Diana Bracho y el papelazo que se negó a hacer en 'Cuna de lobos': "ni muerta"
Televisa siempre ha defendido el realizar refritos de historias de antaño bajo la premisa de que las nuevas generaciones disfruten de esas mismas historias, actualizadas (o medianamente actualizadas). La llamada Fábrica de sueños prácticamente ha hecho remakes (y refritos de refritos) de todas las telenovelas que ha producido en más de seis décadas.
Ejemplos hay varios: La usurpadora, Cuna de lobos, Rubí, Los ricos también lloran, Corona de lágrimas, La madrastra, Mi secreto, Senda prohibida (ahora en formato serie), y próximamente El extraño retorno de Diana Salazar y El maleficio, por citar algunas.
Muchas veces es el público el primero en cuestionar que sus clásicos sean retomados por temor a no apegarse a la historia original o por no lograr la misma calidad de actuaciones. Diana Bracho, actriz, también se cuenta entre ellos: el día que le propusieron revivir a la temible 'Catalina Creel', ella lo rechazó con un tajante "ni muerta".
Cuna de lobos ha sido de las pocas telenovelas que ha acaparado la atención de todo un país. Tanto que hasta Jacobo Zabludovsky, titular del noticiero nocturno estelar de Televisa, le dedicó gran parte de su espacio al melodrama de la despiadada matriarca capaz de todo por preservar la casta de la familia. Fue el mayor evento televisivo de México, pero también de Latinoamérica entre 1986 y 1987.
La telenovela original de Carlos Olmos tuvo grandes actuaciones: Gonzalo Vega, Alejandro Camacho, Rebecca Jones, Raúl Meraz, Carlos Cámara, Humberto Elizondo, la misma Bracho. Pero la villana que encarnó María Rubio los superó incuestionablemente. Todos sintonizaban la telenovela solo por ver a 'Catalina Creel' (Rubio).
Sucedió entonces que poco después del 2010, el productor Salvador Mejía (Esmeralda, Carrusel, La esposa virgen, Corazón guerrero) se propuso revivir este clásico, y pensó incluir a algunos de los actores originales en su versión, específicamente a Diana Bracho en el papel que encarnó Rubio.
"Cuna de lobos es una novela histórica, fantástica, todos estábamos muy, muy bien. María Rubio era la antagonista y se convirtió en la protagonista de la novela, yo siempre lo digo: María Rubio se convirtió en la protagonista absoluta de la novela, estaba absolutamente genial, maravillosa. Entonces dije '¿a quién se le ocurre hacer un remake de esta novela tan maravillosa?, ¿y yo voy a hacer el papelazo de 'Catalina Creel'?, ¡ni muerta, ni muerta!'. No lo podía creer", contó la actriz a Aurora Valle en su programa Confesiones.
Aunque Mejía le insistió que se trataría de un exitazo (una serie novelada con perspectiva cinematográfica, según dijo alguna vez), ella no cambió de opinión ni con la presión que le llegaba por todos lados. Hubo un punto en que dudó de su decisión y consultó con su marido, quien le dio la respuesta que le dio paz.
"Le dije (a mi marido) 'estoy muy preocupada porque me están ofreciendo que haga yo a 'Catalina Creel' en el remake, pero no quiero, tengo la intuición de que no debo, no quiero hacerla. Ya hice Cuna de lobos, hice un personaje padrísimo, María estuvo genial, ¿qué voy a hacer yo ahí?, ¡nada, no tengo nada que hacer!'. (Él respondió) '¿no la quieres hacer?, pues no la hagas', le dije '¿y si me corren?', 'pues que te corran'". Bracho siguió montada en su no, ante la sorpresa de los involucrados.
Mejía continuó con sus planes y rodó el piloto de Por derecho de sangre con William Levy, Rafael Amaya, Danna García, Dominika Paleta. Fue Rebecca Jones quien aceptó el reto de ser la nueva 'Catalina Creel'. Como el productor no le guardó ningún rencor a la primera actriz, la invitó a ver las primeras escenas y... bueno, su intuición no le falló a Diana, "(después de verlas le dije) Pésimo, Chava".
"Nunca entendieron el personaje de 'Catalina Creel'. Lo hizo Rebecca, divina, la adoro, que en paz descanse, pero Rebecca —que siempre fue muy sexy— no quería entender que el personaje de 'Catalina' no era sexy, era asexuada", le contó a Valle.
"Le dije a Chava, 'lo que no han entendido es que ese personaje es asexuado, ese es el atractivo que tiene, no ama a nadie más que a su hijo, está locamente enamorada del hijo y no ama a nadie más; es asexuada, es una mujer que no sabes si es hombre, mujer, perro o cosa, no sabes qué es y tiene ese atractivo', y entonces Rebecca, que era muy sexy, quería salir con trajes de cuero rojos, chichi al aire, además quería sacar un parche cubierto de brillantes, y a la pobre por poco se le cae el ojo porque tenía que cargar eso", recordó.
No fue la única que se percató de la sensualidad que emanaba Jones.
En una conferencia de prensa por el inicio de grabaciones, William Levy, quien daría vida a uno de los hijos de la actriz, también lo notó y dijo "se ve sexy, tremenda mami que tengo".
El proyecto nunca salió al aire y no hay una versión oficial de por qué lo enlataron. Mejía volvió a hablar de su proyecto en 2012 cuando dijo que podría cambiar de formato serie cinematográfica a telenovela, pero siendo un año electoral, habría que esperar. "Estamos hablando de varias veces el presupuesto de una telenovela y por eso no es tan viable. Pero la empresa sí quiere hacer series, aunque continúan siendo algo segmentado".
Cuna de lobos sí tuvo su remake pero a cargo de Giselle González en 2019 y como lo había soñado Mejía, en una serie de 25 capítulos que, a decir del crítico Álvaro Cueva, se convirtió en una obra de arte ciento por ciento competitiva.
Pero para Bracho, sería preferible no hacer más refritos.