La Stranezza: el viaje al universo de Luigi Pirandello que se convirtió en un sorprendente hito del cine italiano

La Stranezza: el viaje al universo de Luigi Pirandello que se convirtió en un sorprendente hito del cine italiano
La Stranezza: el viaje al universo de Luigi Pirandello que se convirtió en un sorprendente hito del cine italiano

Hace poco más de un año, RAI Cinema daba a conocer la primera imagen de la nueva película de Roberto Andó, en la pausa de un rodaje que llevaba ya cuatro de las ocho semanas programadas. Allí Toni Servillo, Salvatore Ficarra y Valentino Picone mostraban desde Sicilia por primera vez los perfiles de Luigi Pirandello, Onofrio Principato y Sebastiano Vella, de acuerdo a la instantánea de Lia Pasqualino para una fantasía que imaginaba a Pirandello en un contexto que daría como fruto su célebre Seis personajes en busca de un autor.

“ Llevábamos mucho tiempo soñando con hacer una película juntos. Hace dos años, en pleno confinamiento, recibí una llamada telefónica de ellos indicándonos que había llegado el momento de hacer realidad nuestro sueño. Y aquí estamos, con esta fantasía en torno a Pirandello en la que Sicilia se convierte en el útero fértil de la imaginación y los sueños, un lugar donde el teatro y la vida se unen en una sola corriente indistinta. Junto a ellos involucré a un amigo precioso y extraordinario actor, Toni Servillo, otro gran intérprete de nuestro cine ”, confirmaba Andó al referirse a cómo los populares Ficarra y Picone formaron parte desde un mismo inicio de La stranezza, cuando todo era tan solo un proyecto en ciernes. Ahora, el film celebra sus 14 nominaciones para los premios David di Donatello anunciadas la semana pasada, un número sólo superado por el gran clásico del cine italiano Marco Bellocchio con su último film Esterno Notte, con 18.

Pero la reunión para la pantalla grande del dúo Ficarra y Picone llega a la Argentina cuando cumplen 30 años desde su comunión artística y festejando el éxito en streaming de la serie Incastrati, disponible en Netflix. Aquí, en La Stranezza, el dúo continúa en escena como dos actores de pueblo sin mucho talento ni tampoco suerte, salvo que en su camino se toparán con el ya entonces inmenso y venerado Luigi Pirandello. Pero estos enterradores de profesión y actores de vocación son parte del imaginario, que el guion suma a la historia real del viaje que Pirandello emprendió a Sicilia para celebrar los ochenta años de su colega Giovanni Verga. Pero los planes se complican, y de la mano de la ficción Pirandello debe quedarse en su pueblo natal, donde tomará contacto con los dos voluntariosos actores.

Valentino Picone y Salvatore Ficarra, en La Stranezza
Valentino Picone y Salvatore Ficarra, en La Stranezza

En La Stranezza, el encuentro entre Pirandello y Verga sucede en la ciudad natal de este último, y así fue como la monumental y barroca vía Crociferi en Catania fue elegida para retroceder un siglo, en una jornada que dejaba perplejos a turistas y curiosos impedidos de mostrar remeras y jeans entre coches tirados por caballos y autos antiguos. Esta ciudad se ubicó así en la lista encabezada por Roma, seguida de Palermo, Erice y Trapani, que entre el 7 de febrero y el 25 de marzo del pasado año recibieron al equipo de Andó para un rodaje que, debido a la fama de sus protagonistas, llamó la atención de toda Italia.

La imaginaria Compañía Filodramática Siciliana Principato e Vella se presenta en el Teatro di Santa Lucia, en una función a la que Pirandello asiste buscando pasar desapercibido. El dramaturgo resulta profundamente impactado por el cruce entre la realidad de la torpe compañía y la ficción teatral que debiera dominar el espacio de la representación y contribuye a expandir los límites de su algo alicaída imaginación. Seis meses después, Sebastiano y Onofrio reciben una invitación de Pirandello para asistir en el Teatro Valle al estreno de Seis personajes en busca de autor, que tiene en esa función una pésima respuesta del público. La verdad histórica refiere que esa primera representación, dirigida por Dario Niccomedi y protagonizada por Luigi Almirante, Vera Vergani y Luigi Cimara, tuvo lugar en ese teatro romano el 9 de mayo de 1921; la incomprensión de ese público inicial mutó en reconocimiento poco tiempo después, con el recorrido internacional de la obra (fundamental en la ruptura de la “cuarta pared” y del teatro de vanguardia), y que en 1934 contribuirá al Premio Nobel de literatura que recibió su autor.

La Stranezza, de Roberto Andó
La Stranezza, de Roberto Andó

Pero ese “rompecabezas histórico” que buscaba la reconstrucción de la Italia de los años 20 del siglo pasado hizo que en cada ciudad de rodaje se eligieran sitios fundamentales para poder dar marco a la acción. Así, el Palazzo Ajutamicristo, con su aristocrático gótico tardío, ubicado en Via Garibaldi 23 de Palermo, brindó su interior y el claustro para algunas tomas. Los callejones de la medieval Erice fueron ideales para que, noche y día, la mímesis exacta de Pirandello a cargo de Toni Servillo transitara sus adoquines; en tanto que la Piazza Umberto 1 y la estación de tren de Trapani también vivieron un viaje al pasado que los encontró celebrando a uno de los autores italianos más trascendentes de todos los tiempos.

La Stranezza tendrá su estreno comercial en mayo
La Stranezza tendrá su estreno comercial en mayo

El auténtico Pirandello había tenido una relación directa con el cine en los mismos años que narra la ficción de Andó de manera tímida para el silente cine italiano, hasta que en 1925 Marcel L’Herbier adaptó El difunto Matías Pascal para el cine francés, que tendrá otra versión de 1936 dirigida por Pierre Chenal, estrenada cinco años antes de que el realizador se radicara en la Argentina huyendo del nazismo. Las fotos inmortalizan el encuentro entre Chenal, Pirandello y las actrices Irma Gramatica e Isa Miranda en Roma el 6 de agosto de 1935. Convocado reiteradamente por el cine, Pirandello descreía de la sustitución de realidad que traía la cámara como parte del maquinismo y la modernidad a la que criticaba tempranamente en Cuadernos de Serafino Gubbio, operador aunque opere en él una enorme fascinación: “El futuro del arte dramático y también de los escritores teatrales ya está ahí. Debemos avanzar hacia una nueva expresión del arte: el cine hablado. Yo estaba en contra, cambié de opinión” , escribirá Pirandello en una carta a Marta Abba en mayo de 1930. La auténtica biografía ubica al autor de vacaciones en Francavilla a Mare, frente al Adriático, donde trabaja en el discurso que pronunciará en homenaje a Verga en Catania en el mes de septiembre. Ese año, Emma Gramatica estrenaba La signora Morli, uno e due, en el Teatro Argentina de Roma.

La Stranezza, de Roberto Andó
La Stranezza, de Roberto Andó

Fue en los estudios de Cinecittá donde Pirandello enfermó de la neumonía que se convertiría en fatal el 10 de diciembre de 1936, a los 69 años. Ya habían pasado entonces 15 años del estreno de la obra que cambió el rumbo del teatro. “Éxito entre vivos contrastes en la nueva obra de Luigi Pirandello”, tituló La Stampa al estreno de Seis personajes en busca de un autor, la obra que en la imaginación de Andó se nutrió de un ignoto dúo de actores vocacionales sicilianos como narra La Stranezza – que se conocerá como Extrañeza en su estreno porteño, el 4 de mayo- con humor y complicidad. “ Inmediatamente aceptamos con entusiasmo el proyecto de Roberto Andó. Un maravilloso viaje al mundo de Luigi Pirandello y la fuente natural de su inspiración: Sicilia. Una oportunidad única e irrepetible de crecer y potenciar nuestra carrera artística al conocer a dos grandes maestros del cine italiano, Roberto Andó y Toni Servillo ”, consideraron Ficarra y Picone logrando algo impensado en términos de taquilla: que Pirandello nutriera el imaginario de la película local más exitosa de 2022 en Italia y que en un momento secundara a Pantera Negra 2: Wakanda por siempre dentro de las más vistas. Como si el propio Luigi Pirandello lo hubiese hecho de nuevo.