Telecinco y los desplantes en 2022 que jamás hubiéramos imaginado hace tiempo

Ion Aramendi en imagen promocional de 'Supervivientes 2022' (cortesía de Mediaset)
Ion Aramendi en imagen promocional de 'Supervivientes 2022' (cortesía de Mediaset)

El 2022 nos ha demostrado que los tronos televisivos son un espejismo y la eternidad es para los dioses. Telecinco ha perdido gran parte de su liderazgo en términos de audiencia y esto ha repercutido, de muy mala manera, no solo en su contenido, sino también en algunos de sus rostros más conocidos. El ir y venir de una gran parte de sus presentadores y, en algunos casos, su desaparición sin previo aviso, ha generado mucha más confusión y descontento. Hay movimientos que no tienen explicación y han dañado más que beneficiado a la cadena que ha sido líder por dos décadas.

La pasada edición de Supervivientes nos sorprendía con la llegada, no solo a Conexión Honduras, sino también a la cadena, de un viejo amigo conocido: Ion Aramendi. Después de tomarse un respiro en Mediaset y probar en otros medios, fue recibido de nuevo por la puerta grande y nada menos que en un reality de altura. Los espectadores se mostraron encantados con el presentador vasco quien estuvo a la altura de la circunstancias aportando frescura y novedad al formato. Pero, una vez acabado, no hubo más Ion. Desapareció como por arte de magia. Todos esperábamos verle en otros programas del verano, quizás en algunas sustituciones y haciendo las delicias del público que tan contento había quedado.

Nada que ver, han tenido que pasar casi 5 meses para volver a verle en televisión. Concretamente en el nuevo concurso de Mediaset, Reacción en cadena, cuyo estreno tenía lugar el pasado 19 de diciembre y en el que, por fin, volvíamos a disfrutar de él. Ion no es el único presentador que ha formado parte de esa larga lista de cambios algo incongruentes de Mediaset. Toñi Moreno también lo ha vivido en sus propias carnes igualmente. La andaluza fue la elegida para ponerse a cargo del programa Déjate querer el pasado mes de junio. Un show que arrancó con fuerza y que contó con invitados de peso como Nacho Palau o Anabel Pantoja, entre otros. Ofreció exclusivas que ya quisiera Sálvame y daba un contenido cariñoso y calidad que hacía la velada de los sábados muy agradable. El show era una versión modernizada de Volverte a ver, en su momento presentado por Carlos Sobera, con el que la cadena pretendía elevar las cifras de share. Al final del verano los datos dejaron de ser satisfactorios y, de la noche a la mañana, el programa de Toñi Moreno fue cancelado de forma sorpresiva. A ella tampoco la volvimos a ver.

Toñi Moreno en imagen promocional de 'Dejate Querer' (cortesía de Mediaset)
Toñi Moreno en imagen promocional de 'Dejate Querer' (cortesía de Mediaset)

Cesaron las grabaciones y no hemos tenido a la feliz mamá frente a las cámaras de Telecinco hasta ahora. Una vez más, no hubo explicaciones y nos quedamos sin la sonrisa y el carisma de Toñi, una de las presentadoras que más ha sufrido los cambios y contrariedades de la cadena, y siempre con la mejor disposición de su parte. Hay quienes tuvieron mejor suerte y, aunque no se quedaron sin programa, sí han estado pasando de un lugar a otro como si fuera una ficha de ajedrez hasta encajar en la mejor jugada. Joaquín Prat ha sufrido de lleno la reestructuración del canal de Fuencarral. El presentador, que ya había encontrado su sitio en Cuatro al día, donde llevaba desde 2019, tuvo que despedirse para convertirse en la cara principal de Ya es mediodía tras el fichaje de Sonsoles Ónega por Atresmedia a comienzos del verano. Aunque inicialmente se pensaba que la mano derecha de Ana Rosa Quintana continuaría en ambos programas, finalmente Joaquín se quedó en YAM y Ana Terradillos fue su sustituta en el magazín informativo de Cuatro.

¿Está contento Joaquín con el cambio? Eso es algo que no sabemos a ciencia cierta, pero su despedida en Cuatro al día yo creo que no necesita mucha aclaración. "Hoy me toca despedirme de ustedes y de Cuatro al día. Este programa ha sido el mejor regalo que me ha hecho mi vida profesional, pero no hay ningún presentador que esté por encima de cualquier programa de televisión. Eso sería injusto, porque un programa lo hacen los técnicos, los redactores, los 'cracks' de realización, los mozos de plató, el personal de limpieza, maquillaje, peluquería… 'Cuatro al día' lo hace todo aquel que se ha asomado alguna vez a este programa, pero en este formato son fundamentalmente ustedes. Este programa lo hacen ustedes... Gracias por lo vivido, por lo llorado y por lo reído. Gracias por tanto, gracias por todo. Larga vida a 'Cuatro al día'. Hasta siempre", dijo visiblemente emocionado. A buen entendedor...

Unos cambios de última hora y sin ton ni son, que lo único que hacen es confundir y crear más inestabilidad tanto en quienes los ven como los que están al otro lado. Si bien es cierto que Telecinco está experimentando y usando diferentes estrategias por el bien de la cadena, lo cierto es que los resultados no son mucho mejor de lo que eran antes. Todo lo contrario. Este mes de noviembre Antena 3 volvía a sacarle la delantera y lideraba en términos de audiencia con un 14,3% de share, frente al 11,5 % de Telecinco. Una distancia histórica entre ambas privadas que no sucedía desde hace 20 años.

Pero ahí no se quedan los giros más inesperados en la cadena. Uno de los más fuertes afectaba a una de sus caras más representativas. El pasado mes de marzo y después de 13 años en el equipo de Sálvame, delante y detrás de las cámaras, Carlota Corredera se despedía de la que había sido su familia televisiva por tanto tiempo. Seguiría en la cadena pero por otros derroteros. A partir de ese momento, su presencia frente a las cámaras ha sido muy escasa y puntual. En octubre finalmente volvía a estar a cargo de un programa, ¿Quién es mi padre?, un espacio de investigación sobre los hijos no reconocidos de algunos famosos. Fueron 5 emisiones, tres de las cuales lideraron en la noche de los sábados, pero, una vez más y de repente, se acabó. El declive en sus últimos episodios parece haber sido la razón por la que salió de la escaleta y con ello, también Carlota, a quien, de momento, no hemos vuelto a ver frente a los focos.

Carlota Corredera en imagen promocional de '¿Quién es mi padre?' (cortesía de Mediaset)
Carlota Corredera en imagen promocional de '¿Quién es mi padre?' (cortesía de Mediaset)

No es el único ‘desplante’ televisivo que, a mi modo de ver, se le ha hecho a la periodista gallega este año. Después de presentar con un éxito rotundo la primera entrega de la serie de Rocío, contar la verdad para seguir viva, todo el mundo pensaba que sería ella quien volvería a capitanear la segunda parte, En el nombre de Rocío. Una suposición equivocada ya que, esta vez, el presentador de la serie documental fue Jorge Javier Vázquez. ¿Por qué si la marea rosa había hecho historia y las cosas habían funcionado? Nos quedaremos con las ganas de saberlo. Aunque el programa ofreció información exclusiva y sorprendente sobre la familia de Rocío Jurado, las cifras de audiencia nunca llegaron a dispararse como en su primera parte. Los capítulos se alargaron demasiado y eso terminó pasando factura. Tanto se estiró del chicle y del drama que, sintiéndolo mucho, muchos optamos por contenidos algo más agradables.

A los cambios hay se sumar también las misteriosas desapariciones en Mediaset. Desde que acabara la primera edición de Secret Story en 2021, no hemos vuelto a ver, por ejemplo, a Jordi González. Él ha sido uno de los rostros estrella en lo que a realities de la cadena se refiere, pero este 2022 se quedaba fuera de todos ellos, tanto de la segunda edición de Secret Story, como de Supervivientes e incluso del más reciente, Pesadilla en el paraíso. ¿Las razones? Él mismo lo expresó en febrero a través de un tuit, pero no todo el mundo quedó convencido. “La respuesta a esa pregunta que me llega de tantas partes no puede ser más sencilla: me he tomado el año sabático que hace tanto tiempo deseaba. Quien pueda hacerlo que no lo dude. Va muy bien”, escribió. Veremos si la cosa cambia en 2023 y es verdad que lo tenemos de vuelta.

A pesar de no estar presente, la relación de Jordi con Mediaset sigue intacta. Cosa que no se puede decir con la que ha sido otra de las caras y voces más importantes del canal de Paolo Vasile en los últimos años, le pese a quien le pese: Paz Padilla. “Mediaset España decidió resolver el contrato vigente con Paz Padilla tras el incumplimiento de su obligación como presentadora, al haber abandonado el programa Sálvame una hora y media antes de su finalización el pasado 20 de enero”, leía el comunicado de la cadena. Con él, la también actriz quedaba fuera del canal. Nadie llegaba a entender del todo esta decisión tan radical, sobre todo, teniendo en cuenta la cantidad de veces que otros colaboradores y presentadores de programas se han ido en directo. Quizás Paz no debió hacer eso, pero ¿merecía un despido así? Y, si te he visto, no me acuerdo.

Paz Padilla en imagen promocional de 'A simple vista' (cortesía de Mediaset)
Paz Padilla en imagen promocional de 'A simple vista' (cortesía de Mediaset)

Las cosas no quedaron de esta manera y la cómica respondió con una demanda que ha terminado ganando en los tribunales. En junio la justicia le daba la razón y la guerra acababa en favor de Paz, quien fue readmitida en la cadena donde tantos años trabajó, no solo como presentadora de programas varios, sino también como actriz de una de sus series de más éxito, La que se avecina. "Mediaset ha acordado con Paz Padilla retomar su relación contractual, exactamente en los mismos términos en los que estaba dicho contrato que le unía a la compañía. La incorporación de la actriz y presentadora no se producirá de manera inmediata, sino al finalizar una serie de compromisos profesionales adquiridos en estos últimos meses", expresó la cadena. Su contrato se prolonga hasta el año 2024. Pero de momento, y a excepción de alguna que otra aparición puntual, no la hemos vuelto a ver. Es como si nunca hubiera existido. El único que ha hablado de ella recientemente ha sido Jorge Javier Vázquez en una entrevista para el podcast Querido hater, y no lo ha hecho precisamente en los mejores términos. "Yo creo que le deberían de quitar el nombre, porque Paz...", dijo con rin tin tin.

Y así podríamos seguir un ratito más con otros nombres de la cadena que siguen buscando su sitio y que aparecen y desaparecen como por arte de magia. La conclusión es que el 2022 no ha sido el mejor año para los presentadores de este canal. Y con la salida de Vasile después de 23 años como consejero delegado de Mediaset España, las cosas podrían seguir en la misma línea, incluso empeorar, en los meses venideros. Los aires nuevos son necesarios si suman, pero cuando los cambios no van acompañados de coherencia y sentido común pasa justo lo que está pasando.

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