Conociendo Rusia tuvo su noche consagratoria en el Movistar Arena

Conociendo Rusia tuvo su noche consagratoria en el Movistar Arena.
Conociendo Rusia tuvo su noche consagratoria en el Movistar Arena.

Cuando a fines de 2021 Conociendo Rusia presentó oficialmente La dirección, su tercer álbum, a lo largo de cuatro funciones a sala llena en el teatro Gran Rex, la sensación de que algo grande se estaba gestando era cada vez más notable. Iniciado el 2022, todas aquellas presunciones fueron materializándose de manera paulatina, a través de una concurrida gira por todo el país y más de treinta ciudades de Latinoamérica y España, una muy comentada participación en el festival Quilmes Rock realizado en Tecnópolis y de la obtención de dos premios Gardel en las categorías “Mejor álbum artista de rock” y “Mejor diseño de portada”. Por eso, un año tan positivo y de creciente popularidad merecía coronarse con una actuación consagratoria como la ocurrida ayer sábado por la noche en el Movistar Arena y que el viernes 16 de diciembre sumará una nueva función.

Frente a una multitud que agotó las localidades del amplio estadio cubierto ubicado en Villa Crespo, el proyecto musical liderado por Mateo Sujatovich brindó el concierto más importante de su carrera demostrando a su vez que ya juega plenamente en las ligas mayores del rock local.

A lo largo de dos horas, la banda realizó un exhaustivo recorrido por sus tres álbumes de estudio – Conociendo Rusia (2018), Cabildo y Juramento (2019) y el ya citado La dirección (2021) -, acompañada por una atractiva e ingeniosa puesta lumínica y una sobria escenografía de enormes pantallas LED dispuestas en forma de tríptico.

Situándose bien al margen de los dictados del mainstream, las modas y de una coyuntura fuertemente signada por la música urbana, el trap y el reggaeton, el “Ruso” (como también se lo conoce a Sujatovich) siempre apostó sin titubeos y con total convicción por la incursión en la más clásica tradición del rock argentino.

Continuando el sendero marcado por figuras indiscutidas como Charly García, Luis Alberto Spinetta, Fito Páez y Andrés Calamaro, entre otros, además de ciertas pinceladas que van desde Los Enanitos Verdes a Estelares pasando por Los Tipitos, la agrupación exhibe orgullosa las reconocibles e inconfundibles marcas de fábrica que caracterizan al más puro rock nacional, conservando los debidos respetos y admiración aunque aportándole su impronta y su fresca mirada contemporánea.

“30 años”, la muy coreada “Cabildo y Juramento”, “Se me hizo tarde”, “En todos los lugares” y “Mi casa tu casa” dieron cuenta de las inocultables influencias y de cuál es la escuela en la que Mateo Sujatovich se graduó con honores. Por eso, su satisfacción y ese dulce sabor a triunfo fueron aún mayores cuando observó al joven público que se acercó hasta el Movistar Arena cantar y disfrutar de esas melodías más que agradables y tan familiares al oído.

En la variada propuesta de Conociendo Rusia conviven armoniosamente el pop, el rock, la balada, el funk y demás estilos. Sin embargo, en el balance general, y más allá de los géneros abordados, lo único que importa y prevalece como un preciado tesoro por sobre todos los demás aspectos es la canción. Y en ese sentido, temas como “Tu encanto”, “Los amigos”, “Quiero que me llames” y “No aguanto más” (con sus aires de rumba que remiten sin escalas a “Sin documentos” de Los Rodríguez) funcionan como claros y perfectos ejemplos.

“No lo puedo creer. Se me escapó de las manos lo de tener una banda de rock”, confesó con sinceridad y asombro el “Ruso” en uno de los tramos del show. No obstante, el joven músico y compositor sorteó con creces y gran aplomo la prueba que tenía por delante, destilando simpatía, disipando de a poco algún que otro vestigio de timidez que aún parece perdurar en su personalidad y recorriendo con firmeza la pasarela que se desprendía del escenario.

Hábil como guitarrista, correcto en su desempeño vocal y dueño de un ángel especial a la hora de componer, Mateo sabe cómo seducir y contagiar a sus seguidores mediante pequeñas y simples historias que giran alrededor del amor, el desamor, la amistad y diversas situaciones cotidianas no exentas, a veces, de cierta melancolía y matiz nostálgico.

Guillermo Salort (batería), Benjamín Rampoldi (teclados) y Chechi De Marcos (guitarra acústica y coros), junto a la dirección musical compartida entre Juan Giménez Kuj (bajo) y Nico Btesh (guitarra eléctrica), colaboraron con creces en la tarea de generar todos y cada uno de los distintos climas que se sucedieron a lo largo del concierto. Y hubo aún más matices y texturas gracias al aporte de una sección de vientos y de un cuarteto de cuerdas que tuvo su momento especial durante un set acústico pleno de sensibilidad conformado por “Disfraz” y “La luna”.

Feli Colina y el tecladista Fran Azorai se acoplaron a la fiesta en calidad de invitados para interpretar “Montaña infinita”. En tanto, Pato Sardelli (Airbag) se trenzó en un feroz duelo de guitarras con Sujatovich durante la ejecución de “Vos y yo” y “Bruja”, decididamente los pasajes más rockeros de toda la velada antes de despedirse bien arriba a través de “Loco en el desierto”.

Con Conociendo Rusia, además de otros nombres en ascenso que van consolidándose día a día, queda absolutamente en claro que el tan comentado y necesario recambio generacional en la escena del rock argentino ya no es una promesa ni una mera expresión de deseos sino una auspiciosa y bienvenida realidad. No hay dudas, el futuro ya llegó.