Comer picante, ¿ayuda a bajar de peso?

Cada vez escucho con más frecuencia que el picante ayuda a bajar de peso, y casi parece una excusa para agregarle más chile, pimienta de cayena o paprika a la comida. Y mientras a unos nos gusta, para otros podría ser peor castigo que no volver a comer chocolate.

Si tú también has escuchado decir que comer picante te ayudaría a bajar de peso, te tenemos una noticia, es verdad, pero no es tan significativo.

¿Cómo puede el picante ayudar a quemar más calorías?

Charlamos con Tannia Angélica Maya Jiménez, maestra en Ciencias Médicas y Nutrición y miembro del Centro Especializado en Nutrición Integral, en México. Ella nos explica que sí, efectivamente los chiles tendrían un ligero efecto termogénico en el cuerpo que aumentaría, ligeramente, el metabolismo y el gasto calórico.

Esto se debería a la capsaicina, el compuesto activo que hace que los chiles piquen, pero que también está presente en otros alimentos como la mostaza y el jengibre.

El efecto termógénico, como lo aclara Tannia, es “la cantidad de energía consumida o gastada por el organismo para metabolizar, sintetizar o digerir cualquier tipo de alimento”. Cabe mencionar que todos los alimentos lo tienen, y suele ser en promedio de un 10% y duraría unas 3 o 4 horas.

La capsaicina aumentaría a 20 o 25% este efecto termogénico, pero sería durante 30 minutos y máximo 3 horas, asegura Tannia.

Sin embargo, este efecto no tendría resultados tan significativos.

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Qué dicen los estudios sobre la capsaicina y la pérdida de peso

Existen varios estudios que documentan el efecto de la capsaicina con el consumo y gasto calórico. Por ejemplo, en 2014 se encontró que comer 2mg de este compuesto antes de comer reduciría la ingesta energética en 75 calorías por comida.

Otro estudio de 2012 encontró que ingerir la capsaicina antes de comer ayudaría aumentar el gasto energético en unas 50 calorías diarias, lo que equivaldría a una pérdida de peso considerable a lo largo de dos años.

Además, también ayudaría a reducir el apetito y aumentar la saciedad, de acuerdo con una investigación del 2005.

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¿Comer o no comer más picante en la dieta?

A pesar de esta evidencia y de que la capsaicina podría en cierta medida ser aliada de la figura, los efectos no resultan tan significativos.

Como insiste Tannia, el ligero aumento de gasto calórico asociado a la ingesta de capsaicina “es significativa sin ser extraordinaria”. Además, insiste en que todavía no hay estudios contundentes que demuestren que se trata de una maravilla contra la obesidad.

“Sí ayuda, un poco, pero si no llevas una dieta balanceada, no con eso vas a erradicar el problema del sobrepeso” insiste.

Y como prueba estamos los mexicanos, que ocupamos el segundo lugar de obesidad adulta del mundo, de acuerdo con la OCDE, a pesar de que tenemos la costumbre de ingerir picante con bastante regularidad.

@travesabarros