Yahoo Estilo ¿Qué podemos hacer para evitar el contagio del dengue?
Expertos en enfermedades infecciosas confirman la transmisión del dengue por vía sexual en el caso español, y nos recuerdan las medidas de protección
La fiebre del dengue es una enfermedad (ahora ahora) transmitida por mosquitos que se produce en áreas tropicales y subtropicales del mundo. Se caracteriza por fiebre alta, erupción cutánea y dolor muscular y articular. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha estimado que se producen anualmente hasta 400 millones de infecciones por dengue, lo que da como resultado 500.000 hospitalizaciones.
Tras el descubrimiento del primer caso de transmisión sexual de dengue, en España, los expertos revelan ahora cómo lo descubrieron y cuáles son las nuevas recomendaciones a tener en cuenta.
El caso español
Confirmado a finales de septiembre, este caso intrigaba a los científicos dado que el afectado no había viajado a un país donde el dengue fuera endémico.
Su importancia radica en que es uno de los primeros casos de transmisión sexual de Dengue en el mundo; solo hay constancia de otro caso similar (fuera de Europa) de una transmisión sexual de la enfermedad de una mujer a un hombre en Corea del Sur.
Se trata de un hombre joven cuya pareja había viajado a una zona donde la afección es endémica.
“Si no se había visto hasta ahora, más allá de un caso que se describió como probable es porque, normalmente, el virus circula en zonas donde la enfermedad es endémica, llena de mosquitos vectores. Y es imposible distinguir si la transmisión fue por ellos o por otra vía. Seguramente, habrá más casos que han pasado desapercibidos, pero sigue siendo muy raro”, comenta en El País María Paz Sánchez-Seco, del Laboratorio de Arbovirus del Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III.
Este hallazgo acaba con la teoría de que la transmisión del dengue no es de persona a persona y sugiere, tal y como apunta microbióloga, que “la transmisión sexual es plausible”. Hasta ahora se sabía que la infección por dengue se iniciaba cuando el mosquito Aedes aegypti pica a la persona enferma y luego a otra sana.
Se trata, en efecto, de un hombre que no había salido de España en los 45 días previos al inicio de los síntomas, tratándose por tanto de un caso autóctono.
¿Cuándo y cómo pasó?
El Hospital Ramón y Cajal de Madrid fue el encargado de notificar el contagio a la Red de Vigilancia Epidemiológica, que informó de sendos casos en dos hombres residentes en la capital. La investigación determinó que se trataba de un caso importado (contrajo la infección en otro país) y otro autóctono.
Más adelante, una vez que los investigadores concluyeron que no había presencia del mosquito vector de la enfermedad ni en la residencia ni en ninguno de los lugares de la Comunidad de Madrid visitados, la Comunidad de Madrid hizo público que el hombre contrajo la enfermedad al mantener relaciones sexuales sin protección con otra persona que había adquirido el virus durante un viaje por el Caribe.
Es decir, que a la ausencia de viajes a zonas endémicas se sumó el hecho de que en la Comunidad de Madrid no está asentado el mosquito tigre —Aedes albopictus—, que sí habita en zonas de España como la costa mediterránea, donde ha actuado de vector.. El enfermo tampoco había visitado recientemente estas zonas.
Sin embargo, su pareja había presentado un cuadro muy similar 10 días antes y tenía antecedente de viaje a Cuba y República Dominicana, países en los que la enfermedad vive un importante repunte, durante el periodo de incubación, por lo que se consideró un caso importado.
"El paciente llegó con fiebre alta, eritema cutáneo e intensos dolores", explica Santiago Moreno, jefe del servicio de enfermedades infecciosas del Ramón y Cajal.
Los afectados mantuvieron relaciones sexuales desprotegidas a primeros de septiembre, por lo que se estudiaron muestras de semen que han resultado positivas.
Las pruebas genéticas han demostrado que "la cepa del virus encontrada en las muestras tomadas a los dos pacientes es idéntica y coincide con la que actualmente está circulando en Cuba", explican la epidemióloga Susana Jiménez y el biólogo Andrés Irisio.
El sexo: vía poco frecuente
Habitualmente esta enfermedad, endémica en varios países de América, el sudeste asiático y África, se transmite a través de la picadura de un mosquito. Así lo confirma en su web la Organización Mundial de la Salud (OMS) donde señala que "el dengue se transmite por la picadura del mosquito Aedes, portador de uno de los cuatro virus del dengue".
Aunque en este caso el virus del dengue ha sido detectado en el semen y flujos vaginales de personas enfermas, los casos de transmisión sexual no habían sido confirmados hasta la fecha por la literatura científica.
"Es una noticia de relevancia mundial: encontrar otro mecanismo de transmisión", admite la investigadora En los países donde el dengue es endémico o existen mosquitos que lo transmiten, "no se puede decir que no exista la vía de transmisión sexual. Lo que pasa es que hasta ahora no se contemplaba, porque siempre hemos pensado que era el mosquito", concluye.
¿Puede extenderse en Europa?
“Lamentablemente sí, la aparición de resistencias a los antimicrobianos, el cambio climático global y la destrucción de ecosistemas, así como el auge del turismo internacional, ha provocado que este tipo de enfermedades continúen extendiendo su área de prevalencia y de incidencia”, nos comenta el doctor Antonio Montero, director científico del Centro de Medicina y Enfermedades Infecciosas Emergentes de la Facultad de CC. Médicas de la Universidad Nacional de Rosario, Argentina, y autor del libro Medicina Tropical.
“El dengue, la leishmaniasis, la fiebre hemorrágica o la tuberculosis son algunos ejemplos de enfermedades tropicales emergentes, sin olvidar las llamadas reemergentes, como la rabia, que ha resurgido en zonas de la India y Pakistán, y cuya prevalencia continúa en aumento”, añade este experto.
Si vas a un lugar endémico o con brotes activos
Estas son algunas recomendaciones a seguir para prevenir un contagio de dengue:
Vestir pantalones largos y camisas de manga larga.
Evitar el uso de perfumes y de ropas de colores oscuros o chillones.
Utilizar insecticidas repelentes en la piel, y otros en spray que contenga permetrina para la ropa, ya que los mosquitos pueden picar incluso a través de ésta. Ten cuidado de no rociarlo en la cara y evita la inhalación del mismo. Hay que aplicarlo en las manos primero y luego, en la cara.
Colocar mosquiteros en puertas y ventajas, y en casos de alto riesgo, alrededor de la cama.
Tener relaciones sexuales utilizando preservativos, dado que el dengue se puede contagiar por esa vía.
Además, la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), destaca la importancia de evitar pasear por zonas o terrenos donde haya acúmulos de agua estancada, sobre todo durante el amanecer y el anochecer, que son las horas de mayor actividad de estos mosquitos.
Sin Aedes aegypti no hay Dengue
Por su parte, desde la mutualista americana Asociación Española recuerdan que “el mosquito Aedes aegypti no puede reproducirse en ausencia de depósitos con agua”. Por tanto, aconsejan eliminar los lugares donde los mosquitos ponen sus huevos y se reproducen: envases, cubiertas, baldes, floreros, tanques de agua, bebederos de animales, etc.
Ante la sospecha..
El cuadro clínico se caracteriza por un malestar generalizado, fiebre alta, dolor de cabeza y una erupción en la cara que se extiende por el cuello, el tórax y las extremidades.
Ante esta situación deberías ir al médico y evitar tener sexo. Pero, si además de fiebre, tienes dolor de estómago, vómitos, sangrado de la nariz o las encías, sangre en las heces, somnolencia, irritabilidad, palidez, sudor frío y respiración dificultosa se trata de dengue severo. Por eso, ante la presencia de estos síntomas, lo más importante es no automedicarse y acudir al centro de salud más cercano.
Pese a lo llamativo del caso, desde la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid afirman que “se trata de una vía poco frecuente y de baja relevancia epidemiológica, por lo que el riesgo para la población derivado de este hallazgo se considera muy bajo, y por lo tanto no debe crear alarma”.
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