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No tires los cabellos del elote: son beneficiosos para la salud y combaten el envejecimiento

El maíz es versátil, delicioso y generoso. Aunque es originario de América su uso se ha expandido para convertirse en un alimento básico de la dieta de muchos países en el mundo. Son muchas las recetas en las que este alimento es el protagonista y muchos los sabores que acompaña. ¿Pero habías pensado que los pelitos que se desechan en su preparación podían ser útiles para nuestra salud? Nosotros tampoco.

Estos delgados filamentos que parecen inocuos pueden ser unos poderosos aliados para nuestro bienestar. También llamados seda del maíz, han sido usados por la medicina tradicional china, así como remedio naturista en nuestro continente, y en algunos países de Europa.

Las propiedades que se le atribuyen son variadas, desde prevenir la formación de piedras en los riñones, bajar la presión arterial, hasta ser un desinfectante casero, y aunque no está comprobado que tenga un efecto antiséptico, sí se ha demostrado su utilidad para mejorar la retención de líquidos, entre otras propiedades.

(Getty Creative)
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De hecho, un estudio publicado en la revista Molecules, señala que las barbas de maíz sí tienen los efectos diuréticos que se le han atribuido tradicionalmente, pero además agregan que otros estudios revisados ratifican sus beneficios como antidepresivo y antifatiga.

Asimismo, un artículo en WebMd asegura que esta parte muchas veces ignorada del maíz, elote o choclo, posee nutrientes como proteínas, vitaminas, minerales y fibra, además de carbohidratos.

Pero además de sus capacidades conocidas, resultaría beneficioso incluir estas fibras en la lista de alimentos que por su alto valor en antioxidantes son capaces de ayudarnos a reducir el envejecimiento prematuro, pues sus capacidades resultan comparables con las de la vitamina C.

Acción antioxidante

Los antioxidantes naturales extraídos de frutas, vegetales, plantas, cereales y verduras son eficaces para combatir y eliminar los radicales libres que causan no solamente el envejecimiento, sino también enfermedades como trastornos neurodegenerativos, cáncer, diabetes y las inflamaciones, entre otras.

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El estudio publicado en Molecules arrojó que el uso potencial de los extractos de la seda del maíz es una importante fuente bioactiva de antioxidantes naturales, cuyos valores como se mencionó se pueden comparar con los de la vitamina C. También se menciona que la mayor concentración de flavonoides, además de polifenoles, taninos, proantocianidinas, se encuentra en las partes oscuras de los filamentos, siendo estas las de la mayor capacidad antioxidante total.

Esto explica la razón por la cual se ha usado tradicionalmente el pelo de maíz para tratar los dolores articulares relacionados con la inflamación, pero aún se ameritan más investigaciones científicas para confirmarlo.

Por otra parte otro estudio publicado en el Korean Journal of Food Science and Technology que analizó las propiedades antiinflamatorias y antiatópicas de los extractos antioxidantes de estos filamentos, sugiere que estas tienen el potencial de reducir y aliviar los síntomas asociados a la dermatitis atópica.

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Control del azúcar en la sangre

El extenso estudio de Molecules también arroja que el pelo de maíz posee un extracto acuoso capaz de reducir la hiperglucemia y puede utilizarse como alimento hipoglucemiante para los diabéticos. Asimismo, los polisacáridos la seda del maíz también pueden ser útiles como agente antidiabético. Sin embargo, estas investigaciones fueron realizadas en animales, no en humanos, por lo cual aún hay mucha tela que cortar en esta materia.

Además, es fundamental que quienes sufran de alteraciones en el procesamiento del azúcar en la sangre, recurran al especialista antes de ingerir cualquier medicamento natural o sintético, incluyendo tés, y alimentos.

Los ingredientes naturales pueden ayudar en tratamientos, pero no sustituir un tratamiento médico. De manera que quienes tengan condiciones especiales, como enfermedades renales o del sistema digestivo, así como las mujeres embarazadas, eviten el consumo de este y cualquier otro remedio casero sin haber consultado al médico.

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Cómo prepararla

Según recomiendan en El Horticultor, medio dedicado al estilo de vida sostenible, se puede tomar en infusión para contribuir en el tratamiento de la cistitis, la retención de líquidos y los cálculos renales.

La infusión se prepara hirviendo un litro de agua, y añadiendo 30 gramos de barbas de maíz. Se deja hervir durante 10 minutos, se retira del fuego y se dejar reposar por 15 minutos.

Aunque este es un ingrediente natural y muchos sitios especializados recomiendan tomar varias tazas al día, lo más recomendable es una ingesta moderada. Vale mencionar que algunos suplementos alimenticios comerciales recomiendan hasta 1200 miligramos al día.

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