Yahoo Estilo 6 variantes de la leche de vaca para conocer
Texto: Irina Kenigsberg
Tanto por alergias como por dieta o por cuestiones de salud, es posible que busques disminuir o eliminar el consumo de leche de vaca. ¿Cuáles son tus opciones? Hoy en día, el mercado ofrece diversas alternativas para elegir. Descubre lo que debes saber sobre cada una de ellas.
De almendras
Una de las opciones más conocidas. Está hecha de almendras trituradas y agua, se informa en el sitio Healthline. Su versión sin endulzar tendría menos calorías que otras leches, con 30 a 60 por taza. Cada una de esas porciones aporta también 1 g (0.03 oz) de carbohidratos, 3 g (0.1 oz) de grasas y 1 g (0.03 oz) de proteína. Además, no tiene grasas saturadas ni lactosa. Si bien no sería una buena fuente de calcio, algunas marcas contienen un suplemento de ese nutriente, así como de vitamina D.
De soya
Hecha de porotos de soja remojados y molidos con agua, esta opción contaría con pocas grasas saturadas, nada de colesterol ni lactosa, se indica en el sitio de la Fundación Live Strong. Además, contendría la misma cantidad de proteína que la leche de vaca, pero menos sodio. Uno de sus puntos débiles sería que no aporta una cantidad significativa de calcio, aunque hay versiones fortificadas que añaden más de ese nutriente al producto.
De arroz
Uno de sus principales beneficios es que sería la que menos alergias causa. Por lo tanto, podría ser buena opción para aquellas personas con intolerancia o alergia a la leche, soya o frutos secos, se explica en Healthline. De todos modos, siempre es necesario consultar con un médico. Al igual que los casos anteriores, no aporta gran cantidad de calcio, a menos que sea un producto fortificado.
De coco
Está hecha de agua filtrada y crema de coco (que está hecha de carne de coco maduro rallada). Tendría más grasas que otras alternativas y casi todas serían saturadas (asociadas con problemas en el corazón), dice el mismo sitio. Cada taza tendría 2 g (0.07 oz) de grasa, además de 50 calorías. Si bien no contiene calcio ni vitamina A o D, hay productos fortificados con esos nutrientes.
Kéfir
Se trata de una bebida similar al yogur, que se produce mezclando fermento base con leche de vaca, cabra u oveja, detalla el sitio WebMD. Una taza de kéfir bajo en grasas sin endulzar tendría 110 calorías, 11 g (0.3 oz) de proteína, 12 g (0.4 oz) de carbohidratos y solo 2 g (0.07 oz) de grasas. ¡Un gran aporte nutricional! Si bien el proceso de fermentación elimina parte de la lactosa, podría ser irritante o dar alergia a algunas personas, así que antes de probarlo deberías consultar con un especialista de la salud.
De cáñamo
Baja en grasas saturadas y rica en diversas vitaminas y minerales (incluyendo calcio y vitamina B), esta opción sería una nutritiva alternativa a la leche de vaca, según el sitio de la Fundación Live Strong. Como en los casos anteriores, ten cuidado con las versiones endulzadas o saborizadas, ya que podrían tener azúcar y una mayor cantidad de calorías.
Ante cualquier duda y antes de hacer cambios en tu dieta, consulta a un médico de confianza.
Y tú, ¿conoces otras alternativas a la leche de vaca?
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