Saw X: El Juego del Miedo | Top de críticas, reseñas y calificaciones

Nada de esto funcionaría tan bien sin Bell, cuya voz ronca y seriedad amenazadora son tan fascinantes que hace que la repetida declaración de Jigsaw "Me gustaría jugar un juego" sea terriblemente aterradora. Ha hecho que el personaje sea verdaderamente icónico, al igual que lo hizo Robert Englund con Freddy Krueger.

Casi 20 años después del inicio de la franquicia, Saw X muestra una profundidad emocional que logra llevar una de estas historias a un nivel nunca antes visto. Sin embargo, no se equivoque, las trampas todavía están a la vista y Jigsaw todavía tiene la plena intención de mostrar los verdaderos males de la humanidad. Y para darles la oportunidad de salvarse (si son lo suficientemente buenos), por supuesto.

Es una película para fanáticos acérrimos que recompensa a quienes siguen pidiendo más (...) incluso ambientada hace casi dos décadas, “Saw X” encuentra formas inteligentes de seguir siendo relevante. Las discusiones sobre las grandes farmacéuticas y la cada vez más mala reputación de los proveedores de atención médica mantienen la historia contemporánea. Desafortunadamente, el director Kevin Gruetert repetidamente se enreda en los momentos más filosóficos de Kramer.

Esto es para los fanáticos del terror, para aquellos que han estado al lado de esta franquicia en las buenas y en las malas. (...) Esta es la gloria que la franquicia ha estado buscando durante los últimos años y si hay alguna película para ver en los cines esta temporada de Halloween, será esta. Tobin Bell se consolida aún más como un ícono del terror moderno y recuerda al público por qué Saw ha persistido durante tanto tiempo. Una cosa nunca ha estado más clara que ahora: Billy the Puppet llegó para quedarse.

La desventaja de que “Saw X” parezca más una película real que muchas de las películas de la serie es que se habla más y se tortura menos; personalmente apruebo esa proporción, aunque no estoy seguro de que dé sus frutos en taquilla. Las escenas de tortura en las películas de “Saw” son espléndidos obsequios de terror barroco presentados al público. Ellos son, simplemente, la razón por la que vinimos. Tobin Bell, con su mirada de sabiduría despiadada, también es un atractivo, pero “Saw X” plantea la cuestión de hasta qué punto el lamento de John Kramer es demasiado.

Las mejores películas de Saw tratan activamente sobre algo más que encontrar formas inteligentes de convertir el cuerpo humano en pulpa. (...) John Kramer cree en su misión y Saw X pone esa creencia a prueba. Para aquellos nuevos en la serie, esto se sentirá como una película siendo una película, con, ya sabes, algo parecido a un arco de personaje como protagonista. Pero esto es un placer para los fieles, y algo que se tomo largo tiempo en llegar.

Jigsaw siempre ha sido un raro villano de terror, obsesionado con su propio rígido sentido de la moralidad y disgustado por la decadencia que lo rodea, pero alternando entre muertes por sierra cerebral y quemaduras por radiación, y Bell reflexionando sobre el significado de la vida y su muerte inminente, le da a la película un ritmo extraño e incómodo, coronado por un final adecuadamente abrupto. Puede que sea algo mejor que los puntos más bajos de la franquicia, pero realmente no hay nada aquí que justifique por qué estamos siendo arrastrados de regreso a los horrores de la década de 2000. Ya hemos visto suficiente.

Para aquellos que están listos para ver más a John Kramer y Amanda en toda su gloria sádica destrozando a quienes han decidido que son los malos, Greutert cumple. Pero esta también es una buena película para aquellos que no están familiarizados con la serie y no tienen un conocimiento profundo de su extensa historia (es profunda, créanme). Colocarlo al principio de la serie con personajes casi completamente nuevos ayuda a que esta cinta se sienta fresca y familiar, sin perder nunca de vista lo que más amamos de Saw: máquinas diseñadas exclusivamente para destrozar carne.

... Saw X se siente como la secuela de Saw y Saw II que deberían haber hecho en primer lugar. Durante gran parte de su tiempo de ejecución, mantiene la atención como una inmersión más profunda en la personalidad de John/Jigsaw al mismo tiempo que trae mucho horror repugnante y desagradable. (...) lo bueno de Saw X es lo suficientemente bueno que los fans sean más indulgentes con estos errores de lo que Jigsaw es con sus desventuradas víctimas.

Saw X, una bienvenida reconexión con una franquicia muy querida, logra mantener la coherencia de la serie. (...) Con un enfoque tan fuerte en John Kramer, Saw X es una película para los fanáticos de Saw desde hace mucho tiempo. Quedan muchas trampas diabólicas para excitar al fanático casual del gore, pero Saw X es realmente una carta de amor a John Kramer. En Saw X Tobin Bell ofrece la mejor actuación de su carrera y en la franquicia y ha creado un canto de cisne apropiado para un ícono del terror.