaularbiv; Estilista: Douglas VanLaningham @dvlstylist; Foto con sobretodo oscuro: Todo el look de Emporio Armani; Foto vestido de negro: Polo: Ernest W Baker; Pantalón: Setchu; Zapatos: Emporio Armani; Foto con camiseta Henley: Henley: Zadig & Voltaire; Pantalón: Hed Mayner; Cinturón: Emporio Armani; Botas: Bottega Veneta; Brazalete: Jonas Studi; PR: @RondenePR