Estrategias para optimizar la salud cerebral y la capacidad cognitiva que puedes seguir ahora mismo

Es muy interesante tener la certeza de que sí podemos tomar parte activa en la optimización de nuestra salud cerebral. Si bien, algunas capacidades comienzan a mermar en la medida que envejecemos también es cierto que algunos factores que influyen en el bienestar cognitivo están en nuestras manos.

El riesgo de padecer enfermedades cerebrales responde, en un 60%, a variables que no podemos modificar, como la genética, los antecedentes familiares, la edad o el sexo, y 40% a nuestros propios hábitos y estrategias. Así lo explica James E. Galvin, quien dirige el Centro Integral para la Salud Cerebral de la Escuela de Medicina Miller de la Universidad de Miami.

Además, sabiendo que la salud cerebral influye en todo nuestro organismo, es claro que los hábitos saludables como una alimentación equilibrada y la práctica de actividad física ayudan a nuestro cerebro, pero hay más. Mucho más.

Es normal que con el paso del tiempo se nos haga un poco más difícil recordar nombres, o algunas palabras, o quizás se ralentice nuestra capacidad de reacción, pero nada de esto significa que estamos ante una enfermedad, sino que debemos tomar acciones para mejorar nuestra agudeza mental, cuidar la memoria, y optimizar la relación mente-cuerpo.

Para ello es importante tener en cuenta factores de riesgo que aumentan la susceptibilidad del cerebro como la hipertensión y el colesterol alto, que además representa un riesgo letal para la salud; la diabetes, la apnea obstructiva del sueño, el tabaquismo, el consumo de alcohol y otras sustancias adictivas, las lesiones, entre otros.

Por otra parte, las estrategias para optimizar nuestra salud cerebral, no solamente contribuirán con este objetivo, sino con muchos otros aspectos de la salud. La primera es mantener a raya enfermedades subyacentes, según recomendaciones de expertos de la Universidad de Miami. Esto quiere decir mantener en las mejores condiciones la salud cardiovascular, cuidando la presión arterial y los niveles de colesterol. También es importante cuidar la audición y la visión, así como la calidad de nuestro sueño y, por supuesto, la salud mental.

La segunda es mantener buen ánimo. Sí, esto es esencial para la salud cerebral. La conexión social con familiares y amigos, es mucho más poderosa para la salud y la longevidad de lo que podemos imaginar. Asimismo, probar nuevas experiencias estimula el cerebro, así como también la práctica de actividades en las que usemos la mente, como juegos y pasatiempos que realmente la ejerciten.

Disfrutar del tiempo al aire libre, así como tener un hobby sostiene nuestro ánimo en alto, nos conduce a tener relaciones sociales, nos brinda propósitos y nos ayuda a mantener nuestra salud mental esté en forma.

Por otra parte, el Hospital Privado de Comunidad en España, destaca que toda actividad que sea un desafío y un aprendizaje, es beneficiosa para estimular el cerebro. Por ejemplo, aprender un nuevo idioma, o practicar un nuevo deporte o aprender a tocar un instrumento musical. Además, recomienda la lectura diaria, sea de libros, revistas o diarios, así como también actividades que incentiven la creatividad, como la pintura o el baile.

Otra estrategia muy interesante es cambiar el pensamiento autocrítico y más bien fortalecer la percepción positiva de nosotros mismos. Fomentar la confianza y cultivar una autoimagen positiva no solo nos sintoniza con un estado mental más placentero, sino que también puede influir en el funcionamiento cerebral, preparándonos para abordar problemas de manera más eficiente, según explica para Real Simple la especialista Julie Fratantoni, jefa de integración y asociaciones de investigación en Center for BrainHealth de la Universidad de Texas, quien dice que esto se logra con la práctica.

La experta también menciona el valor de entrenar la memoria pensando más profundamente acerca de las cosas que aprendemos cada día. Por ejemplo, después de recibir información, sea un artículo en la prensa o una clase, cabe preguntarnos qué aprendimos de ello, cómo se incorpora este conocimiento a nuestra vida, cuál es la idea principal. Este pensamiento adicional genera nuevas conexiones cerebrales que nos permitirán recuperar la información más adelante de manera más fácil. Cuando practicamos esto con frecuencia, fortalecemos las redes frontales del cerebro, que son las encargadas de integrar la nueva información a nuestro conocimiento.

Por último, es importante que no confiemos la salud del cerebro a una fórmula mágica. Los suplementos alimenticios que prometen optimizar la salud cerebral, no siempre están respaldados científicamente, con lo cual solo optimizan el bolsillo del fabricante. Antes de recurrir a algunos de estos productos, lo mejor es acudir al especialista. Su médico general sabrá indicarle si realmente necesita algún complemento o nutriente adicional.

Este artículo tiene como finalidad ofrecer información general y educativa sobre temas relacionados con la salud y el bienestar. Sin embargo, esta información no debe ser considerada como un reemplazo del consejo de su doctor ni debe ser utilizada para realizar tratamientos sin supervisión médica. Yahoo no se hace responsable de ningún diagnóstico hecho por un usuario basándose en este contenido. Si usted está preocupado por su salud, siempre consulte a su médico de cabecera u otro profesional calificado de la salud antes de tomar cualquier acción.

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